Luis Daniel Nava

Chilpancingo

Tras una jornada de violencia que dejó al menos cuatro muertos en Ayutla, este martes la población suspendió clases en las escuelas, cerró la Casa de los Pueblos y los servicios de salud se limitaron a emergencias.
Escuelas, negocios y el centro de salud cerraron mientras que el transporte público dejó de funcionar ante el temor de nuevos enfrentamientos armados en las calles.
“Ha estado tenso, todos estamos encerrados. Nadie en la calle, Ayutla parece un pueblo fantasma”, describió un vecino ayer en la noche.
Este lunes la violencia se desató por la disputa entre presuntos criminales que operan en el municipio. Esa mañana fueron dejados restos humanos de dos personas cerca de la tienda Chedrahui.
El mismo día en la tarde hubo balaceras y persecuciones a balazos que habrían dejado por lo menos cinco muertos, tres en enfrentamientos, entre ellos el líder de la UPOEG, Felipe de Jesús Ceballos, informaron fuentes de la población, y dos descuartizados.
Se reportó que esa noche policías estatales y soldados del Ejército hicieron presencia en las calles e instalaron retenes de revisión.
La cifra de muertos no se sabe con precisión, debido a que ni las autoridades estatales ni la Fiscalía General del Estado han informado la situación que se vive y que mantiene aterrorizada a la población de ese municipio, que es el primero en el estado con un gobierno regido por usos y costumbres.
Sin embargo, están fotografiados tres muertos y ayer se confirmó que otros dos fueron dejados descuartizados cerca de la tienda Chedrahui.
La mañana de ayer se informó que se suspendieron las clases presenciales en las escuelas de todos los niveles de la cabecera.
En consulta, el secretario de Educación estatal, Marcial Rodríguez Saldaña se rehusó a confirmar el hecho y a precisar el número de instituciones cerradas debido a la violencia, pero vecinos informaron que ninguna escuela abrió.
Mientras que el personal médico que sube diariamente a las comunidades fue concentrado en el centro de salud de Ayutla, como medida de seguridad.
En el hospital general los trabajadores pidieron a pacientes y familiares que llegaban desalojarlo y sólo atendieron urgencias.
Consultado en la mañana, un comerciante informó que no abrió su tienda de abarrotes y que el mensaje de la UPOEG fue que después de las 4 de la tarde no saliera a las calles, por su propia seguridad.
“A estas horas hay poco movimiento en Ayutla de ciudadanos, la mayoría está en sus casas”, dijo a las 12 de la tarde.
En el día tampoco hubo venta de tortillas, la mayoría de los pequeños y medianos comercios cerraron, también las tiendas de autoservicio Chedraui y Aurrerá.
Los comerciantes que decidieron laborar empezaron a cerrar y levantar sus locales a las 2 y media de la tarde. A las 3 de la tarde todo estaba cerrado y todos estaban encerrados, informaron diversas fuentes. Se pudo platicar con profesores, comerciantes e integrantes de las autodefensas, quienes coincidieron con lo que aquí se informa.
“Estamos encerrados y con temor de lo que pase. Las cosas no están bien aquí. Está el rumor de que nos van a dejar sin luz y sin red de telefonía”, confió un vecino anoche.

Confirma subsecretario la suspensión de actividades

El subsecretario de Desarrollo Político y Social del gobierno del estado, Francisco Rodríguez Cisneros confirmó que después del medio día las actividades se paralizaron en Ayutla.
Informó que soldados de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), de la Guardia Nacional y agentes de la Policía Estatal mantienen presencia en la población desde ayer en la mañana, ante los hechos de violencia que aseguró iniciaron desde hace dos días.
“Se incrementó la presencia del personal en esa cabecera municipal con la finalidad de generar estabilidad. Se solicitó el apoyo de la Sedena”, dijo.
Del número de muertos y lesionados, resultado de los enfrentamientos registrados este lunes, el funcionario afirmó que tuvo conocimiento de los que presentó la Fiscalía que son dos personas privadas de la vida.
De la suspensión de los servicios y las actividades de la población este martes en la cabecera de Ayutla respondió:
“Se suspendieron actividades después del mediodía y algunas personas decidieron cerrar y no realizar sus actividades. Estamos en seguimiento, el personal está haciendo los recorridos en la cabecera municipal y se sigue trabajando con la finalidad de generar estabilidad para que todo regrese a la normalidad”.
Pidió confiar en la autoridad y reveló que está en diálogo con el grupo de civiles armados de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), para evitar que se dé cualquier tipo de confrontación.
La presencia del Estado va a seguir en Ayutla, finalizó.