17 agosto,2018 1:00 pm

Expone Francisco Toledo 250 obras en museo de Puebla

Texto: Apro/ Foto: Cuartoscuro
Puebla, Puebla, 17 d agosto de 2018. El artista oaxaqueño Francisco Toledo inaugura hoy, en el Museo Taller Erasto Cortés (Mutec) de Puebla, su exposición denominada “Gráfica”, que consiste en una “mini retrospectiva” de su obra como grabador.
Las 250 piezas que componen la muestra corresponden al trabajo realizado por Toledo en los talleres de Mario Reyes –de 1968 a 1999, en la capital mexicana– y Fernando Sandoval, de 1999 a 2018 en Oaxaca.
“En la exposición podrán ver todas mis indecisiones, las búsquedas de color, la primera impresión del dibujo a pura línea, lo que se trabaja aparte para hacer las manchas a color, y así se darán cuenta que la edición definitiva muchas veces no tiene que ver con las pruebas que se presentan”, explicó en entrevista el fundador del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca.
De acuerdo con un relato divulgado por Toledo a partir de la exposición, Mario Reyes guardó en su archivo todas las pruebas de sus trabajos de esos años, que él consiguió gracias a Cándida Fernández y Ana Diego, de Fomento Cultural Banamex, quienes encontraron en Mérida a Teresa Vásquez, la viuda de Reyes.
Posteriormente el artista oaxaqueño llegó a un arreglo con ella para ceder las piezas a la “Colección Toledo/INBA”.
La otra parte de la exposición tiene que ver con las obras que el artista ha trabajado en el taller de Fernando Sandoval. Se trata de las series más recientes sobre los temblores que afectaron el Istmo de Tehuantepec, en septiembre pasado, pero también hay algunos autorretratos.
Al recordar la época en la que trabajó con Reyes, Toledo refirió que en esos años la gráfica no se difundía en galerías, ni tenía mucha venta. Los únicos artistas que en esos años vendían litografías eran Rufino Tamayo y José Luis Cuevas, dijo.
“Al Taller de la Gráfica Popular nunca le interesó comercializar lo que hacía, más bien era para regalar porque hacían volantes, sobre todo buscaban difundir un mensaje político, no buscaban vivir de eso”, rememoró el juchiteco.
Luego trajo a colación la anécdota de cuando trabajaba con Reyes en la serie “Indios remisos”, con placas en las que habían hecho grabados de imágenes religiosas.
“Cuando empezamos a trabajar esas placas, le pusimos el barniz y yo le ponía lo que se me iba ocurriendo; al entrar al ácido éste no hacía su efecto, Mario Reyes se asustó y dijo que teníamos que dejar de hacerlo, que nos estaban diciendo que no lo hiciéramos porque era un sacrilegio. Le contesté que no creía que fuera eso, le pedí que dejara la placa más tiempo en el ácido, pero seguía muy preocupado. Al final sí grabó y Mario se quedó tranquilo, se dio cuenta que no era castigo de Dios”.
Esas imágenes de las que habla el artista las realizó antes de que el escritor Carlos Monsiváis publicara el texto “Nuevo catecismo para indios remisos”, que escribió a partir de su obra.
De acuerdo con Toledo, hay pintores-pintores y hay pintores-dibujantes, y como ejemplo de pintor-pintor citó a Rufino Tamayo, y a José Clemente Orozco como pintor-dibujante.
Y luego de definirse él mismo como pintor-dibujante, señaló: “Creo que en mi caso mis mejores grabados son en blanco y negro, pero también me interesa el color”.
Sobre su formación gráfica, sostuvo que inició desde temprana edad, cuando en 1953 llegó a Oaxaca a estudiar en la Escuela de Bellas Artes, y luego en 1955, cuando a los 15 años de edad entró a trabajar en el taller de grabado de Arturo García Bustos.
Finalmente señaló que busca dar continuidad a un proyecto que tiene con Jaime Erasto Cortés, hijo de Erasto Cortés, para conformar un patronato.
Tras expresar que Erasto Cortés fue miembro del Taller de la Gráfica Popular, consideró que se trata de un “artista entrañable” de quien hace años buscó su obra para incorporarla a la “Colección Toledo/INBA”.
Respecto de la exposición que expondrá a partir de este viernes, el artista juchiteco manifestó que espera contribuya para hermanar a Puebla y Oaxaca.
Actualmente hay varios proyectos en común entre el Centro de las Artes de San Agustín (CaSa) y el gobierno del estado de Puebla, entre ellos los Premios CaSa en creación literaria en lengua mixteca –donde también participa el estado de Guerrero–y el Concurso de fotografía de la reserva de la biosfera Tehuacán–Cuicatlán.