Ciudad de México, 18 de enero de 2018. Los gritos de “¡Fuera Meade!”, “¡arriba el Peje!” persiguieron hoy a Jose Antonio Meade por las calles del Centro Histórico de la Ciudad de México.
El aspirante presidencial del PRI fue repudiado por primera vez en poco más de un mes de precampaña por algunos los peatones de la capital del país que, al encontrárselo, levantaron la voz manifestándose contra la corrupción y a favor de Andrés Manuel López Obrador.
Tanto al llegar como a la salida del Gran Hotel de México, en donde se reunió con Mikel Arriola, precandidato del PRI en la capital del país, a Meade lo acorralaron gritos de protesta de los peatones que se lo encontraron en su camino.
Al terminar el evento y dirigirse junto con su coordinador de campaña, Aurelio Nuño, por la calle 16 de Septiembre, rumbo a la calle de Palma para subirse a su auto, la gente les comenzó a gritar a su paso: “¡Fuera el PRI”, “corruptos”, “arriba Obrador!”.
El hecho fue registrado por los reporteros que asistieron al acto en el que Meade y Arriola firmaron el “Pacto para transformar la gran Ciudad de México” de cinco puntos: un millón de cámaras de vigilancia, 100 kilómetros nuevos de líneas del Metro, un nuevo Circuito Interior, dotación de agua y más escuelas.
Mientras se subía a su vehículo junto con Nuño, en medio de un remolino de reporteros y fotógrafos, algunos simpatizantes Meade trataron de opacar las exclamaciones de protesta de algunas personas que les gritaron en la calle “¡Jodidos!”, “¡Pinche ratero!”, mientras que un grupo de mujeres lo abuchearon desde la ventana de lo alto de un edificio: “¡Fuera Meade!”, “Fuera Meade”, “Fuera Meade”, “¡Meade, te va a quitar tu propio partido!”.
Hasta ahora en ninguno de los actos que había realizado Meade como parte de su precampaña, que arrancó en noviembre pasado, había enfrentado a gente protestando por sus aspiraciones de ser presidente como candidato del PRI.
El PRI puso hoy la seguridad en el centro de su campaña electoral para ganar Ciudad de México, tradicional feudo izquierdista, en los comicios del próximo 1 de julio.
El aspirante priista a la Presidencia mexicana, José Antonio Meade, protagonizó un acto junto al aspirante a la Jefatura de Gobierno capitalino, Mikel Arriola, en el que firmaron el llamado Pacto para la Ciudad, que contiene las recetas del PRI para “transformar” la capital mexicana.
La principal propuesta es la de instalar un millón de cámaras de videovigilancia a lo largo de una ciudad en la que más del 80 por ciento de sus ciudadanos percibe que puede ser víctima de un delito en la calle o en el transporte público.
“No solo necesitamos muchos ojos para sentirnos tranquilos. También necesitamos que los cuerpos de seguridad estén mejor capacitados y mejor pagados”, aseguró Meade durante el acto, celebrado en la terraza de un hotel con vistas al Zócalo capitalino.
“Las encuestas aseguran que la gente que camina en la ciudad se siente intranquila, ya sea en un cajero automático, en la calle o en el transporte público. No nos sentimos seguros en ningún sitio”, lamentó el aspirante presidencial.
Los niveles de violencia alcanzaron en 2017 cifras récord en México, que registró al menos 23.000 homicidios dolosos hasta noviembre, la peor cifra en dos décadas, bajo la presidencia del presidente Enrique Peña Nieto (PRI), de cuyo Gobierno formaba parte Meade hasta diciembre pasado.
El PRI también propuso hoy ampliar la red de metro de la capital con 100 kilómetros de líneas nuevas sin subir el coste de los boletos y construir un nuevo circuito exterior para vehículos que permita descongestionar el tráfico y reducir la elevada contaminación.
Asimismo, Meade contó que le genera “dolor” que no todos los hogares de la capital mexicana dispongan de agua corriente, por lo que prometió que el PRI aumentará la inversión para eliminar la escasez y las fugas de agua en zonas de la ciudad empobrecidas como Iztapalapa.
Finalmente, aseguró que adaptarán todas las escuelas de Ciudad de México a la reforma educativa impulsada por el exsecretario de Educación Pública Antonio Nuño, quien dejó el cargo para coordinar la campaña presidencial de Meade.
“Lo que mejor funciona en esta ciudad es lo que no depende de su Gobierno, como la educación (competencia federal)”, dijo Meade, quien lamentó que Ciudad de México “lo tiene todo excepto un buen Gobierno”.
Desde que en 1997 se creó la Jefatura de Gobierno de Ciudad de México, todos los mandatarios de la capital mexicana han pertenecido al izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), entre ellos Andrés Manuel López Obrador, favorito -de acuerdo con las encuestas- en las próximas elecciones presidenciales con el partido Morena.
En las próximas semanas, la Convención de Delegados del PRI deberá ratificar a Meade y a Arriola como sus candidatos a la Presidencia de México y a la Jefatura de Gobierno de la capital.
El 1 de julio, 88 millones de mexicanos están llamados a las urnas para renovar la Presidencia, el Congreso, el gobierno capitalino y autoridades en 30 estados del país.
(En la imagen, el candidato José Antonio Meade (d) y el aspirante a la Jefatura de Gobierno capitalino, Mikel Arriola (i), hoy jueves 18 de enero de 2018, en Ciudad de México).
Texto: Apro / EFE / Foto: EFE
