El presidente municipal de Zihuatanejo, Amador Campos Aburto, aseguró que muchas veces “para el campesino es más fácil tirar un árbol que trabajar”, en respuesta a la demanda de los ejidatarios de Vallecitos de Zaragoza, quienes el domingo se quejaron de la falta de alternativas para tener ingresos y que por eso recurren a la tala ilegal.

Ayer, en su conferencia de prensa semanal, el alcalde habló de las oportunidades de desarrollo que su gobierno ha impulsado para el poblado de Vallecitos de Zaragoza.

Informó de la puesta en marcha del invernadero de jitomate, la engorda de tilapia, cría y engorda de borregos, producción de naranja, apoyo a mujeres para la creación de artesanías con hojas de pino (huinumo) y de maíz, además de la entrega de fertilizante y equipo para la siembra; “pero es más fácil vender la madera que ponerse a trabajar”.

El domingo, en la comunidad, ubicada en la parte alta de la sierra de Zaragoza, a dos horas de Zihuatanejo, los ejidatarios pidieron que el gobierno municipal permita la explotación del bosque en ese ejido o que dé alternativas de trabajo, para que la gente pueda subsistir y se frene la comercialización clandestina de la madera.

Amador Campos explicó que fue la Comisión de Ecología municipal la que negó el permiso a los ejidatarios para aprovechar el recurso forestal, “no lo aprobó y yo no puedo evitar eso; no se preocupen, van a seguir madereando, como todos, no los va a parar nadie, con o sin permiso lo van a seguir haciendo”, expresó.