Ciudad de México, 11 de junio 2023. El ex presidente Donald Trump tachó ayer la histórica acusación federal en su contra de “ridícula” e “infundada”, mientras intentaba proyectar una sensación de normalidad, un día después de que se dieran a conocer los 38 cargos que enfrenta por su mal manejo de documentos clasificados tras dejar la Casa Blanca.
Arropado por cientos de sus partidarios en las convenciones estatales republicanas de Georgia y Carolina del Norte, Trump dijo que la acusación del Departamento de Justicia era un intento de dañar sus posibilidades de regresar a la silla presidencial, en un hecho que, dijo, “es la batalla final”.
“Han lanzado una cacería de brujas tras otra para tratar de detener nuestro movimiento, para frustrar la voluntad del pueblo estadounidense”, alegó en Georgia.
Recibió fuertes aplausos cuando criticó la investigación como “un éxito político” y acusó a sus adversarios de lanzar “un engaño” para impedir su reelección.
Al final, apuntó, “no vendrán por mí, sino por ti”.
“La acusación ridícula e infundada del Departamento de Injusticia armado por la administración Biden quedará registrada como uno de los abusos de poder más horribles en la historia de nuestro país”, lanzó más tarde en Carolina del Norte.
Revelada el viernes, la acusación señala al ex presidente de desafiar deliberadamente las demandas del gobierno de devolver documentos clasificados que retuvo en su club privado de Mar-a-Lago tras dejar la Casa Blanca, reclutar ayudantes para ocultar el material e incluso presumirlo a sus invitados en su residencia.
La investigación del fiscal especial Jack Smith incluye una amplia evidencia de cómo Trump almacenó los documentos -entre ellos, algunos relacionados con programas nucleares sensibles- en un salón de baile y hasta en un baño del resort.
Está previsto que el ex presidente comparezca el martes ante un tribunal en Miami.
Trump describió ayer al Departamento de Justicia como “un nido de personas enfermas que debe ser limpiado de inmediato”, y llamó a Smith “trastornado” y “abiertamente un enemigo” suyo.
Además, calificó de “lunática marxista” a Fani Willis, una fiscal de Georgia que está sopesando cargos penales en su contra en una investigación separada por su intento de anular el resultado electoral de 2020.
Pese a sus crecientes problemas legales, Trump prometió permanecer en la carrera para los comicios de 2024, incluso si es condenado en el caso.
“Nunca me iré”, le dijo a político en una entrevista a bordo de su avión después de su discurso en Georgia.
Trump apareció en un momento con su asistente Walt Nauta, quien también está incluido en la acusación y enfrenta cargos por ayudarlo a ocultar los documentos clasificados.
En una parada en Waffle House, en Georgia, acompañó al ex presidente mientras este firmaba autógrafos y posaba para fotos.
Texto y foto: Agencia Reforma
