Alejandro Guerrero

Iguala

La Unidad Especial de Investigación y Litigación para el Caso Ayotzinapa (UEILCA) de la Fiscalía General de la República (FGR) con presencia de integrantes de la Comisión presidencial para la Verdad y el Acceso a la Justicia (Covaj), entre ellos su titular, el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas Rodríguez, realizan diligencias con uso de maquinaria pesada en las comunidades de Apetlanca y Tianquizolco del municipio de Cuetzala del Progreso, relacionado con las acciones de búsqueda de los 43 estudiantes desaparecidos hace casi 9 años.
Las diligencias de búsqueda en esta zona, de las que hay registros que se realizan desde abril, se han realizado en completo sigilo y hermetismo, pues además de que no se da información a la prensa, en la zona existe la presencia de civiles armados, presuntos policías comunitarios que impiden la entrada de personas ajenas a ese municipio.
Desde el 19 de abril se conoció de la diligencia realizada por peritos de la FGR de la Comisión Especial para el Caso Ayotzinapa en la comunidad de Apetlanca, en la que de acuerdo con pobladores fueron halladas al menos dos fosas clandestinas de las que fueron recuperados restos humanos.
Existe la evidencia de que dos días después, civiles armados presuntos policías comunitarios que vigilan los accesos de ese municipio, impidieron el ingreso de reporteros a la comunidad de Apetlanca, pues de acuerdo con el comisario Mario Mojica no dejaría pasar a nadie porque tenía “instrucciones” de impedir el paso y alejar de la zona a toda persona que se ponga “rebelde”, con la amenaza de sacarlos por la fuerza.
Alrededor de las 9 de la mañana de ayer, a bordo de un helicóptero que aterrizó en un campo de futbol de la cabecera municipal de Cocula, se informó que llegó una comitiva del caso Ayotzinapa, y que de acuerdo con vecinos que grabaron el arribo de la aeronave, iba el subsecretario Encinas Rodríguez. Las personas tomaron rumbo al municipio de Cuetzala del Progreso, que está a casi media hora de Cocula, y volvieron alrededor de las 12:45 de la tarde para tomar nuevamente el helicóptero y salir hacia Iguala.
En dos fotografías que fueron compartidas de parte de la diligencia que se realiza en la comunidad de Apetlanca, se aprecia el uso de una máquina retroexcavadora para abrir posibles fosas. En una de ellas se ve que los trabajos se realizan junto a una casa de ladrillo y techo de lámina en la que junto a ella hay una antena de telecomunicaciones.
En otra imagen fechada a las 9:53 de la mañana del domingo se observa también el uso de una máquina retroexcavadora que realiza hoyos en un terreno con vegetación, como en un cerro. En ambas imágenes se ve a peritos de la FGR y el resguardo de efectivos del Ejército armados.
Entre el viernes 14 y el lunes 17 de julio se informó también la presencia del subsecretario de la Segob, Alejandro Encinas en el municipio de Cuetzala, y el 18 de julio pobladores informaron la presencia de un convoy de unos 30 vehículos que pasaron por Iguala siguieron por Cocula y se fueron rumbo a Cuetzala. En el convoy iban camionetas cerradas Suburban con un fuerte resguardo de efectivos del Ejército, FGR, Guardia Nacional y Policía Estatal.
De acuerdo con fuentes consultadas, ha trascendido que en estas diligencias que también se han extendido en la comunidad vecina de Tianquizolco, Cuetzala, ya ha participado la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde Luján, quien asumió el cargo el pasado 19 de junio tras la separación de Adán Augusto López.
En la actualidad, en el municipio de Cuetzala existe una disputa por el control de la zona entre los grupos rivales de la delincuencia organizada Los Tlacos y La Bandera, éstos últimos ahora aliados con La Familia Michoacana, pero que en septiembre de 2014 cuando ocurrieron los ataques y la desaparición de los 43 normalistas, la zona era controlada por el mismo grupo al que se le adjudican estos hechos, Guerreros Unidos.
Estas comunidades del municipio de Cuetzala ya han sido mencionadas antes por los presuntos miembros de la desaparecida organización Guerreros Unidos, como unos de los probables destinos de un grupo de estudiantes desaparecidos de la Normal Rural de Ayotzinapa.