Familiares y amigos de Luis Ángel Quintana Saucedo y de su novia, Ilse Elizabeth Ramírez Reyes –detenidos por policías estatales el pasado 12 de febrero en un domicilio particular en la avenida La Boquita– protestaron durante casi dos horas adentro del Palacio Municipal de Zihuatanejo hasta que los atendió personalmente el alcalde perredista, Gustavo García Bello, quien les ofreció ayuda legal y económica para conseguir la liberación de la pareja, posteriormente marcharon y protestaron afuera de la subdelegación de la Procuraduría General de la República (PGR) donde el guardia de seguridad privada se apresuró a cerrar con llave las puertas del edificio.
La protesta en el Palacio Municipal inició a las 9 de la mañana cuando medio centenar de familiares y amigos llegaron con lonas y pancartas en las que exigían justicia y la liberación de ambos jóvenes.
A medida que iban llegando más participantes, los policías municipales que cuidan el Ayuntamiento cerraron con candado la puerta principal del inmueble para impedir que entraran, lo que generó inconformidad y pidieron ser atendidos por el alcalde Gustavo García.
Minutos más tarde les permitieron entrar y fueron atendidos por el director de Gobernación, Armando Carrillo, a quien le reprocharon el trato que les estaban dando, “nosotros somos el pueblo y ustedes son nuestros empleados”.
Ante la postura de los manifestantes de no retirarse hasta hablar personalmente con el presidente municipal, éste los atendió en la sala de Cabildo y ahí la señora y amiga de la pareja, Lucy Larzul reprochó a Gustavo García que su sobrino, Francisco Guido García, propietario de la casa donde ocurrió la detención, salió libre al día siguiente de que fue detenido junto con Luis Ángel e Ilse y el resto de los presuntos integrantes del grupo delictivo Guerreros Unidos.
García Bello justificó que él es dueño de la casa y que sólo fue detenido en calidad de presentado y por eso salió libre, lo que le valió más reproches por parte de los familiares y amigos de la pareja.
Enseguida, dijo que “desde el primer momento” ha estado pendiente del caso de Luis Ángel e Ilse porque sabe que son inocentes y que como abogado que es no permitirá que se cometa una injusticia por lo que informó que se ha mantenido comunicado con el padre del joven a quien le ha proporcionado ayuda económica y jurídica, así como también ofreció que hablará con su sobrino para que se presente a declarar a favor de ambos muchachos.
A la salida de la reunión con el alcalde, la abuela de Ilse, la señora Dora María Ruiz Rojas hizo un llamado al presidente de la República, Enrique Peña Nieto, “para que no permita que se cometa una injusticia” pues aseguró que tanto su nieta como Luis Ángel “son muchachos muy conocidos en la comunidad artística de Zihuatanejo, honestos, trabajadores, que nada tenían que ver con esas personas y que los están acusando injustamente cuando se los llevaron con engaños, les dijeron que iban como testigos y los están acusando de ser de la delincuencia organizada, de portar armas de grueso calibre y de homicidio, de nada han valido las pruebas que han presentado para demostrar que son inocentes, incluso ninguna de las personas con las que fueron detenidos los señala de algo o los relaciona con ellos, nada”.
Después de la protesta en el Ayuntamiento los manifestantes caminaron a las instalaciones de la subdelegación de la PGR, a tres cuadras del Palacio Municipal, en el trayecto gritaron consignas “el pueblo unido jamás será vencido”, “Luis e Ilse son inocentes, ¡justicia!”.
Al llegar a la PGR exigieron que las autoridades encargadas de la procuración e impartición de justicia “dejen de ser corruptas, están acusando a dos jóvenes inocentes que tenían un gran futuro por delante y ahora los están acusando de delincuentes y asesinos, ¡no lo son, son inocentes, libérenlos!”.