EL-SUR

Miércoles 24 de Abril de 2024

Guerrero, México

Guerrero  

Estudiantes de Ayotzinapa lanzan piedras y bombas Molotov al Palacio Federal en Acapulco

Los manifestantes bloquean con autobuses la avenida Costera, mientras pintaron consignas para exigir la libertad de los 19 alumnos de Mactumactzá presos en Chiapas

Aurora Harrison

Junio 02, 2021

 

En la imagen de arriba agentes del gobierno del estado vigilan la zona luego de las protestas de los estudiantes; abajo, un normalista arroja una piedra a la fachada del Palacio Federal de Acapulco Foto:?Carlos Alberto Carbajal

Alumnos de la Normal Rural de Ayotzinapa bloquearon la avenida Costera en Acapulco y pintaron consignas y lanzaron piedras y bombas Molotov a las oficinas gubernamentales del Palacio Federal, donde todavía había algunos trabajadores dentro.
La manifestación fue para exigir a las autoridades la liberación de los 19 normalistas de Mactumactzá en el estado de Chiapas, quienes fueron detenidos el pasado 18 de mayo cuando tomaron la caseta San Cristóbal-Tuxtla Gutiérrez.
A bordo de tres autobuses los normalistas llegaron y atravesaron los camiones en ambos sentidos de la avenida Costera obstruyendo la circulación más de una hora, para hacer pintas en la fachada y en el acceso principal del Palacio Federal.
En las pintas que hicieron al edificio se leía, “nos faltan 43”, “Mactumatzá vive”, “Alto a la Represión”, “mientras la pobreza exista, las normales rurales tendrán razón de ser”, así como también la frase de “ni perdón, ni olvido”.
En el Palacio Federal, se encuentran oficinas de Semarnat, Profepa, Sagarpa, Sedesol, Secretaría de Finanzas, Secretaría de Desarrollo Económico, Zofemat, Asuntos Jurídicos, Correos de México, por citar algunas. Los trabajadores de la planta baja alcanzaron a salir y los otros salieron por el área de emergencia al escuchar la primera bomba Molotov.
Los jóvenes hicieron pintas, otros bajaron de los autobuses piedras y las arrojaron a la puerta de vidrio, y contra algunas ventanas, la puerta principal del edificio se quebró y enseguida los jóvenes aventaron unas siete bombas molotov al interior del edificio.
En tanto que se hacían esas actividades, uno de los estudiantes, en el micrófono conectado a bocinas, dijo que el motivo es “exigir la liberación de nuestros compañeros, esa injusticia, ¿por qué no se dedican agarrar a los narcotraficantes?”.
Pidió alto al hostigamiento, la represión a las normales que “sólo exigimos nuestros derechos y teneos que levantar la voz porque si no el gobierno nos tendrá sumisos todo el tiempo, por eso le pedimos a la sociedad unirse a la lucha” y que se respeten sus derechos y que no haga acciones que perjudiquen a los estudiantes y al pueblo.
“A la sociedad le pedimos que se ponga a pensar, no es la primera vez que un gobierno compra tu voto, regala una despensa, deben entender que esas son estrategias que se usan para convencer al pueblo para después estarse manteniendo y cuando los necesitas no te regresan ni a ver, es por eso que debemos concientizar”, puntualizó el orador.
Dijo que el pueblo debe unirse para exigir sus derechos “porque si no los gobiernos continuarán realizando acciones que nos van a perjudicar, mucha gente nos cataloga como vándalos, pero como les mencionaba antes de realizar acciones radicales, pedimos el diálogo ante el gobierno, mencionamos nuestras peticiones, y qué es lo que hacen? hasta que actuamos de manera radical es cuando nos regresa a ver”.
Personas que caminaban por la avenida Costera cerca del edificio se detuvieron al escuchar las detonaciones de las bombas Molotov, en tanto que trabajadores que estaban en las oficinas salían por la puerta de emergencia.
Los normalistas después de aventar la última bomba Molotov se subieron a los autobuses y se fueron, después de las 2 de la tarde y los policías empezaron a llegar.
En el acceso principal del edificio se colocó una cinta amarilla para impedir el paso de transeúntes mientras se realizaba inspección, para después retirar los pedazos de vidrio. También llegó el coordinador de Protección Civil y Bomberos, Cuauhtémoc Gayosso Pérez.
“Estaba en mi oficina, en mi privado, cuando de pronto escuché explosión como bombas, balazos, y me quedé adentro, pensé que estaba más seguro adentro que afuera” dijo uno de los trabajadores. Otro contó: “Se escuchó muy fuerte, no me di cuenta cuando empezaron a evacuar porque me quedé adentro de mi oficina”.
Otros trabajadores comentaban entre sí que cuando se dieron cuenta que eran normalistas empezaron a guardar sus cosas para salirse, que no pensaban que fueran a tirar las bombas y que varios de sus compañeros entraron en crisis nerviosa.