Ciudad de México, 21 de octubre de 2019. De enero a agosto, el país importó 5 mil 580 millones de pies cúbicos de gas natural, según datos de la Secretaría de Energía (Sener).
La demanda total de gas natural en el territorio nacional se ubicó en 8 mil 193 millones de pies cúbicos diarios de gas, de acuerdo con las cifras de Sener.
Esto significa que las importaciones del combustible representan 68 por ciento del consumo interno.
Al mismo tiempo, Pemex sigue estancado en su producción del hidrocarburo, con una producción de 2 mil 612 millones de pies cúbicos diarios.
La marginal producción de gas natural de Pemex ha impactado directamente a la elaboración de etano y otros petroquímicos, que registraron un repunte también en las importaciones.
José María Bermúdez, presidente de la Asociación Nacional de la Industria Química del país (ANIQ), expuso que en 2018, el valor de las importaciones totales de la industria cerraron en 25 mil millones de dólares.
“Esto es histórico, nunca habíamos llegado a ese número, esto representó 75 por ciento de la demanda (industrial) nacional, jamás habíamos llegado a ese número.
“Hay un impacto en la cadena de las operaciones, en la cadena del etano y metano, y toda la cadena del amoniaco, donde las plantas no están funcionando y esto, a la vez, impacta en la producción de fertilizantes y el mercado agrícola”, aseguró Bermúdez.
La tendencia es que las importaciones sigan aumentando en la medida en la que Pemex no logre producir gas natural, añadió.
“Para este año, se verá un crecimiento. La situación en Pemex no ha cambiado y el ducto apenas entró (en operación), entonces se prevé un aumento de 2 puntos porcentuales”, dijo.
Añadió que actualmente el sur del país, específicamente Coatzacoalcos, sigue siendo un tema crítico, pues actualmente la industria trabaja a menos de 70 por ciento de su capacidad.
“Tuvimos mucho impacto, sobre todo en el tema de seguridad en el transporte de los materiales”, consideró.
Respecto a las recientes inyecciones de gas con alto contenido de nitrógeno por parte de Pemex, el representante de la industria dijo que esta situación además de generarles sobrecostos son perjudiciales para el funcionamiento de los equipos, por lo que están buscando diálogos con la administración.
“Cuando tienes esas inyecciones (de gas contaminado) lo que tienes es un gas de menos calidad”
“Entonces se lastiman y dañan los equipos. Lo que queremos es el diálogo y transparencia para hacer ajustes y que no se dañen los equipos”, aseguró Bermúdez.
En septiembre, Pemex inyectó gas con hasta 16 por ciento de contenido de nitrógeno, cuando la norma establece un máximo de 8 por ciento, según la CRE.
Texto: Karla Omaña / Agencia Reforma / Foto: Agencia Reforma
