Agencia Proceso
Ciudad de México
El Ejército y la Marina seguirán en las calles en tareas de seguridad pública internas, anunció este viernes el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.
En conferencia de prensa, el futuro presidente de México dio a conocer la decisión de su próximo gobierno de continuar con la política de seguridad que arrancó desde 2006, en el sexenio de Felipe Calderón, de utilizar a las fuerzas castrenses en tareas de seguridad pública.
Esto, tras afirmar que el combate a la delincuencia con militares y marinos es la única opción para enfrentar “la amarga realidad” por la que atraviesa el país y atender el problema de seguridad y violencia.
“Quiero ser lo más sincero: si no contamos con el apoyo del Ejército y de la Marina, no podríamos enfrentar el problema de inseguridad. En las circunstancias actuales no hay alternativa”, lamentó.
De las razones, López Obrador consideró que sería “una irresponsabilidad de su parte” retirar a marinos y militares de las calles, pues dejaría en “estado de indefensión” a los mexicanos, porque la Policía Federal “no está preparada para sustituirlos” en sus tareas.
“Siendo realistas, no se ha podido consolidar a la Policía Federal, no se avanzó. No quiero hacer cuestionamientos, pero sí tengo que informar con objetividad”, dijo.
El ex jefe de gobierno argumentó que, de acuerdo con la opinión de la gente, las policías estatales y municipales “tampoco están cumpliendo con su responsabilidad”.
Ante la sorpresa de su planteamiento, el presidente electo matizó que su gobierno buscará una salida gradual de estas dos fuerzas, pero reconoció que será un proceso para mediano y largo plazo y que se concretará una vez que se cuente con una Guardia Nacional “capaz de garantizar la paz y tranquilidad del país”.
Añadió que más adelante podría buscarse un cambio en el marco jurídico, una vez que se tengan resultados, pero no profundizó en el tema.
“Necesitamos resolver el problema con lo que más convenga. No se va a hacer ningún cambio en la ley de seguridad pública actual, en tanto no se tengan resultados. Vamos primero a operar con el marco legal actual”, aseguró.
El tabasqueño sostuvo que su gobierno cuidará que marinos y militares respeten los derechos humanos del pueblo y no reprimirlo.
“Sabemos que es un desafío gobernar al país en las circunstancias actuales, pero estamos convencidos de que si hay una verdadera administración, vamos a entregar buenas cuentas”.
Evalúa inseguridad con secretarios
Por otra parte, López Obrador comentó que las reuniones que tuvo esta semana con los secretarios de Marina, Vidal Francisco Soberón Sanz, y Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, fueron para conocer de primera fuente un diagnóstico del problema de inseguridad, así como las propuestas de éstos para enfrentarlo. Sin embargo, evitó mencionar en qué consistirían dichas propuestas.
Acerca del nombramiento de los futuros titulares de ambas dependencias, dijo que a mediados de octubre ya tendrá candidatos para ocupar esos cargos. Adelantó que deberán ser generales en activo y del más alto rango, ya sea general de división o almirante.
Reiteró que todos los días, a las seis de la mañana, encabezará reuniones de seguridad. “No voy a delegar esta responsabilidad, la voy a atender de manera personal, va a haber Mando Único, vamos a trabajar de manera coordinada y vamos a estar organizados”.
Que no usará el avión presidencial;
admite que recibió oferta de compra
El presidente electo reconoció que sí recibió una oferta de compra para el avión presidencial, un Boeing 787-8, que propone vender una vez que inicie su mandato.
“Sí, recibí un planteamiento de una empresa que quiere comprar el avión”, admitió el tabasqueño en su rueda de prensa.
Reiteró que se venderá la aeronave adquirida en 2012 en más de 218 millones de dólares pues, dijo, no hay marcha atrás, ya que no se subirá a este avión.
No se subirá “ni como me lo planteó el señor ayer: de que si lo compra, me lo va prestar para que vaya a países a cubrir mis compromisos de Estado. No, yo voy a seguir viajando en aviones de línea, aunque tenga que ir a China o a cualquier país”, sostuvo.
Ayer, el empresario Gustavo Jiménez Pons, sobrino de Rogelio Jiménez Pons, el próximo titular del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), se dijo interesado en adquirir el avión presidencial, y por ello se apersonó en la casa de transición de la calle de Chihuahua, en la colonia Roma, para entregar una carta de intención de compra a López Obrador.
Éste recordó que la decisión de venta de la aeronave también abarcará a “todos los aviones y helicópteros al servicio de los funcionarios públicos”, con el objetivo de que sólo queden los transportes que tengan que ver con la seguridad y protección civil y para traslados de enfermos.
Como parte del proceso de venta, indicó que primero se pedirá toda la información al actual gobierno sobre el avión presidencial y la flotilla total de aviones y helicópteros que están en servicio para los altos funcionarios públicos.
“Queremos saber si ya se pagó todo, si se debe, cuánto es de financiamiento y cuánto es la deuda”, advirtió. “Vamos a buscar no perder, no se trata de ganar, sino de no perder y que no haya afectación al erario”, justificó.
El proceso de licitación de venta iniciaría en los primeros días de diciembre próximo.
Agradece “prudencia” de Trump: últimamente no ha ofendido
Por otra parte, López Obrador expresó que el gobierno de Donald Trump ha sido muy prudente con los mexicanos, pues en los últimos meses no ha hecho comentarios ofensivos del país.
Así que envió un saludo a su homólogo de Estados Unidos: “Agradezco al presidente en turno el respeto que ha manifestado hacia nosotros y que de un tiempo a la fecha ya sido muy prudente al referirse a los mexicanos”.
Insistió en que su gobierno buscará una “buena relación” con el país del norte y en general con todos los países del mundo.
“Pensamos que necesitamos una buena vecindad. Lograr una relación de respeto y cooperación para el desarrollo”.
Respecto al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) estimó que las negociaciones “van por buen camino”, pero “todavía no se acaban”.
Humberto Hernández Haddad y Simón Levy, a la Sectur
El futuro secretario de Turismo federal, Miguel Torruco, dio a conocer la designación de Humberto Hernández Haddad y Simón Levy como próximos subsecretarios de Desarrollo y Regulación Turística, y de Planeación y Política Turística, respectivamente.
En las escalinatas de la casona donde despacha López Obrador, y sin mayor preámbulo, Torruco Marqués dio a conocer los nombramientos.
Avala a redactores de la
“Constitución moral”
López Obrador aprobó la conformación del grupo que redactará la “Constitución moral” que propuso en campaña: la va a coordinada por Jesús Ramírez Cuevas, quien será el vocero presidencial. Los otros integrantes serán José Agustín Ortiz Pinchetti, su consejero político; Enrique Galván Ochoa, columnista de La Jornada; y Verónica Velasco, esposa del productor Epigmenio Ibarra y cofundadora, con él, de la productora Argos.
En entrevista, Ramírez calculó que el documento quedará listo antes del 1 de diciembre, cuando López Obrador asuma la Presidencia de la República.
“Vamos a trabajar sobre documentos y trabajos ya hechos como la Cartilla Moral de Alfonso Reyes; temas sobre los valores comunitarios, las culturas indígenas; reflexiones éticas y morales sobre la vida social y sobre los temas, por ejemplo, que hace a una sociedad que esté en armonía y convivencia, y poner énfasis en los valores que pueden ayudar a la transformación del país”, expuso.
“Necesitamos volver a recuperar la educación cívica, la ética como parte de la formación educativa, y eso también va a tener que ser reflejado a nivel del gobierno, el código de ética de los funcionarios. En este caso, la Constitución moral es una idea de hacer un compendio de valores, ideas, que puedan ayudar a la transformación desde la perspectiva de la moral y de la ética”.
Ramírez aclaró que la “Constitución moral” no tendrá el carácter de ley, sino que será un tratado filosófico.
