Juan Carlos Jiménez / Agencia Reforma

Doha

Hoy los Tigres y sus aficionados amanecieron soñando despiertos. No es para menos, a las 12 del día tienen la cita más importante de sus vidas.
Pareciera un partido de videojuego, pero después de la demostración que ha dado Tigres en el Mundial de Clubes de Qatar, es una realidad y se vale soñar.
Los Tigres buscan arrebatarle la gloria al poderoso campeón europeo Bayern Múnich, de Alemania, que va por el histórico sextete. De ese tamaño es el desafío felino.
El Bayern quiere igualar al Barcelona del 2009, que ganó los seis títulos que un club europeo puede ganar en un año futbolístico. Así son este tipo de clubes, compiten para ganarlo todo.
Los alemanes ya ganaron la Bundesliga, Copa Alemana, Champions League, Supercopa de Europa y Supercopa de Alemania. Sólo les falta el Mundial de Clubes.
Por su parte, Tigres sorprendió en su primera participación mundialista al llegar a la final, dejando en el camino al campeón asiático Ulsan Hyundai, de Corea de Sur, y después al Palmeiras, de Brasil.
Y fue precisamente por su triunfo sobre el campeón de la Copa Libertadores que los ojos del mundo voltearon hacia Tigres, que como el mejor equipo de América se medirá ante el campeón de Europa.
Los argumentos para ganar el juego son la experiencia en el banquillo de Ricardo Ferretti, para plantear o reaccionar a un momento del juego.
La seguridad de Nahuel Guzmán y la concentración defensiva que ha tenido los Tigres en el Mundial, así como el equilibrio y el desequilibrio que puedan generar contenciones y ofensivos para surtir al hombre gol del equipo.
André-Pierre Gignac es el hombre más peligroso para el Bayern y más si lo acompaña Carlos González.
Los bávaros no contarán con el zaguero central Jérome Boateng, quien abandonó la concentración con permiso para viajar a Alemania por la muerte de su ex novia.
En la cancha del Education City Stadium veremos a Carlos Salcedo y Diego Reyes ante Robert Lewandowski y Thomas Mueller; Chaka Rodríguez ante Kingsley Coman y Jesús Dueñas contra Serge Gnabry.
En la media cancha, Rafael Carioca y Guido Pizarro deberán multiplicarse contra Joshua Kimmich y Marc Roca. Arriba, por las bandas, veremos a Javier Aquino y Luis Quiñones contra Benjamin Pavard y Alphonso Davis, mientras el duelo de torres será entre la Doble G ante Niklas Suele y David Alaba.
Y el último bastión de cada equipo con grandes porteros, Nahuel Guzmán y Manuel Neuer, genios de manos y pies.
Todos tendrán que jugar el partido de su vida.
La constancia de Ricardo Ferretti no es sólo en el banquillo de los Tigres, sino también en sus declaraciones.
El Tuca no cambió su discurso y así como el primer día no se sentía superior al Ulsan de Corea del Sur, hoy no se siente menos que el Bayern Múnich.
“Nos ha tocado ser favoritos, luego los brasileños eran favoritos, dijeron ciertas cosas y salimos adelante. Nunca nos sentimos favoritos porque no nos sentimos más que nadie. Se pueden decir muchas cosas, pero vamos a jugar el partido y después hablamos”, comentó Ferretti.
Reconoció que el Bayern impone, pero tampoco es invencible y afirmó que tienen armas para ganar el juego.
“Por la estadística que se menciona, el Bayern es un equipo ganador, como somos nosotros, pero no quiere decir que sean invencibles, sí han perdido, como nosotros hemos perdido, y han ganado, como nosotros hemos ganado.
“Es un equipo sólido como nosotros y debemos hacer las cosas muy bien cuando jugamos contra un equipo así, y tenemos esa capacidad y esta conjunción para hacerlo; espero que mi equipo pueda dar este gran partido”, expresó en la conferencia previa a la final del Mundial de Clubes.
“Espero que sea un buen partido de Tigres y un mal partido de Bayern, esto es lo que queremos”, añadió.
El histórico portero del Bayern Munich, Manuel Neuer, reconoció no tener buenos recuerdos de André-Pierre Gignac.
Neuer apuntó a alejar al goleador de los Tigres del área penal, en donde es letal; Gignac le anotó un gol en el 2015, cuando Francia venció 2-0 a Alemania, en un amistoso en París.
“Tenemos malos recuerdos de Gignac, pero ahora jugamos con el club, no en selección, y Gignac está en Tigres, pero no es el único jugador, así que trataremos de alejar a Gignac del área penal”, expresó Neuer, en la conferencia previa a la final.

Ruptura y muerte

El Bayern Munich sufrió un duro golpe de cara a disputar la final del Mundial de Clubes ante Tigres.
El defensor Jerome Boateng causó ayer baja del equipo campeón de la UEFA luego que se diera a conocer que su ex novia, la modelo Kasia Lenhardt fue encontrada muerta en su departamento de Berlín.
La mujer de origen polaco de 25 años y el jugador del cuadro bávaro sostuvieron un noviazgo de 15 meses, el cual dieron por terminado el 2 de febrero pasado, al parecer por una infidelidad de parte del futbolista, afirmó Kasia en redes.
El día del rompimiento, la modelo hizo su última publicación en su cuenta de Instagram al compartir una foto en blanco y negro agregando un enigmático mensaje: “Ahora es donde trazas la línea. Suficiente”, escribió.
La Policía de la capital alemana informó que la muerte de Lenhard no se investiga como un asesinato y que por el momento se desconocen los motivos del fallecimiento.
Según Bild, la hipótesis de un suicidio es la que se baraja con más fuerza.
La joven inició en el modelaje a los 16 años y saltó a la fama en 2012 al quedar cuarta en el reality Germany Next Top Model. Desde entonces fue la cara de grandes marcas de ropa.