26 enero,2023 9:29 am

 Grupo indígena afín a Evo Morales ingresa armamento por la frontera, asegura Boluarte

Pide a la Fiscalía peruana que investigue de forma “rápida y objetiva” la implicación de los Ponchos Rojos. La presidenta se presenta ante la OEA donde afirma que se mantendrá en el cargo pese a las protestas. La ONU insta a las autoridades peruanas a investigar de manera “efectiva” las muertes en el estallido social

Madrid, España, 26 de enero de 2023. La presidenta de Perú, Dina Boluarte, denunció ayer que el grupo indígena Ponchos Rojos, afín al expresidente boliviano Evo Morales, está implicado en el ingreso de armas y municiones a través de la frontera entre ambos países.

Boluarte pidió la Fiscalía peruana que investigue de forma “rápida y objetiva” la implicación de los Ponchos Rojos, pues aparentemente estas habrían sido las armas utilizadas en los enfrentamientos que tuvieron lugar el pasado 9 de enero en Juliaca y Puno, que se saldaron con la muerte de 18 personas, ha informado el diario El Deber.

Esto se produce después de que el gobierno peruano remitiera el lunes una nota diplomática de protesta a Bolivia por las declaraciones del presidente boliviano, Luis Arce, en las que expresaba su respaldo a la ola de protestas que sacude el país.

El presidente boliviano afirmó, durante un acto de su partido, el Movimiento Al Socialismo (MAS), que el pueblo peruano se encuentra ahora “en una lucha” para “recuperar su democracia y también para “recuperar el derecho a elegir un gobierno que los represente”.

En respuesta, la diplomacia de Bolivia reiteró su respeto al Derecho Internacional y al principio de no intervención, rechazando la insinuación de las autoridades peruanas, que señalaron que las palabras de Arce eran “una injerencia inaceptable en asuntos que sólo competen a peruanos”.

Por otro lado, la presidencia de Perú se ha disculpado por unas declaraciones de Boluarte en las que justificaba ante la prensa internacional la falta de acuerdo con las protestas que está teniendo lugar en las principales provincias del sur, entre ellas Puno, donde se han registrado mayor número de fallecidos.

Por su parte, la ministra de Producción de Perú, Sandra Belaúnde, ha presentado ayer su dimisión al cargo apenas un mes y medio después de asumir la cartera y en el marco de las intensas protestas antigubernamentales que azotan la nación andina.

Beláunde considera que la mandataria se está negando a reconocer los verdaderos problemas de fondo que alimentan las manifestaciones antigubernamentales, activas desde principios de diciembre, según el diario La República.

Además, Boluarte se ha presentado ayer de manera oficial ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) asegurando que cumplirá con su obligación como presidenta y que se mantendrá en su cargo pese a las protestas.

Durante el encuentro, el primero con la organización desde que Boluarte es la jefa de Estado peruana, la mandataria ha sostenido que no piensa “rendirse” ante “grupos autoritarios” que quieren imponer su salida del poder de manera inconstitucional, según ha recogido ‘Correo’.

Por otro lado, El secretario general de la ONU, António Guterres, ha compartido su consternación por el número de muertes registradas en las protestas que están teniendo lugar en Perú, y ha instado a las autoridades del país a llevar a cabo investigaciones “rápidas, efectivas e imparciales” sobre las mismas.

Según ha detallado en un comunicado el portavoz de la Secretaría General de Naciones Unidas, Stéphane Dujarric, Guterres ha exhortado a la moderación para evitar una nueva escalada de violencia y ha reiterado su llamamiento al gobierno de Perú para que cumpla con sus compromisos internacionales en materia de Derechos Humanos.

Asimismo, Guterres ha subrayado la importancia de que las protestas se desarrollen de forma pacífica, respetando el derecho a la vida y la propiedad.

Perú se encuentra sumido en una profunda crisis política nacida tras la destitución por parte del Congreso del expresidente Pedro Castillo, quien anunció el pasado 7 de diciembre la disolución del Parlamento andino y la instauración de un gobierno de excepción.

Tras la detención del exmandatario, decenas de miles de personas han salido a protestar en diversos puntos del país para pedir la dimisión de Boluarte, la disolución del Congreso y la convocatoria urgente de las elecciones presidenciales. Desde entonces, más de 60 personas han perdido la vida en los disturbios entre manifestantes y fuerzas de seguridad.

En tanto, el Ministerio de Exteriores de Perú ha citado ayer al embajador de Chile en Lima para mostrarle su rechazo a las críticas del presidente chileno, Gabriel Boric, sobre la actuación de la Policía peruana en el marco de las manifestaciones antigubernamentales.

“(El viceministro Ignacio Higueras) le ha indicado que el rumbo elegido por el gobierno constitucional de la presidenta (Dina) Boluarte es el adelanto de elecciones generales para que los peruanos decidan sin injerencias y en paz el destino de Perú”, ha explicado la oficina de la diplomacia peruana.

Mientras, el destituido presidente Castillo agradeció ayer al mandatario de México, Andrés Manuel López Obrador, “su solidaridad con el pueblo peruano”, tras un mensaje en el que este afirmó ante la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) que fue “una infamia” lo que pasó con el detenido ex gobernante, según información de EFE. (Con información de Agencias).

Texto: Europa Press