Texto: Apro / Agencia Reforma / Foto: PRD
Ciudad de México, 4 de julio de 2018. El Partido de la Revolución Democrática (PRD) obtuvo el peor resultado de toda su historia, con una votación presidencial de sólo 2.3 por ciento y legislativa de 5 por ciento, casi al nivel de los partidos Movimiento Ciudadano (MC) y Verde Ecologista de México (PVEM).
Por el PRD no votaron ni sus militantes: oficialmente cuenta con cuatro millones de afiliados, pero en la elección presidencial sólo lo hicieron en su favor un millón 307 mil, equivalentes a 2.3 por ciento de la votación total, y 2 millones 338 mil para diputados federales, el 5.3 por ciento de la votación total, porcentaje con el que conservaría su registro.
En mayo, el PRD cumplió 29 años de su fundación y venía en declive desde que, tras la elección de 2012, Andrés Manuel López Obrador renunció a su militancia. Ese año, obtuvo 21.5 por ciento de la votación presidencial y seis años antes, en 2006, logró su máximo histórico con 35.31, y ahora sólo 2.3 por ciento.
El derrumbe en la votación del PRD se traduce también en su presencia en la Cámara de Diputados: en 2012, tuvo 99, en 2015 cayó a 58 y ahora, conforme a resultados preliminares, sólo tendrá 21.
El PRD, ya sin López Obrador y sin casi todos los fundadores, se hizo chiquito en la elección del domingo, pese a su alianza con el PAN: en porcentaje de 5.3 por ciento en diputados es semejante al 4.74 del PVEM y al 4.38 de MC.
El PRD perdió también los gobiernos de la Ciudad de México, Morelos, Tabasco, además de Veracruz y Puebla en los que se alió con el PAN, aunque este último está en litigio.
Perdió el PRD también Michoacán y en el Estado de México sólo retuvo Ciudad Nezahualcóyotl, su único enclave en todo el territorio nacional y apenas por una diferencia menor a los 10 mil votos.
No nos ahogó el tsunami pejista: Zambrano
De su lado, el coordinador del PRD en la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano, reconoció que su partido tuvo un severo descontón en las elecciones del domingo pasado.
No obstante, el legislador aseveró que su partido no está noqueado y mucho menos al borde de la sepultura.
“Quedamos () como el cuarto partido nacional, así fue decidido por la gente, 5.5., 5.4 (por ciento), hoy terminarán los cómputos distritales y saldrá la cifra definitiva”, expresó.
“No nos mataron, no nos ahogó el tsunami pejista el pasado domingo y seguiremos vivos por más actas de defunción que nos sigan bondadosamente otorgando”.
En conferencia en el Senado, Zambrano dijo que el PRD no sólo sigue siendo un partido importante, sino también indispensable en el espectro político del país.
A partir de los resultados del domingo, consideró, la izquierda democrática tendrá que reinventarse, reorganizarse y hacer una profunda autocrítica.
Sin embargo, aseveró que el PRD está dispuesto a seguir jugando y trabajando por mantener en alto sus banderas.
“Nuestras presencias parlamentarias ciertamente han disminuido, pero vamos a estar ante la paradoja de que los que fueron cubiertos por sus respectivas olas, uno de ellos, por ejemplo el PES va perder el registro y va tener diputados, una buena cantidad, más que el PRD, y sin registro, o el Panal, que va tener diputados, peros sin registro”, abundó.
“Son parte de los rejuegos, de los procesos democráticos y que hay que revisarlos y desde luego dispuestos a seguir adelante”.
