Zacarías Cervantes

Chilpancingo

Familiares de una menor de 15 años, quien después de que recibió la primera dosis de la vacuna Pfizer en Ayutla tuvo reacciones graves y ayer estaba intubada con muerte cerebral derivado de una encefalitis combinada con aneurisma en la clínica del ISSSTE de Acapulco, denunciaron negligencia de las instituciones de salud.
Se trata de Asheley Carbajal García, quien el martes 8 de marzo acudió a recibir la primera dosis de su vacuna y le aplicaron la de la marca Pfizer del lote FL3202, folio A15-109649161.
Su tía Citlali Ramírez Carbajal denunció ayer por teléfono que al día siguiente, el miércoles, comenzó a tener dolor de cabeza y como la recomendación es tomar paracetamol ella se tomó una pastilla con un licuado de fresa pero a los 20 minutos empezó a tener vómitos y también sufrió convulsiones.
Citlali informó que inicialmente se la llevaron al Hospital Regional de Ayutla cuando presentaba atrofia muscular; “estaba muy tensa, como engarrotada, gritaba muy fuerte y no se le podía contener el vómito”, contó.
Informó que la tuvieron que sedar y aun así con el primer medicamento que le pusieron no se controló hasta que le dosificaron un medicamento más fuerte para poderla trasladar al Hospital Regional Adolfo Ruiz Cortines del ISSSTE ubicado en Acapulco.
Agregó que de inmediato le hicieron una tomografía en el hospital privado Santa Lucía pero en el ISSSTE no había neurólogo y a pesar de la urgencia del caso, el especialista no llegó hasta ayer jueves a la una de la tarde.
Explicó que hasta antes de la una de la tarde de ayer sólo la atendieron médicos pasantes y a las 11 y media de la noche del miércoles la intubaron.
“El caso es que ayer el médico dijo que tenía muerte cerebral y que ya no podían hacer nada”, informó la tía de la paciente.
Añadió que les dijeron que presentaba encefalitis combinada con una aneurisma y que lo segundo le ocasionó que se le reventaran unas venas por el dolor tan fuerte en la cabeza y presenta hematomas.
“Nosotros creemos que todo esto fue causado por una reacción alérgica a la vacuna porque anteriormente la niña no presentaba ninguna enfermedad y acudió sana a recibir su dosis”, aseguró Citlali Ramírez.
Informó que los familiares de la menor ya hicieron el reporte a Pfizer y que les asignaron el número de caso 595795.
Detalló que les recibió la llamada en la farmacéutica una recepcionista que dijo llamarse Karen Lara.
Citlali Ramírez declaró que los médicos no han aceptado ni confirmado que las reacciones que sufrió su sobrina sea una reacción de la vacuna, “nomás nos dijeron que ya tiene muerte cerebral y que lo mejor es que la desconecten, a lo cual los familiares hemos pedido que se esperen que apenas lleva un día internada”.
Explicó que saben que la encefalitis dura hasta tres semanas para que desinflame y que no es posible que con un día ya la quieren desconectar.
Denunció que el personal y la institución está evadiendo su responsabilidad de decirles las causas que le provocó esas reacción, “no están siendo claros, nos dieron ese diagnóstico pero no las causas del por qué”, se quejó.
Aseguró, además, que su sobrina no tenía problemas de comorbilidad y que acudió a la convocatoria para los niños de 15 a 17 años.
Informó que el objetivo de la denuncia pública es que se haga una investigación y que se revise el lote de la vacuna, para saber si es la primera vez que la están aplicando porque hay muchos niños que están acudiendo a recibir su vacuna “y no sabemos si también han tenido alguna reacción”.
Consideró que el de su sobrina no es un caso aislado, porque han estado investigando y han encontrado que en otras partes del país se han presentado personas con esas mismas reacciones.
“Hay una caso muy sonado de una doctora de Coahuila de 32 años de edad que también tuvo esos síntomas, pero empezó con la lengua inflamada y después tuvo convulsiones y vómitos, estuvo dos semanas con encefalitis y hay otros casos que se están denunciando, por eso no creemos que el de mi sobrina sea el único caso”, insistió.