Acapulco, Guerrero, 1 de julio de 2024. El presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco-Servytur), Alejandro Martínez Sidney, dijo que en Acapulco han cerrado casi 50 pequeños establecimientos por la extorsión, y esperó que una vez que entre la nueva presidenta de México, cumpla su compromiso de que este delito sea federal y se castigue como delito grave.
Consultado por teléfono luego del cierre de un gimnasio de la plaza Constituyentes, el empresario indicó que el delito de extorsión debe de ser federal y se debe castigar como se hace con el secuestro.
“Estamos en espera de las reformas constitucionales, y estaremos muy pendientes de que se reforme el Código Penal federal para que el delito de expresión se equipare al secuestro, y con esto la presidenta electa, Claudia Sheinbaun estaría cumpliendo un compromiso de campaña”, expresó.
Indicó que hay casi 50 negocios que han cerrado por el delito de extorsión en los últimos meses, principalmente en las áreas de servicios y comercios, como gimnasios, barberías, tlapalerías, ferreterías, y farmacias, y otros negocios.
El empresario dijo que a los comerciantes y pequeños propietarios, los delincuentes les exigen cantidades semanales, y es dependiendo del giro y el tamaño del local, y exigen que el dinero sea depositados a cuentas bancarias, pero no quiso abundar más al respecto.
El dirigente lamentó que los establecimientos están cerrando porque son fuentes de empleo, y hay familias que dependen de estos. Además de que las familias que tienen una inversión están migrando a otras ciudades del país ante el “cobro de piso”.
Texto: Jacob Morales Antonio / Foto: Archivo-Jesús Trigo
