Arturo Martínez Núñez
El día de ayer en el recinto oficial del ejecutivo o Casa del Pueblo en Chilpancingo, Evelyn Salgado Pineda se consolidó como la gobernadora del Estado de Guerrero.
En un discurso sobrio, serio y muy bien dicho, la titular del ejecutivo dio cuenta del estado que guarda la situación del Estado.
La gobernadora habló desde el corazón, no rehuyó ningún tema y dejó claro su compromiso con el pueblo. Evelyn se mostró como una gobernadora sobria y seria. Determinada y enfocada. Atrás quedaron los tiempos del Karaoke y del discurso lleno de lugares comunes. Hoy los guerrerenses podemos decir, con orgullo, que tenemos una gobernadora que está al mando y en pleno control de la situación.
Guerrero es un estado que, paradójicamente, tiene casi todo y al que le falta prácticamente de todo. A lo largo de un año, la gobernadora ha sorteado todo tipo de desafíos, y de todos ha salido bien librada. Es iluso pensar que en un solo periodo de gobierno se resolverán los problemas atávicos de nuestro estado, lo que si se puede lograr es transformar la manera de gobernar y eso es precisamente lo que Evelyn Salgado está logrando prácticamente sola. Quizás por estrategia o quizás por omisión pero la gobernadora es la que tiene que salir al paso en cada situación. Salvo algunas honrosas excepciones –como la del secretario general de Gobierno–, la titular del ejecutivo es la que da la cara ante los medios en cada situación. Las y los secretarios de despacho prácticamente no existen en la opinión pública y dejan que sea la gobernadora la que reciba todos los impactos mediáticos. La ventaja de este esquema es que Evelyn se lleva todas las palmas pero también se lleva todas las críticas. Una buena sacudida al árbol serviría para separar a la fruta buena de la podrida. Un año es más que suficiente para valorar a los que han servido de los que ya no van a servir. La casa necesita ser aireada y ventilada; el agua estancada se pudre.
Perspectiva de género, combate a la delincuencia, cero tolerancia a la corrupción y austeridad republicana serán los distintivos de esta administración. Como bien dijo el doctor Alcocer en su mensaje en representación del presidente de la República, licenciado Andrés Manuel López Obrador: “en el arranque todos los gobiernos tienen problemas”. Estoy convencido de que la gobernadora Salgado Pineda se sentirá más cómoda en este segundo año que inicia y gobernará con mayor libertad y autonomía sabedora de que ella y solo ella cuenta ya con el apoyo de la mayoría del pueblo de Guerrero, de su clase política y de sus instituciones.
El gobierno de Evelyn Salgado Pineda apenas comienza y dará muy buenos resultados. Ayer vi a una mujer fuerte de carácter y concentrada en lo suyo. Su discurso fue claro, preciso y honesto. Evelyn es mi gobernadora y la de todas y todos los guerrerenses.
