Édgar Contreras / Agencia Reforma

Ciudad de México

Gerardo Arteaga empieza a pagar la deuda con Jaime Lozano y la Selección Mexicana.
Un gol del lateral izquierdo frenó la borrasca en el seno del Tricolor, que venció 1-0 a Jamaica en su debut en la Copa América.
Antes de este juego, la historia de Arteaga y el Tricolor era por demás tormentosa.
El futbolista renunció a los Juegos Olímpicos de Tokio, bajo la dirección de Jimmy Lozano, debido a una depresión durante sus primeros meses en Bélgica. Un año después, reveló su tristeza por haber viajado a Qatar y aun así no sentirse en una Copa del Mundo, a causa de su suplencia.
La página que ahora escribe Arteaga es mucho más positiva, como parte del recambio generacional.
Su riflazo de zurda, al 69’, le dio la recompensa a México, un equipo que en el primer tiempo en Houston no solo fue abucheado por la afición, sino que perdió por lesión a su capitán Edson Álvarez, quien se tocaba la parte posterior del muslo izquierdo mientras intentaba contener las lágrimas.
Para llorar era el desempeño de una Selección Mexicana que cargaba la losa de tres derrotas ante rivales de jerarquía y el recuerdo de aquel 7-0 contra Chile en su última participación en una Copa América.
El panorama pudo empeorar de no ser el VAR, que rectificó la decisión arbitral en el gol de Michail Antonio, al 50’: había fuera de lugar.
Después del susto, México fue más agresivo en su futbol y entonces realizó una práctica de tiro al arco por conducto de Luis Chávez, Julián Quiñones, Santiago Giménez y el propio Arteaga, antes de que este último anotara tras un buen pase de Luis Romo.
Jamaica planteó un 5-4-1 y basó todo su juego a un rompimiento hacia los explosivos Shamar Nicholson y Michail Antonio. El problema es que el equipo caribeño no tuvo respuestas tácticas al verse en desventaja y toda su propuesta se concentró en pelotazos al área.
El cuadro jamaiquino es, al menos en el rol, el más débil de los equipos del Grupo B, por eso al Tricolor le urgía la victoria.
Esta vez no hubo grito homofóbico ni mexicanos congelados ante la adversidad. El miércoles, el equipo pelea el liderato ante Venezuela. De cumplirse el pronóstico, el puntero del sector se encontraría a Argentina hasta una hipotética Semifinal y no de inmediato, en Cuartos.
Un gol, y un triunfo, que apacigua la tormenta.