7 septiembre,2023 8:59 am

El caso del guerrerense Leodegario Aguilera, en libro de Artículo 19 sobre ataques a periodistas

 

Desaparecen a periodistas cuando publican algo que no le parece al gobierno, “y mi hermano publicó lo que se estaba robando René Juárez”, dice Ernestina Aguilera. Participa, en la conferencia la hija de Nelson Matus, quien reclama la falta de resultados a dos meses del asesinato

 

Acapulco, Guerrero, 7 de septiembre de 2023. La organización internacional defensora de periodistas, Artículo 19, presentó ayer en Acapulco un libro sobre cuatro comunicadores del país, dos asesinados y dos desaparecidos, uno de ellos es el guerrerense Leodegario Aguilera Lucas. Su hermana Ernestina Aguilera dijo en el evento que cuando desaparecen a un periodista es porque “publicó algo que no le pareció al gobierno”.

La oficiala de Verdad y Memoria de la organización pro libertad de expresión, María de Vecchi Gerli, informó de 37 agresiones contra comunicadores en Guerrero en 2022. Tita Radilla pidió a las autoridades que protejan a los periodistas “porque ellos son la voz del pueblo, son la voz que nos informa sobre qué está ocurriendo en nuestro país”, y la hija de Nelson Matus reclamó la falta de resultados a dos meses de su asesinato.

En la Sala de Juicios Orales de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Ernestina Aguilera afirmó que cuando algún periodista es desaparecido es porque “publicó algo que no le pareció al gobierno y en el caso de mi hermano pues es eso exactamente, investigó todo lo que estaba robando René Juárez Cisneros y se lo publicó y eso fue lo que lo molestó”.

Con la foto de Leodegario Aguilera de fondo y la leyenda: “¡Siempre libre hermano!”, su hermana relató que fue sustraído el 22 de mayo de 2004: “a partir de ese momento son muchas cosas las que se han vivido, la tristeza, el desamparo, el no saber dónde está, qué le hicieron, por supuesto que lo torturaron, por supuesto que le hicieron muchas cosas”.

Con una voz cada vez más entrecortada y unos ojos que a poco a poco se le llenaban de lágrimas, indicó que “el no saber es lo que mata, si llega la noche, si llega el día, si vas a comer, si vas a dormir y te preguntas: ‘¿en dónde estará?’. Y esa es una tortura que día a día la vivimos aquellos que tenemos a un desaparecido, aquellos que hemos vivido esta horrenda pesadilla”.

Aseveró que el dolor no es sólo de la familia, sino de la sociedad, “porque esa pluma no vuelve a escribir, porque esa pluma no ha denunciado hechos”, y expuso que la revista Mundo Político que dirigió su hermano se distribuía en ocho estados. Ernestina Aguilera compartió por varios minutos anécdotas de su hermano. Por un momento soltó el llanto y Tita Radilla, Paola Matus y María de Vecchi Gerli la abrazaron.

El libro editado por Artículo 19 y escrito por Paula Mónaco, incluye a María Esther Aguilar Cansimbe, reportera del periódico Cambio de Michoacán y considerada la primera mujer periodista desaparecida en el marco de “la guerra contra el narco”, dice la introducción de su capítulo.

También se puede leer el perfil de Moisés Sánchez, editor del periódico La Unión en la ciudad de Medellín, Veracruz, quien fue desaparecido en enero de 2015 y su cadáver fue encontrado semanas después. La cuarta historia es la de Rafael Murúa, fundador de una radio comunitaria en Santa Rosalía, Baja California Sur, que fue asesinado en 2019.

La oficiala de Verdad y Memoria de Artículo 19 en México y Centroamérica, María de Vecchi Gerli, dijo que después de estos crímenes, “las comunidades de periodistas también dejan de publicar o dejan de firmar las notas”. Expuso que Artículo 19 registra 32 desapariciones de periodistas entre el 2000 y el presente año, y documentó en 2022 696 agresiones a periodistas, de las cuales 37 son de Guerrero.

Tita Radilla, quien busca a su padre Rosendo Radilla, desaparecido en 1974, expuso que “la desaparición de personas es un crimen amargante que ha sido utilizado por los gobiernos para aterrorizar a la población”, y agregó que “han sido las familias las que tienen que salir a buscarles asumiendo todos los riesgos. Han dejado familia, trabajo, direcciones y todo, las familias de los periodistas también forman parte de esta tragedia”.

Preguntó si las autoridades han dado seguimiento a las recomendaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en 2009 y de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum) en 2006 sobre Leodegario Aguilera, “y hoy estamos aquí con Ernestina, su hermana, reclamando justicia, exigiendo verdad para él y todos los periodistas desaparecidos”, y también protección: “porque ellos son la voz del pueblo, son la voz que nos informa sobre qué está ocurriendo en nuestro país”.

Con la proyección en pantalla de algunas fotos de Nelson Matus, Paola Matus recalcó que su papá aprendió a ser reportero en la calle y “le gustaba la adrenalina, le gustaba mucho el ir, la emoción, el tomar la fotografía, el andar en la escena, el convivir también con los agentes policiacos”, pero también era “el deber de informar”.

Recordó su trayectoria en la revista Alarma, el portal Ágora y luego como fundador de Lo Real de Guerrero. Enseñó la última foto que le tomó en el evento organizado por el gobierno estatal por el Día de la Libertad de Expresión y relató al borde del llanto el último día que convivió con su papá, cuando Nelson Matus salió a trabajar el 15 de julio y Paola subía las notas a su portal de noticias.

Hizo un llamado a las autoridades “a ser más sensibles con el dolor, la palabra estamos trabajando ya nos la sabemos todos”, y sugirió que mejor investiguen. Mencionó que es la primera vez que hablaba en público para condenar el crimen contra su papá ocurrido hace dos meses y es que “su confianza en las instituciones sí la ha defraudado”.

El evento fue realizado en la Salta de Juicios Orales y asistieron estudiantes, algunos reporteros, los ex comisionados de la Comisión de la Verdad de Guerrero (Comverdad), Nicomedes Fuentes y Pilar Noriega, la presidenta de Familias de Acapulco en Busca de sus Desaparecidos, Emma Mora Liberato, y el coordinador del Colectivo Contra la Tortura e Impunidad (CCTI), Raymundo Díaz Taboada.

 

 

Texto: Ramón Gracida Gómez / Foto: Carlos Carbajal