EL-SUR

Viernes 27 de Septiembre de 2024

Guerrero, México

Guerrero  

Marchan 2 mil manifestantes con padres de los 43 en Chilpancingo y arrojan piedras al Congreso

Rechazan la llegada del gobernador Héctor Astudillo porque no observan ningún compromiso claro por la presentación de los desaparecidos, y va a obedecer la política económica neoliberal del gobierno federal, dice el representante Melitón Ortega

Lourdes ChávezChilpancingo

Octubre 28, 2015

 

En la Acción Global por Ayotzinapa de ayer, estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos arremetieron con piedras y cohetones contra el Congreso local y un grupo de policías antimotines que se hallaba en el patio principal del inmueble.
Al terminar la marcha y mitin que encabezaron padres y madres de los 43 normalistas a 13 meses de la desaparición forzada de sus hijos en Iguala, unos 40 jóvenes embozados lanzaron piedras a los cristales del edificio vacío, donde horas antes rindió protesta el nuevo gobernador, Héctor Astudillo Flores.
Luego vinieron los cohetes y en poco tiempo dirigieron los proyectiles al patio del Congreso, hacia un grupo de antimotines que desde ahí vigilaron la protesta.
La instrucción para los policías, al parecer, fue mantener su posición pese a cualquier embestida, porque sólo se agacharon para cubrirse con los escudos, sin buscar refugio, mientras el equipo antimotín como sus escudos, saltaba del suelo con las explosiones.
Mientras los manifestantes se retiraban, salió de la puerta del estacionamiento otro grupo de policías estatales antimotines con gases lacrimógenos, y se suscitó un intercambio breve de pedradas. En la caseta de control de acceso en el estacionamiento quedó la leyenda “la bienvenida de Ayotzinapa para Héctor Astudillo. Faltan 43”. La riña terminó en poco menos de 10 minutos.
En la marcha del norte al sur de la ciudad, los manifestantes añadieron a las pintas en paredes con el nuevo lema del gobierno “Guerrero nos necesita a todos”: “nuevo gobierno, la misma mafia”, “Por eso sigo exigiendo la presentación de los 43”.

La marcha comenzó sin la CETEG

La marcha comenzó a las 11 de la mañana en el monumento a Nicolás Bravo conocido como El Caballito, al norte de la ciudad, con la llegada de los padres de los desaparecidos, normalistas de Ayotzinapa y de algunas normales rurales integradas a la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) en diez autobuses del servicio público a la capital.
No esperaron a los representantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG) que dirige el secretario general Ramos Reyes Guerrero, quien originalmente convocó a la marcha a las 10 de la mañana.
Unos 500 metros más adelante se integró un contingente amplio del Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG), seguidos del Frente Unido Contra las Reformas Estructurales de la Montaña baja que conformaron maestros y organizaciones sociales en Chilapa.
La protesta de unas 2 mil personas, principalmente de estudiantes, subió de la avenida Juárez a la avenida Alemán para incorporar a los maestros de la CETEG disidente y organizaciones que mantienen el plantón en el Zócalo de Chilpancingo desde el año pasado.
Pero la posición de los dirigentes de la CETEG disidente fue marchar independiente a los padres de familia, porque consideraron que papás y normalistas privilegiaron la invitación de Reyes Guerrero.
Al llegar al Zócalo se observó a un grupo reducido de maestros de la CETEG de Reyes Guerrero, no más de 30, integrados al final de la marcha, seguidos sólo de integrantes de la Universidad Intercultural Latinoamericana de Ciencias y Artes (UILCA).
En el mitin frente al Congreso el secretario técnico de la Red Guerrerense de Derechos Humanos, Manuel Olivares denunció que el ex gobernador, Rogelio Ortega Martínez llegó a “comprar conciencias para que muchos dejaran la lucha -como evidencia de que cumplió su objetivo, añadió-, notamos aquí la ausencia de maestros y de organizaciones sociales”.
Pero el representante de los padres de familia, Melitón Ortega señaló que el gobierno estatal ni el federal pudieron con los padres de familia, “con firmeza decimos que estamos aquí, en la lucha, y vamos a estar aquí hasta que se cumplan todas las recomendaciones del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI)”.
Es decir, los acuerdos para el seguimiento de la investigación del paradero de los 43 estudiantes desaparecidos y de justicia por todos los crímenes de Iguala, en el documento que presentaron a principios de septiembre al gobierno federal.

Rechazo al nuevo gobierno

En el mitin, Melitón Ortega denunció que en la administración de Rogelio Ortega fueron agredidos permanente por el gobierno estatal, y ayer en la mañana cuando se dirigían a Chilpancingo fueron hostigados por policías estatales en el túnel de la carretera de cuota Tixtla-Tierras Prietas, para revisarles sus vehículos.
Los estudiantes se negaron a abrir las puertas a los policías estatales para la revisión y los dejaron pasar luego de unos momentos.
Melitón Ortega declaró que los padres rechazan la llegada del gobernador de Héctor Astudillo Flores, porque no observan ningún compromiso claro por la presentación de los desaparecidos, y estimó que va a obedecer a la política económica neoliberal del gobierno federal.
“Este escenario (del nuevo gobierno) no es más que una repetición de los caciques de Guerrero, continúan los retenes en las carreteras para los padres y estudiantes de Ayotzinapa, y el gobierno federal insiste en decir que los alumnos detenidos por los policías federales fueron asesinados y quemados en el basurero de Cocula”, se quejó.
Un normalista de Ayotzinapa llamó a la unificación del movimiento “para derrotar a este gobierno fascista”.
El joven llevaba el pelo muy corto, que es lo que identifica a los estudiantes de primer grado, consideró necesario hacer una sola lucha y demostrar que el movimiento de Guerrero no ha caído, “tenemos la fuerza para exigir que regresen con vida a los 43 y justicia para los tres estudiantes asesinados” la noche del 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala.
Llamó a quienes tienen familiares desaparecidos a unirse al movimiento, “porque el nuevo gobierno no va a servir al pueblo y la población se merece un gobierno que surja desde abajo”.
“Impulsemos nuevas formas de lucha, no tenemos miedo a derramar más sangre, si es necesario nos enfrentaremos a la fuerza pública, lo vamos a hacer, y gritaremos la consigna que sigue viva desde la noche del 26, porque vivos se los llevaron, vivos los queremos”, expuso.
Antes de cerrar la actividad el representante de la comisión política de la CETEG oficial, Carlos Botello Barrera tuvo una intervención pero no tocó la división evidente del movimiento magisterial.