Con la anotación del brasileño el equipo de Zidane empata 1-1 ante la Real Sociedad y no podrán optar al liderato en el derbi ante el Atlético del próximo domingo. Llegan a 53 unidades, a cinco de los Colchoneros
Madrid, España, 2 de marzo de 2021. El Real Madrid se volvió a complicar sus opciones de pelear por el título de la Liga española después de tropezar ante la Real Sociedad, rival ante el que sólo pudo empatar este lunes a un gol en el Alfredo Di Stéfano gracias a un tantoen los compases finales de Vinicius, pero que no evitó que los de Zinédine Zidane no puedan optar ya al liderato el próximo domingo en el derbi ante el Atlético de Madrid.
El conjunto madridista buscaba su quinto triunfo consecutivo liguero para colocarse a tres puntos de su vecino antes de visitarle en el Wanda Metropolitano, pero falló ante los de Imanol Alguacil, que acabaron pagando con la pérdida de dos puntos su encierro final, pero que también “robaron” dos claves a los locales, que se quedan a cinco de la cabeza y con un encuentro más, por lo que acudirán al feudo colchonero más obligado.
Vinicius, entre un “bosque de piernas”, encontró en el minuto 88 el camino del gol salvador para el actual campeón y que neutralizó el duro tanto inicial de Portu para agarrar al menos un punto tras un partido donde no sacó partido a sus buenos primeros 45 minutos ante un equipo realista que le sorprendió con su salida tras el descanso.
Zidane apostó por mantener en el once a Isco Alarcón, con Vinicius el sacrificado respecto a Bérgamo para dejar su sitio a Mariano como ‘9’ más fijo, pero a su equipo le costó hacerse con el mando del partido ante una Real Sociedad, que no renunció a su estilo, pero que tampoco pudo inquietar demasiado.
Los dos equipos jugaron con alto ritmo, pero las ocasiones no aparecieron hasta pasado la primera veintena de minutos y fueron todas de color madridista, ya que los de Imanol Alguacil, pese a desplegarse con peligro cuando superaban la presión, no pudieron probar a Courtois, con Isak, Oyarzabal y Silva, bien controlados.
De este modo, el gol rondó sobre todo en las inmediaciones de Remiro, que vivió su gran momento de apuro en el minuto 22 con una buena doble ocasión para el actual campeón. Primero, a través de una buena combinación por la derecha entre Lucas Vázquez y Modric, que acabó con un centro del gallego que cabeceó Mariano con la oposición de Gorosabel al larguero. El rechace le cayó a Asensio, cuyo disparo lo tocó lo justo Le Normand para desviarlo a córner.
Estas dos ocasiones impulsaron al Real Madrid, que pasó a dominar a la Real, pero al que le volvió a faltar precisión en los metros finales, asustando sólo con sendos disparos de Casemiro y Modric y una internada de Kroos desde atrás. Los visitantes tampoco pudieron aprovechar los espacios y únicamente amenazaron con una cabalgada final de Isak, en la única ocasión que pudo desembarazarse de la zaga local.
Sin embargo, el descanso le sentó mal a los de Zidane. El conjunto guipuzcoano ajustó cosas en vestuarios y salió mejor a la segunda mitad de un partido que pasó a controlar, negando además a su rival el acceso a su campo. Este cambio de actitud tuvo premio y los realistas golpearon primero con un certero cabezazo de Portu tras un buen centro de Monreal.
El gol despertó al Real Madrid, aunque antes vivió otro gran susto cuando el goleador no afinó bien su “pase de la muerte” a un Isak que podría haber sentenciado en un par de minutos. Zidane trató de reaccionar con la entrada de Rodrygo, de vuelta a la acción, Vinicius y Hugo Duro por el desacertado trío de arriba.
Casemiro perdonó el empate con un cabezazo “marca de la casa” que se le fue por centímetros y el equipo madridista se lanzó más decidido a por el empate. Sin embargo, evidenció sus problemas ofensivos para generar verdadero “miedo” y el único recurso parecía ser por momentos buscar al mediocentro brasileño en el área.
Los minutos fueron pasando y el partido tuvo una única dirección porque la Real terminó por recular y no pudo salir ante la presión local, más de corazón que de calidad y peligro. Alguacil quiso protegerse aún más con un tercer central (Sagnan) y con un lateral (Aihen), pero su equipo reculó demasiado. Cuando el reloj atenazaba a los de Zidane, Lucas Vázquez encontró por fin un ‘amigo’ en su enésimo centro y Vinicius logró el ansiado empate con un disparo que tocó en Zubeldia, pero que minimizó el daño.
Texto: Europa Press