Cdmx / Maxcanú, Yucatán, 8 de marzo de 2021. El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la valla levantada en torno a Palacio Nacional no es por miedo a las mujeres sino una medida de precaución para evitar provocaciones.
“Nunca vamos a reprimir al pueblo jamás… es mejor poner una valla que poner frente a las mujeres que van a protestar a los granaderos, como era antes, no los podemos enfrentar, tenemos que evitar eso, que no haya violencia, que nadie salga dañado, herido.
“Y también que quede claro, yo no soy machista, yo estoy a favor del derecho de las mujeres, estoy a favor de la igualdad, siempre he estado”, dijo.
En un mensaje grabado en Palenque, el mandatario insistió en que desde la derecha se ha desatado una campaña en contra de él y de su Gobierno por la colocación de esas vallas.
“Se ha desatado una campaña de desprestigio en contra del Gobierno y de mi persona. La derecha está muy ofuscada, molesta, irritada y se vuelven ambientalistas o feministas el propósito es atacar al Gobierno.
“Les molestó mucho porque pusimos una valla para proteger al Palacio Nacional, no es por miedo a las mujeres, es por precaución porque las fuerzas conservadoras son muy retrógradas, muy autoritarias, infiltran gente para generar violencia, para dañar”, reiteró.
Pide protestar de manera pacífica
El político tabasqueño dijo que no se puede permitir que vandalicen el Palacio Nacional y cuestionó que se quiera tener “una gran nota” por colocar la valla de protección.
“Nos están acusando de todo”, advirtió.
López Obrador sostuvo que se puede protestar pero de manera pacífica, incluso con insultos a la autoridad, pues para eso hay libre manifestación de ideas.
“Pero tenemos que cuidar el patrimonio histórico y cultural de México y no caer en la trampa de la violencia de estos provocadores”, aseveró.
“Son muy autoritarios y lo voy a decir, fasistoides los conservadores. Es Hitler, es Franco, es Pinochet, así piensan, qué tiene que ver eso con el feminismo, al contrario, es opuesto al movimiento feminista”.
A tono con lo expuesto por López Obrador, diputadas de Morena aseguraron que las vallas colocadas frente a Palacio previo a la marcha del 8 de marzo son necesarias para evitar confrontaciones entre mujeres y quienes resguardan el edificio, además de salvaguardar monumentos históricos.
Bloqueos y gritos… contra AMLO
“Esta india se levanta”, expresó a gritos, enojada, Margarita Torres Sansores, quien se ostenta como “gobernadora maya” de Yucatán.
Entró a empujones a la zona donde el presidente Andrés Manuel López Obrador supervisaba los trabajos del Tren Maya para recordarle que tiene una deuda con los ejidatarios indígenas.
Los militares vestidos de civil que se encargan de la seguridad perimetral del mandatario lograron retenerla mientras el tabasqueño daba su discurso. Las mujeres militares la abrazaron y la contuvieron, hasta que se zafó. Corrió hacia el evento con las rodillas raspadas, quejándose del trato. Pero el Presidente ya había partido.
Margarita traía en mano un documento. Dijo que se trata de un “fideicomiso” en el que el gobierno se comprometió a pagar las tierras de ejidatarios, por donde pasará el Tren Maya.
“Yo le di mi voto al señor presidente, y traigo un fideicomiso firmado en 2019 cuando se hizo el plan del Tren Maya y lo apoyamos, movimos a nuestra gente, nos pidieron videos, se hicieron las famosas asambleas, acarrearon gente de los pueblos, apoyamos el proyecto”, recordó la señora, furibunda.
“En 2020 no hubo respuesta, y ahora en 2021 tampoco hay respuesta, nos tachan de revoltosos porque protestamos en la última asamblea porque no le han pagado a los indígenas, se metieron a sus tierras, todo eso es una infamia, una violación al derecho”, añadió Margarita, quien aspira además a una diputación federal.
Alegó que las constructoras yucatecas necesitan trabajo y que la CATEM de Pedro Haces les pide “cuota” de 300 pesos a los trabajadores para colocarlos en la obra del tren.
“Si no se soluciona esto no hay proyecto del Tren Maya y si se derrama sangre, que se derrame”, advirtió.
Pese a la suspensión judicial, el presidente supervisó el avance del tramo 3 Calkiní-Izamal, en la localidad de San Patricio, donde por ahora sólo se observan máquinas que tiran árboles y aplanan para la colocación después de durmientes y vías.
En otros tramos se observan las vías deterioradas del antiguo tren del sureste, que son retiradas para la colocación de piso firme. “Será un tren espectacular, con vista a la selva y al mar turquesa”, prometió.
Y lo interceptan
Una representación de maestros interceptó al Mandatario en el entronque de la Carretera Maxcanú-Muna, cuando se dirigía a su evento para supervisar las obras del Tren Maya.
Los docentes en activo y retirados demandaron al Presidente López Obrador que revierta el pago de jubilaciones del ISSSTE en UMA y siga vigente el cálculo máximo en salarios mínimos. Además que atienda los “adeudos” del Programa de Escuelas de Tiempo Completo (PETC).
Para hacer detener al convoy oficial, los manifestantes cerraron momentáneamente el paso, mientras desplegaban pancartas y exponían sus demandas.
Sin bajar el cristal de la ventanilla de su camioneta, López Obrador escuchó los reclamos.
“Se necesita bloquear eso, no queremos paliativos, queremos lo que usted sabe hacer: ver por los demás. Estamos confiando en que va a hacer algo definitivo, no algo paliativo. Somos gente trabajadora, ya he trabajado casi 40 años y me quería jubilar, ahora ya no me voy a jubilar porque yo no merezco ganar menos”, planteó Susana Cordero, una de las docentes.
Tras breves minutos, el presidente continuó su marcha hacia San Bernardo, municipio de Kopomá, donde encabezó otra supervisión de obras del Tren Maya.
El sábado, en Tabasco
Antes, el sábado, en Tenosique, Tabasco, el presidente Andrés Manuel López Obrador concluyó también las visitas de supervisión de las obras del Tren Maya.
Constató el avance del 84.14 por ciento, equivalente a 35.34 kilómetros de los 42 que se tiene como meta para finales de este mes, en el tramo 1 de Palenque a Escárcega.
La extensión total del recorrido es de 228 kilómetros a lo largo de los estados de Chiapas, Tabasco y Campeche en los que estarán las estaciones Palenque, Boca del Cerro y El Triunfo, además de varios paraderos.
El mandatario dijo que regresará en tres meses a supervisar el progreso de la obra y llamó a redoblar los esfuerzos para terminar el proyecto en 2023. Dijo que “no podemos fallar. (…) Debemos ir hacia adelante y terminar a tiempo”.
A cargo de la construcción del tramo 1 están las empresas Mota-Engil México y China Communications Construction Company.
El director del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons, indicó que se espera alcanzar un avance de 95 kilómetros en los próximos tres meses.
Texto y foto: Agencia Reforma
