21 septiembre,2024 8:59 am

En playa Tamarindos develan antimonumento a los desaparecidos como símbolo de resistencia

Asiste la encargada de la Secretaría de Gobierno, Anacleta López Vega. “Somos muchas las madres, hermanas y hermanos que hemos visto cómo nuestros seres queridos se desvanecen en medio de la indiferencia y la impunidad”, dice en en la ceremonia Emma Mora Liberato

Acapulco, Guerrero, 21 de septiembre de 2024. La tarde-noche de este viernes fue develado el antimonumento a los desaparecidos denominado La Esperanza en la avenida Costera, frente a playa Tamarindos.

Con la presencia de la secretaria de Gobierno, Anacleta López Vega, y la ausencia de la alcaldesa Abelina López Rodríguez, fue develada la obra que, manifestaron los oradores, es un símbolo para no olvidar que en Acapulco hay desaparecidos.

En su mensaje la integrante la Familias de Acapulco en Busca de sus Desaparecidos, Emma Mora Liberato, dijo que ese antimonumento simboliza la resistencia y la memoria de los desaparecidos.

Indicó que la lucha es de muchas familias que están sumidas en el mismo dolor, porque “no soy la única en esta situación, somos muchas las madres, hermanas y hermanos que hemos visto cómo nuestros seres queridos se desvanecen en medio de la indiferencia y la impunidad”.

Añadió que cada historia de desaparición es una “herida abierta en el tejido social de Acapulco. Una herida que no sanara hasta que encontremos la verdad y se haga justicia”.

Dijo que el antimonumento “es más que una estructura física, es un símbolo de resistencia y de memoria. Representa a cada una de las personas desaparecidas, a cada familia que vive con el dolor de su ausencia y la incertidumbre”.

Añadió que es un recordatorio constante que “nuestros desaparecidos no son cifras ni estadísticas, sino personas con vida, sueños y familia que los aman y esperan”.

Mora Liberato hizo un llamado a las autoridades porque “necesitamos su apoyo, su comprensión real y efectiva para buscar a nuestros seres queridos. No pedimos favores, Exigimos nuestro derecho a la verdad y a la justicia”.

Agregó la madre buscadora que es “inaceptable que las desapariciones sigan ocurriendo y que a menudo nos enfrentemos a la apatía y la burocracia cuando buscamos ayuda”.

Mora Liberato hizo un llamado también a la sociedad porque “no podemos normalizar el dolor ajeno ni acostumbrarnos a vivir entre el miedo y la indiferencia. Necesitamos unirnos y alzar la voz de quienes no pueden hacerlo y trabajar juntos para construir un Acapulco donde la paz y seguridad sean una realidad para todos”.

Subrayó que el antimonumento es símbolo y es el reconocimiento de una crisis que ya a durado demasiado y es “una señal de que no nos rendirnos, es una llamado a la conciencia colectiva y no olvidar a quienes nos faltan y trabajar juntos para prevenir que más familias sufran este dolor”.

Pidió que los apoyen en sus causas y compartir las historias, que difundan las fotografías de sus familiares y que den información porque “por muy pequeña que sea puede ser crucial para encontrarlos. La solidaridad y el apoyo de la comunidad son fundamentales en esta batalla”.

A las familias que están pasando por ese dolor les manifestó que no están solas porque “juntas y juntos somos más fuertes y seguiremos buscando y luchando hasta encontrar nuestros seres queridos. Nuestro amor es más grande que el miedo, nuestra determinación es más fuerte ante cualquier obstáculo”.

El delegado Regional de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos en Acapulco, Pedro Arrieta, manifestó que la develación del antimonumento es producto del reclamo y del dolor por lo que no es un elemento decorativo sino “tiene la intención de generar reacción, sacudir, provocar y sensibilizar a todas las personas sobre una herida que continúa permanentemente abierta”.

“Es apropiarse de un espacio público para exigir y crear conciencia para la verdad y la justicia”. Dijo que en la Comisión Estatal de los Derechos Humanos “encontrarán una institución aliada” y que buscarán contribuir en la causa de los desaparecidos.

El sacerdote Jesús Mendoza Zaragoza manifestó que ese antimonumento va a ayudar a recordar, porque “Dios nos dio el don de la memoria y la memoria la tenemos para que nunca olvidemos”.

Destacó que la esperanza es la que mantiene vivo y en lucha, “nos va a recordar que en este puerto de Acapulco el dolor de muchísimas familias que no se nos olvide porque juntos podemos hacer este camino para sanar ese dolor buscando a los desaparecidos de esta ciudad”.

Pidió en su oración que Dios nos libre de más desaparecidos, más asesinatos, que libre de las extorsiones, que libre de los desplazamientos forzados.

La creadora de la escultura, Azar Evans, manifestó que esa obra era un recordatorio de los desaparecidos.

“Esta pieza es un símbolo de nuestro compromiso de recordar aquellos que ya no están con nosotros, de honrar su memoria y de luchar por un mundo donde la violencia no tenga cabida, es un recordatorio de que a pesar de todo la esperanza nunca se pierde, siempre hay luz al final del túnel”, comentó Aza Evans.

Es una obra de esperanza, que incluso en los “momentos de vacío en nuestro corazón, de la adversidad es cuando más necesitamos aferrarnos en la esperanza”.

El subsecretario de Asuntos Políticos, Octavio León Rubio, dijo que el gobierno municipal seguirá apoyando a todas las organizaciones.

Al finalizar el acto fueron colocadas veladoras con las fotografías de las personas desaparecidas.

Texto: Karina Contreras