Vecinos señalan que no han acudido las autoridades de la Dirección de Protección Civil municipal, para que les informen sobre la situación y tomar las medidas de prevención
Chilpancingo, Guerrero, 6 de junio de 2020. La joven Vivian Guadalupe, que vive desde hace 15 años en la barranca Las Cuevitas, ubicada en la colonia Alianza Popular, es miembro de una de las 800 familias que habitan en zonas de alto riesgo en la capital.
La joven, junto con seis familiares, vive en una casa de madera, con paredes de cemento y techo de lámina, en la calle cerrada Heroico Colegio Militar; vialidad que es de difícil acceso, porque pasa la barranca y se encuentran los lavaderos, lugar conocido por los vecinos de distintas colonias, que acuden a lavar su ropa cuando no hay agua, en la temporada de estiaje.
Vivian Guadalupe contó que sí hay temor de vivir aquí, porque su casa está ubicada en el cauce de la barranca, porque ésta en cualquier momento puede derrumbarse, cuando ocurran fuertes lluvias o un terremoto.
Recordó que cuando la tormenta Manuel, en septiembre 2013, el agua creció un metro de altura y casi ingresaba a su vivienda; sin embargo, a un vecino de ella se le derrumbó su casa.
“Aquí nos tocó vivir. Ya llevo 15 años viviendo aquí con mi familia, la verdad sí hay miedo, porque puede haber una creciente en la barranca o un derrumbe de tierra, que nos puede sepultar. Pero no tenemos otro lugar donde vivir, pero sí tomamos las medidas de precaución para cuidarnos”, declaró.
Señaló que no han acudido las autoridades de la Dirección de Protección Civil municipal, para que les informe sobre la situación y tomar las medidas de prevención.
En un recorrido hecho a un lado de la colonia Villas del Sol, al poniente de la capital, se observó que había casas de madera, lámina y de concreto, ubicadas en la orilla de una barranca, por lo que en esta temporada de lluvias pudiera ocurrir un incidente.
Zonas de alto riesgo en Chilpancingo
El director de Protección Civil municipal, Valter Damián Bautista, informó que se tiene un registro de 800 familias que viven en zonas de alto riesgo en la capital.
Consultado por teléfono, Damián Bautista comentó que en la capital hay 54 barrancas, de las cuales 22 son de alto riesgo; entre ellas se encuentran El Tule, Calaveras, Tortolitas, Tepango, San Miguelio, Tonalapa, Amacuxtle, Chuchululuya, Alpoyeca, Tequimil, Xoxocuapa y Las Cuevitas, ubicadas en las colonias PRI, Obrera, Nuevo Horizonte, Libertad, Rubén Mora, San Miguelito, 21 de Marzo y CNOP.
Señaló que el registro de las familias que viven en zonas de alto riesgo es del año pasado, porque debido a la declaratoria de emergencia por el Covid-19, no se realizó el censo en este año, pues al menos el 50 por ciento del personal de la dirección están en cuarentena.
“Los datos que tenemos son del año pasado. En este año no se hizo la notificación de las personas que viven en zonas de alto riesgo. Por la pandemia del Covid-19, de los 160 trabajadores que tenemos sólo 70 están trabajando. Los demás están en cuarentena, porque hay compañeras embarazadas y trabajadores con enfermedad crónica, es por eso que no hicimos esta labor”, declaró.
Señaló que han encontrado a personas que han sido reubicadas, como el caso del fraccionamiento Nuevo Mirador, que regresan a vivir al lugar donde fueron retiradas y las casas que se les entregaron se las rentan a otras personas.
Damián Bautista informó que en esta temporada de lluvias, los integrantes del Comité Vecinal de Barrancas están al pendiente de la situación y evitar que ocurra una tragedia.
Texto: Luis Blancas / Foto: Jesús Eduardo Guerrero
