27 junio,2024 8:58 am

El gobierno de Bolivia sofoca un intento de golpe y arresta al general que lo encabezaba

 

El presidente Luis Arce convocó al pueblo a movilizarse: “Aquí estamos firmes en Casa Grande, con todo el gabinete, con nuestras organizaciones sociales”. El general Juan José Zúñiga exigió “cambiar el Gabinete de gobierno” y liberar a los presos políticos entre ellos Añez y Camacho

 

Ciudad de México, 27 de junio de 2024. El gobierno de Bolivia ha sofocado apenas tres horas después el intento de golpe de Estado encabezado por el general Juan José Zúñiga, quien junto a unidades del ejército había tomado la plaza de Murillo de La Paz, centro del poder político del país.

Zúñiga, quien aseguró que nombraría un nuevo gabinete y liberaría a todos los “presos políticos”, como la expresidenta interina Jeanine Añez y Luis Fernando Camacho y “restablecerá” la democracia en el país, finalmente ha cejado en su empeño tras confrontar con el propio presidente Arce a las puertas de la sede del gobierno, quien le ha ordenado replegarse.

La retirada se ha producido después de que el presidente Luis Arce tomara posesión del nuevo mando de las Fuerzas Armadas.

Un general de alto rango y militares aliados intentaron asaltar ayer el palacio presidencial de Bolivia para luego retirarse rápidamente en un intento aparentemente fallido de golpe de Estado. Horas después, el general fue detenido en directo por televisión, según información de The New York Times

El presidente de Bolivia, Luis Arce, denunció ayer la presencia “irregular” de unidades del ejército, que se han desplegado en la plaza Murillo, en La Paz, en donde se encuentra la sede del gobierno.

Por su parte, el expresidente boliviano Evo Morales ha denunciado que se está gestando un golpe de Estado. “En este momento se despliega personal de las Fuerzas Armadas y tanquetas en la plaza Murillo”, ha escrito en sus redes sociales.

La televisión boliviana mostró a las fuerzas de seguridad con equipamiento antidisturbios ocupando la plaza principal de la capital administrativa, La Paz, un tanque camuflado embistiendo una puerta del palacio y soldados tratando de abrirse paso hacia el recinto.

Acto seguido, tan pronto como aparecieron, el general, Juan José Zúñiga desapareció, y sus partidarios de las fuerzas armadas se retiraron y fueron sustituidos por policías que apoyaban al presidente democráticamente electo del país, Luis Arce, según The New York Times.

Arce se aventuró a salir a la plaza Murillo, tras llamar al pueblo boliviano a que “se organice y se movilice en contra del golpe de Estado, en favor de la democracia”.

“Aquí estamos firmes en Casa Grande, con todo el gabinete, con nuestras organizaciones sociales”, ha enfatizado Arce, mientras la plaza Murillo de La Paz, está sitiada por unidades del ejército.

“¡Que viva el pueblo boliviano!”, gritó en un discurso televisado. “¡Que viva la democracia!”

Más tarde, desde el balcón de Palacio de gobierno, el presidente Luis Arce agradeció a la población por movilizarse rápidamente para frenar el intento de golpe de Estado.

“Nadie nos puede quitar la democracia que hemos ganado en la urnas”, dijo el mandatario boliviano.

“Seguiremos trabajando por el pueblo boliviano”.

 

Zuñiga dice que Arce le ordenó la intentona golpista y “evistas” dicen que fue un autogolpe

En total, el intento de incursión vespertina al palacio duró solo tres horas. Con el correr de las horas se hizo evidente que el plan de Zúñiga tenía poco apoyo.

Justo antes de su detención, Zúñiga afirmó, sin aportar pruebas, que Arce le había pedido que organizara la intentona golpista.

“El presidente me dijo que la situación está muy jodida, esta semana va a ser crítica. Entonces es necesario preparar algo para levantar mi popularidad”, afirmó Zúñiga. Momentos después, la policía se llevó al general en una camioneta blanca.

El ‘ala evista’ del gubernamental Movimiento Al Socialismo (MAS) ha acusado al presidente de Bolivia, Luis Arce, de realizar un “autogolpe” de Estado.

El seguidor del ex presidente Evo Morales César Dockweiler ha manifestado que la asonada ha sido un “autogolpe” para “fortalecer” a Arce en medio de una crisis económica, una teoría con la que también ha coincidido el diputado Héctor Arce Rodríguez, que ha tildado de “show montado entre Zúñiga y Arce”.

La Fiscalía de Bolivia anunció ayer por la noche que había abierto una investigación sobre Zúñiga “y todos los demás partícipes” de los acontecimientos del día, añadiendo que buscaría “la máxima sanción” para los responsables.

Los medios de comunicación locales habían informado que Zúñiga había sido destituido de su cargo esta semana, lo que algunos en el país creían que estaba relacionado con comentarios que hizo sobre el expresidente Evo Morales, mentor de Arce.

El intento de golpe de Estado se produce en un momento tenso para Bolivia, un país sin salida al mar de 12 millones de habitantes en América del Sur. Arce, político de izquierda y sucesor de Morales —una figura destacada de la política boliviana que fue el primer presidente del país perteneciente a una comunidad indígena— está actualmente en una disputa con su mentor por el control de su partido y en torno a quién será su candidato en las elecciones de 2025.

La economía boliviana atraviesa dificultades y Arce ha sido acusado de algunas medidas antidemocráticas, como la detención del opositor Luis Fernando Camacho y de la expresidenta Jeanine Áñez.

Por otro lado, Jeanine Añez repudió la movilización de Militares en plaza Murillo pretendiendo destruir el orden constitucional. “Arce y Evo deben irse a través del voto el año 2025. Los bolivianos defenderemos la democracia”, djo en X.

Durante el intento de toma del palacio, Zúñiga había ingresado brevemente en el edificio, según los periodistas locales, antes de salir y pronunciar un discurso rodeado de integrantes enmascarados de las fuerzas de seguridad. Criticó al gobierno de Arce y dijo que los militares estaban intentando instaurar “una verdadera democracia, no de unos cuantos”.

 

Reacciones internacionales

Los líderes de América Latina han salido ayer a rechazar lo que el gobierno de Bolivia ha calificado ya como un golpe de Estado, apelando al respeto de las instituciones y a la voluntad popular. Entre ellos:

Los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; de Colombia, Gustavo Petro; de Chile, Gabriel Boric, de Venezuela, Nicolas Maduro, de Cuba, Miguel Díaz-Canel;  de Uruguay, Luis Lacalle Pou; de Guatemala, Bernardo Arévalo.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien ha expresado desde hace tiempo su admiración por Arce y Morales, también condenó el intento de golpe de Estado, calificando a Arce de “auténtica autoridad democrática” de Bolivia.

La virtual presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, también ha enviado un mensaje de apoyo a Arce y acusó que el levantamiento de las Fuerzas Armadas Bolivianas es un atentado contra la democracia.

A su vez, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, ha expresado su condena “más enérgica” por lo sucedido. “El ejército debe someterse al poder civil legítimamente elegido”, ha instado.

La Unión Europea ha expresado ayer su condena del intento de “derrocamiento” y de “quebrantar el orden constitucional” en Bolivia, en medio del golpe de Estado liderado por el comandante del ejército, Juan José Zúñiga.

 

Texto: Europa Press y Agencia Reforma, con información de Agencias / Foto: DPA