28 septiembre,2024 5:53 am

El río Balsas se desborda en varios sitios y deja incomunicada a la región de Tierra Caliente

Ciudad Altamirano, Guerrero, a 28 de septiembre de 2024.- En Tierra Caliente hay problemas de comunicación entre los nueve municipios de la región, debido al crecimiento del río Balsas luego de los desfogues de la presa El Caracol, que ya provocó la caída de puentes, el corte de carreteras y que más de 250 personas acudieran a los albergues.

Uno de los municipios más afectados es el de Coyuca de Catalán, donde el presidente municipal, Eusebio Echeverría Tabares, dijo en entrevista que no ha podido llegar a todas las comunidades de su municipio, de las cuales tiene el conocimiento de que hay varias casas inundadas.

La carretera de Coyuca de Catalán a Ajuchitlán sufrió un corte a 2 kilómetros de la cabecera municipal, porque se cayó el puente del río Curio. Esa afectación dejó incomunicadas a unas 20 comunidades y caminos que van hacia la sierra.

Esa ruta tiene otra salida hacia Ajuchitlán, llegando por Tlapehuala, pero en esa localidad cerraron el puente por precaución, debido al alto nivel que presentaba el río Balsas y el agua se encontraba a 1 metro de la plataforma puente.

El camino de Ajuchitlán a San Miguel Totolapan está bloqueado porque el terraplén del puente lo arrastró el río Las Truchas.

De Ciudad Altamirano hacia Iguala está bloqueada la carretera federal, a 5 kilómetros, porque un arroyo creció alrededor de 1 metro y medio de altura, de forma que no pasan los vehículos. Inlcuso así, algunas personas se están animando a cruzarlo caminando o nadando, para llevar comida a sus familiares.

En Tlapehuala, también sobre la misma carretera 51, está bloqueada la entrada, viniendo desde Ciudad Altamirano, y se cruza en lancha para trasladar víveres.

La carretera de Ciudad Altamirano a Coyuca de Catalán está cerrada, porque el río Balsas creció unos 500 metros más de su cauce natural, por lo que la carretera está atravesada por la corriente.

Uno de los sentidos está abierto, por donde pasan algunas camionetas y carros altos y pesados, para trasladar víveres.

El otro de los carriles se cerró, porque al parecer ya fue tapado por la corriente y quedó intransitable.

En Coyuca de Catalán se reportaron unas 50 personas en albergues, ubicados en escuelas primarias de la cabecera municipal. El presidente municipal dijo que ha sido complicado llegar a los pueblos, sobre todo en la franja que va hacia Santo Domingo, en donde reportaron varias casas inundadas, así como en Río Florido y Las Tinajas, que son pueblos que están al borde del Balsas. Sin embargo, el bloqueo de caminos no ha permitido llegar a esos lugares.

También el presidente municipal de Tlapehuala, José Luis Antúnez, reportó que tenía 100 personas en albergues de la cabecera municipal. En entrevista, el presidente dijo que estaba preocupado por el pueblo Nuevo Guerrero, que es una localidad a donde no habían podido llegar, por el bloqueo de caminos debido a la creciente del río.

En Ciudad Altamirano hay otras 100 personas refugiadas en dos albergues, uno es el templo Cielos Abiertos, de Tierra Blanca, con 80 personas de la localidad, que es la más afectada de este lugar, y en las instalaciones del DIF, donde hay otras 30 personas de diferentes colonias.

No mencionan a Tierra Caliente en los reportes estatales

Los cortes en las carreteras no ha permitido la llegada de todos los grupos locales, representantes del gobierno estatal; sin embargo, los mismos municipios han estado atendiendo sin problemas la zona de los albergues y la evacuación.

No obstante, les preocupa que el gobierno estatal no se ha pronunciado acerca de la situación en Tierra Caliente, lo que permitiría la llegada de presupuesto para la reconstrucción de carreteras y caminos.

Los alcaldes señalaron que han enviado sus reportes al gobierno estatal, pero no han tenido respuesta de la oficina de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda.

Tampoco se ha mencionado la situación en las redes sociales del gobierno estatal, acerca de alguna atención que tengan para esta región.

Protección Civil regional ha estado haciendo los recorridos, así como se ha coordinado con Sedena y Guardia Nacional para atender las evacuaciones.

Sin embargo, lo que más les preocupa a los alcaldes es que, una vez que concluya la etapa de emergencia y venga el tiempo de la reconstrucción, no tendrán presupuesto para atender los desastres en carreteras y caminos, que además requerirán atención de urgencia, para permitir la llegada a lugares como de Ciudad Altamirano a Coyuca de Catalán, de Coyuca de Catalán hacia Ajuchitlan y de Ajuchitlán a San Miguel Totolapan.

Texto y foto: Israel Flores