Ciudad de México, 9 de diciembre de 2017. Para ayudar a los niños afectados por el sismo del 19 de septiembre, tres estudiantes de la licenciatura en Diseño de Indumentaria y Moda de la Ibero pusieron en práctica sus aprendizajes de la carrera.
Después de consultar a psicólogos y especialistas infantiles, Irina Pérez, Paola Chavero y Guadalupe Reza, de quinto, sexto y noveno semestre respectivamente, empezaron a trabajar en su propuesta: capas de tela suave que “abrazan” a niños de entre 4 y 8 años, con olor a lavanda y elementos que brillan en la oscuridad haciéndolas fáciles de localizar.
“El proyecto surgió porque vimos que después del temblor había mucha gente que estaba sufriendo de estrés postraumático, había muchos niños que no sabían cómo lidiar con estos sentimientos de inseguridad”, explica Pérez.
“Nos dimos cuenta de que había muchos niños que no se les estaba prestando atención o que los papás no sabían cómo darles esa seguridad que necesitaban recuperar”.
El trastorno por estrés postraumático se presenta después de experiencias atemorizantes y puede generar sentimientos de miedo, insomnio y ansiedad.
“Fuimos con un especialista en niños que nos comentó que atacar los sentidos, estimular los sentidos, era lo más viable para que un niño superara el trauma”, señala por su parte Chavero.
Las piezas de indumentaria, creadas en colores pastel, están acompañadas de narrativas a recomendación de los expertos.
Frida, Benito, Josefa y Miguel son una perrita, un zorro, una osa y un gato que comparten sus capas con los pequeños para protegerlos del miedo.
El temor que finalmente superan estos personajes se origina por un monstruo que vive debajo de la tierra y que, al despertar, la hace temblar.
“La hicimos pensando en una historia muy digerida, enfocada en los niños, que fuera fácil de entender y que no les recordara tanto el momento del temblor, pero que a la vez tuviera sutiles referencias”, cuenta Chavero.
Como siguiente paso del proyecto, las diseñadoras esperan poner a prueba las capas con ayuda de los especialistas que consultaron.
“Si los psicólogos creen que es un buen producto, tratar de incluir a más y más psicólogos que implementen las capas en sus terapias. Nosotras tres, que somos las que estamos en el proyecto, haríamos las capas en la primera etapa”, indica Pérez.
Los comentarios de los expertos se usarían para realizar mejoras a los diseños, dice Chavero, pero también sería necesario buscar opciones de financiamiento para crecer el proyecto.
Texto: Andrea Martinez de la Vega Maldonado- Agencia Reforma/ Foto: IBERO Diseño.
