Explora el poeta acapulqueño y colaborador de El Sur la relación entre la memoria y el entorno en su libro “La pérdida de voluntad en el agua”
Acapulco, Guerrero, 29 de julio de 2020. La pérdida de voluntad en el agua es un poemario que tiene como tema la memoria, aseguró el guerrerense Alan Paul Javier Valdez, quien con dicho trabajo obtuvo este año el prestigiado Premio Nacional de Poesía Joven Elías Nandino.
“Es un libro autobiográfico, me baso en cosas de mi vida personal y de la mano de un recorrido por diversos lugares donde he ido y los símbolos y significados de esos espacios que tienen conmigo”, dijo en charla telefónica el además colaborador de El Sur.
De 28 años y que viviera 15 en Acapulco –su infancia y parte de su adolescencia– antes de partir a estudiar Letras Españolas a la Universidad Autónoma de Chihuahua, ciudad donde nació pues su mamá es originaria del municipio de Madera de ese estado, añadió que dichos espacios están configurados a través de una misma imagen: el agua.
Por ello, el mar en Acapulco, los Grandes Lagos de Estados Unidos y los ríos de Chihuahua se ven reflejados en su trabajo.
De hecho, agregó que cuando vivió en Estados Unidos lo hizo en Detroit, donde tiene familia, y tuvo la oportunidad de visitar los Grandes Lagos y antes el río Hudson, en Nueva York.
“Sí, me impresioné mucho”, aceptó, “la primera impresión que tuve fue la de que si yo hubiera despertado ahí, junto a uno de esos lagos, creería que era el mar, pero lo que más me impresionó fue cuando venía volando de regreso de Nueva York para llegar a Michigan y vi lo que nunca: un cuerpo de agua enorme congelado (el lago Hurón).
“Son todas esas imágenes, las de los ríos, los lagos, el agua congelada, que es inevitable al tenerlas enfrente no sentirse obligado a decir algo al respecto”. Así, “todo esto surge a partir de esta famosa frase de Heráclito sobre que uno no se baña dos veces en el mismo río y una discusión que tiene que ver con el cambio, la constante y el tiempo como algo que siempre se está moviendo”, argumentando que la memoria sería como una forma de hacer que el tiempo no avance y en el caso del agua, es el agua detenida en la memoria”.
El pasado 5 de julio fue anunciado como el ganador de la edición 2020 del Premio Nacional de Poesía Joven José Elías Nandino. La Secretaría de Cultura (Secultura) federal, a través del Fondo Editorial Tierra Adentro, informó en un comunicado que el jurado estuvo compuesto por los poetas Margarito Cuéllar, Claudia Hernández de Valle-Arizpe y Mario Heredia Cubillas.
“Ganar este premio sólo me da más responsabilidad como escritor”, dijo; “esto sólo es la reafirmación de que debo estar haciendo mi trabajo”.
El premio Elías Nandino, el más importante para los poetas jóvenes del país, fue ganado el año pasado por el acapulqueño Ángel Vargas, en 2018 por Pablo Piceno Hernández y por Emiliano Álvarez en 2017.
Según se indica en la convocatoria, en el certamen sólo pueden participar escritores mexicanos por nacimiento, residentes en el país o en el extranjero, de hasta 34 años cumplidos, con un libro inédito de poemas escrito en español, con un mínimo de 50 y un máximo de 80 cuartillas, de tema y forma libres.
El ganador recibirá un premio de 100 mil pesos, un diploma y la publicación del libro.
El certamen se organiza en colaboración con la Secretaría de Cultura de Jalisco y el Ayun-tamiento de Cocula, Jalisco, donde nació Nandino.
La pérdida de voluntad en el agua, que escribió el año anterior, “no es necesariamente un libro de poemas tradicional, yo uso mucho la prosa poética y acá uso muchos textos en prosa que tienen un tono lírico-poético que se van articulando con otros poemas”.
Además, no se lee de manera segmentada, sino como si fuera un solo texto.
El joven escritor es hijo de Raúl Javier Carmona, secretario particular del rector de la UAG, Javier Saldaña Almazán, y de la académica universitaria María Valdez.
La entrega física del premio está en suspenso; sería en octubre, pero ante las restricciones de movilidad por la epidemia de Covid-19, no se ha dado una nueva fecha.
Alan Paul dijo que actualmente se encuentra trabajando en nuevos textos y que va por la discusión sobre símbolos y conceptos que lo inquietan “y hasta ahorita la gran conclusión que tengo es que me gusta mucho discutir sobre las fronteras entre géneros literarios, me gusta discutir que la poesía no sólo se escribe en versos, que la poesía existe en la prosa, que la poesía puede contar historias, que la poesía puede dialogar”.
Texto: Óscar Ricardo Muñoz Cano / Foto: El Sur
