31 octubre,2024 3:58 am

En proceso, el regreso de Salud federal a la Cdmx, tras la fallida descentralización

 

Acapulco, Guerrero, a 31 de octubre de 2024.- La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo busca regresar la sede de la Secretaría de Salud (Ssa) federal de Acapulco a la Ciudad de México, lo que pondría fin al intento de descentralización de su antecesor Andrés Manuel López Obrador, que nunca se concretó y que deja en la incertidumbre a decenas de trabajadores presionados a renunciar si se niegan a trasladarse a la capital del país.

El cambio de sede de la dependencia federal enfrentó problemas desde que comenzó el traspaso en 2021 porque el gobierno nunca convenció a todos los trabajadores a trasladarse a Acapulco, principalmente porque se opusieron los sindicalizados.

Los altos mandos de Salud federal nunca radicaron en Acapulco, sólo se establecieron trabajadores de confianza que se regresaron a la capital del país cuando en 2023 desapareció el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), la única área que sí fue trasladada completamente. El huracán Otis aceleró el desmantelamiento de las oficinas en el Edificio Inteligente.

Estimó que el cierre de la sede provocará la pérdida de empleo para unas 700 personas, por lo que pidió certidumbre laboral para todos.

Documentos consultados por El Sur de los convenios de hoteles, inmobiliarias e instituciones educativas con la Ssa federal, demuestran que sí hubo una intención de incentivar a los trabajadores a mudarse a Acapulco, pero los empleados oriundos de esta ciudad no están recibiendo los mismos beneficios en el actual proceso.

Aún no hay un aviso oficial del nuevo cambio de sede de la dependencia federal, pero hace unas semanas los trabajadores fueron presionados para irse a vivir a la capital del país o renunciar a su puesto de trabajo. Sin recursos económicos suficientes para trabajar en la Ciudad de México, optaron por la segunda opción, pero piden certidumbre laboral en lo que se formaliza el cambio de sede.

Llega la Ssa a Acapulco de manera incompleta

En una visita a Acapulco el 3 de octubre de 2018, Andrés Manuel López Obrador anunció que la nueva sede de la Ssa federal sería el Edificio Inteligente de Acapulco, como parte de un proceso nacional de descentralización de la administración pública federal.

El proceso fue pausado tres años hasta que el 3 de octubre de 2021, el entonces secretario de Salud federal, Jorge Alcocer Varela, realizó un recorrido por las nuevas instalaciones junto con el aún gobernador Héctor Astudillo Flores y la mandataria estatal electa, Evelyn Salgado Pineda.

El secretario afirmó en la conferencia matutina del 12 de octubre que ya estaban en Acapulco los titulares y algunos empleados de la Subsecretaría de la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud, de la Unidad de Análisis Económico, la Unidad de Administración y Finanzas, las oficinas del titular de la dependencia federal y el Insabi.

Previó que en enero de 2022 se fueran a sumar 200 trabajadores más de la Ssa federal y de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), y otros 120 de Insabi, por lo que estimó que a finales del primer semestre de ese año estarían laborando en Acapulco alrededor de mil 200 trabajadores.

Dijo que la reubicación de las demás áreas sería de manera voluntaria y progresiva, “se trabaja en generar los apoyos correspondientes que merecen los trabajadores de los rubros en vivienda, salud, educación laboral y transporte”.

Comentó que, de acuerdo con una encuesta realizada a efecto de conocer el universo del personal con intención de cambio de residencia, 944 de 4 mil 600 respondieron afirmativamente, lo que significó que sólo el 20.5 por ciento tenía la intención de trasladares mientras que el 80 por ciento restante no.

Para este 80 por ciento hubo el ofrecimiento de solicitar su cambio de adscripción o adherirse a un programa de retiro voluntario, “considerando todos sus derechos de ley e igualmente se considerará al personal que desee acelerar su proceso de jubilación”.

El 11 de febrero de 2022 fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el cambio de domicilio de la Ssa federal a Acapulco, pero el documento puntualiza que las únicas áreas trasladas son la Oficina del secretario, la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud y la Dirección General de Políticas de Investigación en Salud. El resto de las oficinas se quedaron en la Ciudad de México.

Los incentivos para venir a Acapulco

Documentos a los que tuvo acceso El Sur muestran los incentivos que la Ssa federal ofreció a sus trabajadores de la Ciudad de México, en particular, en el acceso a la vivienda y la educación en Acapulco.

La dependencia federal realizó convenios con hoteles para que los trabajadores tuvieran estancias largas con precios bajos. Por ejemplo, el Holiday Inn Resort y Alba Suites, en este último había cuartos de 7 mil 500 pesos por tres meses.

Casas Ara promovió el uso del crédito de Fovissste en su tres unidades habitacionales en Acapulco, y el desarrollo Banús Diamante ofreció descuentos de 50 mil pesos y enganches bajos para los departamentos con cancha de tenis, spa, sauna, gimnasio y alberca.

La aún existente Universidad Americana de Acapulco ofreció en un documento de junio de 2022 descuentos en las inscripciones y colegiaturas, además de impartir cursos especiales y promover talleres, al igual que la Universidad Español.

Sólo llegaron empleados de confianza; altos mandos hacían visitas

Alrededor de 500 trabajadores provenientes de la Ciudad de México sí se trasladaron a Acapulco, pero eran de confianza, no basificados que “se opusieron”, señaló una trabajadora administrativa en entrevista con El Sur bajo condición de anonimato.

Comentó que los altos mandos nunca radicaron en Acapulco. Por ejemplo, el secretario Alcocer Valera venía una vez cada mes, y el titular de la Unidad de Administración y Finanzas, Marco Vinicio Gallardo Enríquez, una vez por semana.

El traspaso a Acapulco “nunca se logró completamente” porque en general, las diversas áreas tenían poco personal y los que provenían de la Ciudad de México regresaban constantemente.

El único que sí estuvo “de planta” en Acapulco fue el titular del Insabi, Juan Antonio Ferrer Aguilar, y su equipo de trabajo: ·era un mundo de gente· en 2022, cuando fue contratada la trabajadora entrevistada, una de los casi 100 administrativos oriundos del municipio Guerrero que llegaron a laborar en la dependencia federal.

El 4 de marzo de 2023, Alcocer Varela inauguró la ampliación de las instalaciones del Insabi en el Edificio Inteligente con una superficie de mil 414.69 metros cuadrados con 150 lugares de trabajo habilitados.

El desmantelamiento de la sede en Acapulco

En 2019, fue aprobada la eliminación del Seguro Popular y la creación del Insabi, sin embargo, el nuevo organismo descentralizado recibió críticas por la falta de claridad de su función.

“Es urgente que la transición al Insabi asegure la atención efectiva de la población y el pleno conocimiento sobre su funcionamiento y disponibilidad”, señaló el Coneval en 2021, cuando dio a conocer que la carencia por acceso a los servicios de salud aumentó de 16.2 a 28.2 por ciento en la población del país 2018 a 2020 y en Guerrero de 13.8 a 33.5 por ciento.

El 25 de abril de 2023, la Cámara de Diputados aprobó la desaparición del Insabi y sus funciones se integraron al IMSS-Bienestar. Esto provocó que en Acapulco los trabajadores de la Ciudad de México se regresaran a su entidad de origen “felices porque obviamente ya no tenían que estar manteniendo dos hogares”, indicó la trabajadora.

Pese a ello, Ferrer Aguilar como titular de la Subsecretaría de Integración y Desarrollo del sector Salud (SIDSS), “siempre se mantuvo firme y en postura que se siguiera manteniendo al personal de Acapulco contratado, él pensaba mucho en el tema de que eran fuentes de trabajo para ayudar aquí a Guerrero, y en especial a Acapulco”.

La incertidumbre por el cambio de gobierno

El 11 de enero pasado, López Obrador reconoció que seguía pendiente la descentralización de la administración federal, pero lo justificó por el paso de la pandemia de Covid-19. Mencionó algunas dependencias que sí fueron trasladas a los estados como Energía a Tabasco o Cultura a Tlaxcala, pero no habló de Salud a Guerrero.

“Yo pienso que sí es muy importante la descentralización, hay que crear las condiciones porque muchos trabajadores necesitan tener facilidades para sus viviendas, las escuelas de sus hijos, es un proceso que se tiene que ir logrando”.

Hace tres semanas, funcionarios federales de la nueva administración les dijeron a los trabajadores con sede en Acapulco que se tienen que ir a la Ciudad de México: “nos comienzan a condicionar: si no firmábamos la renuncia en ese momento, nos teníamos que ver obligados a irnos a la Ciudad de México y eso para muchas personas no les convenía” por los altos costos de las rentas.

Aún no hay una orden presidencial del cambio de sede, pero el titular de la Ssa federal, David Kershenobich, y el titular de la SIDSS, Eduardo Clark, comenzaron a incentivar a los trabajadores a trasladarse a la Ciudad de México. Una administrativa logró plantearle el tema a Sheinbaum Pardo en su visita del domingo pasado a Acapulco, y la mandataria federal le dio a entender que la instrucción proviene de ella misma.

La trabajadora consultada por este periódico criticó que en este nuevo cambio de sede no les están ofreciendo los incentivos que sí les dieron a sus compañeros para motivarlos a Acapulco.

“Como yo no acepté irme a la Ciudad de México, a mí ya me hicieron firmar mi renuncia con fecha del 31 de diciembre; y ya con eso, si yo ahorita quiero cambiar de opinión, pues ya no lo puedo hacer porque no me quise ir a México el 4 de noviembre, que era la fecha límite para que nosotros nos fuéramos”.

Texto: Ramón Gracida Gómez/ Foto: Jesús Trigo