Madrid, España, 18 de junio de 2021. El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, hizo ayer un llamamiento a una alta participación en las presidenciales de este viernes, que describió como “decisivas”, antes de sostener que acudir a las urnas es “un acto de virtud” que supone una muestra de apoyo a la República Islámica.
“El día de las elecciones es el día de la nación iraní. Hoy, el pueblo tiene el poder”, dijo Jameni, según informó la cadena de televisión iraní Press TV.
Jamenei resaltó en sus declaraciones que una alta tasa de participación en los comicios, de los que quedaron excluidos los principales candidatos moderados, tendría un “impacto único” sobre el poderío internacional de Irán y acusó a los rivales de Teherán de intentar fomentar una baja participación.
Así, indicó que los medios de comunicación occidentales y sus “mercenarios” intentaron desanimar a la población “porque alejarse de la votación es alejarse del sistema”, si bien incidió en que “la mayoría de la población demostró que harán lo contrario a lo que digan (los medios extranjeros)”.
En este sentido, cargó contra los países “en los que una tribu gestiona el Estado” y “la gente no puede diferenciar una urna de una caja de frutas” pero cuentan con cadenas de televisión que afirman que las elecciones en Irán “no son democráticas”, sin especificar a qué países se refiere.
El líder supremo iraní rechazó además que la votación no vaya a ser competitiva por la falta de candidatos moderados de peso y ante el claro favoritismo del jefe del aparato judicial, el ultraconservador Ebrahim Raisi, antes de apuntar a los enfrentamientos verbales durante los tres debates electorales.
Por ello, pidió a la población, y especialmente a los jóvenes, que acudan a las urnas para votar, al tiempo que argüyó que los jóvenes “siempre estuvo al frente e impulsando a otros hacia adelante”, según informó la cadena de televisión iraní Press TV.
En esta línea se expresó el presidente del país, Hasán Rohani, quien argumentó que “muchos de los adversarios y los que desean el mal a Irán quieren ver una baja participación” en las presidenciales, a las que no puede presentarse tras haber cumplido su límite de dos mandatos.
Los ciudadanos tendrán que decidir finalmente solo entre cuatro candidatos, ya que tres de los aprobados por el Consejo de Guardianes optaron en el último momento por retirarse de la carrera electoral.
Así, el único candidato reformista, Mohsen Mehralizadé, y los conservadores Alireza Zakani y Said Jalili se apartaron antes de la votación.
La decisión de Mehralizadé podría beneficiar al único candidato moderado, el exgobernador del Banco Central Abdolnaser Hemati, si bien Zakani y Jalili anunciaron tras retirar sus candidaturas que apoyan a Raisi, quien figura como favorito y candidato de consenso entre los conservadores iraníes, tal y como informó la agencia de noticias Tasnim.
Las elecciones serán un nuevo ejemplo de esta disputa entre conservadores y moderados, después de la clara victoria de los conservadores en las elecciones legislativas de 2020, en las que la participación fue la más baja desde la Revolución Islámica de 1979, muestra del desencanto de la población con la clase política iraní.
Más de 59 millones de iraníes están llamados hoy a las urnas para elegir un nuevo presidente, en unos comicios marcados por una presencia mayoritaria de candidatos conservadores y en los que está en juego la participación.
La tasa de participación figura como uno de los elementos clave de cara a pulsar el malestar popular, tras las múltiples movilizaciones contra la crisis y el sistema de gobierno en los últimos años. (Con información de Agencias).
Texto: Europa Press
