Feligreses de Apango, del municipio de Mártir de Cuilapan, retuvieron ayer durante cinco horas al vicario de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Humberto Cervantes Sánchez.
Cervantes Sánchez acudió a la parroquia de San Francisco de Asís para sustituir al sacerdote Carlos Cristino Luna, pero un grupo de vecinos se opuso y lo retuvo desde las 2 de la tarde hasta las 7 de la noche en el curato.
Vía telefónica, uno de los feligreses informó que Cervantes Sánchez llegó cerca de las 2 de la tarde y les informó que el sacerdote Carlos Cristino sería enviado a otra parroquia por decisión del obispo Salvador Rangel Mendoza.
Dijo que los feligreses retuvieron en el curato al enviado del obispo para que les firmara un documento donde se compromete a no cambiar al sacerdote, pero el vicario les dijo que no tenía facultades para tomar esa decisión.
Dijo que después de las 4 de la tarde llegó personal de la Subsecretaría de Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobierno, pero se negaron a dialogar con ellos y pedían que acudiera el obispo.
Cervantes Sánchez fue liberado a las 7 de la noche cuando los feligreses, personal de la Subsecretaría de Asuntos Religiosos y el vicario firmaron una minuta de acuerdos, donde se establece que el obispo acudirá el martes a las 9 de la mañana para dialogar con los inconformes, y mientras tanto el sacerdote Carlos Cristino Luna permanecerá en la parroquia de San Francisco de Asís.
El segundo acuerdo es que las parroquias de las comunidades de Atliaca y Acatempa del municipio de Chilapa, se separan de Apango.