* Se perdieron 350 empleos directos y mil indirectos en el establecimiento localizado en Tehuixtla, municipio de Teloloapan 

Eduardo Albarrán Orozco, Teloloapan * La pérdida de una derrama mensual de alrededor de 3.5 millones de pesos en este municipio, así como la pérdida de 350 empleos directos y mil indirectos, es resultado de la suspensión temporal de la actividad en la mina Rey de Plata, ubicada en la comunidad de Tehuixtla en este municipio de Teloloapan, en el norte de Guerrero.

Minera Rey de Plata inició sus trabajos de exploración hace aproximadamente 25 años, en diferentes etapas, en la búsqueda de lograr un tonelaje de mineral que hiciera viable la construcción de una planta de beneficio, explicó el gerente, Salvador Ortiz.

Entrevistado en sus oficinas, las cuales prácticamente se encuentran vacías de personal y equipo, Salvador Ortiz dijo que después de haberse hecho las exploraciones necesarias en el año de 1998, se determinó instalar la planta de beneficio en el año de 1999, con una inversión de 12 millones de dólares, tan sólo en la planta de proceso de producción.

Minera Rey de Plata es un proyecto conjunto entre Peñoles y Dowa Mining, esta última una empresa minera de origen japonés; la primera cuenta con el 51 por ciento de las acciones y la segunda el 49 por ciento.

Minera Rey del Plata se encuentra a 20 minutos de la cabecera municipal de Teloloapan, municipio gobernado por el Partido de la Revolución Democrática desde hace cuatro trienios. El acceso a Tehuixtla es de terracería.

Antes era una vereda. Pero cuando llegó la mina, ésta se encargó de hacer la carretera (de alrededor de 12 metros de ancho) y de darle mantenimiento, dijo Don Carlos, habitante de Zacatlán, comunidad que está 4 kilómetros antes de Tehuixtla.

Zacatlán fue una de las comunidades beneficiadas con la actividad de la mina. La parte de la carretera que atraviesa el centro de la comunidad está pavimentada, además de apoyos diversos, sobre todo a escuelas.

La suspensión de actividades de Minera Rey de Plata inició el 20 de diciembre de 2001. Las causas: la baja cotización de los metales industriales, como resultado y repercusión del ataque a las Torres Gemelas en Nueva York el 11 de septiembre de 2001.

“La situación a nivel mundial nos llevó a tomar esta decisión. En estos momentos el precio de los metales a nivel mundial nos ha hecho incosteable continuar con los trabajos en la mina. La situación es tan crítica que nos sería imposible cumplir compromisos con clientes, con proveedores y con los trabajadores”, indicó Salvador Ortiz.

De los 350 trabajadores de la mina, sólo se encuentran actualmente alrededor de 50, de los cuales la mayoría son trabajadores de mantenimiento, ingenieros y personal administrativo. Todos ellos ultiman los detalles para el cierre de la mina.

Sólo se quedarán alrededor de 30 trabajadores, los que se dedicarán al mantenimiento y vigilancia de las instalaciones.

El salario mínimo más alto en el municipio para un trabajador, con categoría de obrero, es de 700 pesos semanales. En la mina se pagaba a los obreros, entre mil 100 y mil 200 pesos semanales, trabajando 48 horas a las semana y gozando de dos días de descanso.

De los 350 trabajadores de la mina 165 eran de Teloloapan y alrededor de 35 de Tehuixtla y comunidades aledañas a la mina; el resto venía de la región de Taxco, Iguala, Chilpancingo y de Campo Morado.

Minera Rey de Plata inició sus operaciones a partir del mes de octubre del 2000. En ese tiempo se realizaron varios trabajos de infraestructura, que incluyeron caminos nuevos, ampliación de caminos actuales, líneas de suministro de energía eléctrica, campamentos, casas, perforación de pozos para el suministro de agua, terminándose el proyecto a finales del año 2000.

Es a partir de finales del 2000 cuando se inician las operaciones de producción, mismas que se concluyen el 20 de diciembre del 2001.

Impredecible, cúando podrá reactivarse

–Usted mencionó que los trabajos de la mina se suspenden de manera temporal ¿Significa que hay posibilidades de que vuelva a trabajar?

–Existe la posibilidad, pero es muy difícil determinar en qué momento se puede volver económico la explotación del mineral. Hay situaciones que escapan a nuestro control, una de estas es el precio de los metales. Mientras no mejoren las condiciones de los metales, la mina no volvería a trabajar. Y de acuerdo a las proyecciones de los expertos, esta situación de desaceleración económica va a durar todo el año 2002.

Explicó que la baja del precio del zinc ha sido la más fuerte en los últimos 25 años, además de que se han registrado otras situaciones que no se habían vivido en la minería del país durante 25 años, que han afectado a otras mineras a nivel nacional.

–¿Significa que la industria minera del país se encuentra en riesgo?

–Sí, definitivamente.

–¿Puede desaparecer como una actividad importante para el país?

–Definitivamente. Tenemos noticias de que en México, se han suspendido en otras ciudades como Chihuahua, Coahuila, Zacatecas y Guanajuato, entre otras. Y esto como resultado de la baja de los precios.

Sin embargo consideró que en su momento puede reactivarse la minería, “cuando las condiciones mejoren”, dependiendo de lo que diga el Banco Mundial que es quien establece el precio mundial de los metales.

De la mina Rey de Plata se sustraía zinc, plomo, cobre, plata y oro, en este orden de importancia. Durante el año en que funcionó, el 2000, se procesaron 360 mil toneladas de mineral crudo, de esta cantidad se obtuvieron 50 mil toneladas de concentrado (producto final).

De estas 50 mil toneladas de concentrado, el 75 por ciento era de zinc, en tanto que el 25 por ciento restante era de plomo. En lo que se refiere a la plata, sólo se produjeron 60 toneladas durante ese año.

Salvador Ortiz, gerente de la Mina Rey de Plata comentó que con la suspensión temporal de los trabajos, “el impacto inmediato en la población de este municipio y de las comunidades cercanas a la mina, es la pérdida de empleos. Otro impacto es la derrama económica que se deja de recibir por los prestadores de servicios, que implican alrededor de mil empleos indirectos”.

Colaboró para construir aulas y carreteras

La empresa apoyó también algunos programas de desarrollo social. La mayoría en coordinación con la Presidencia Municipal que encabeza el perredista Ubaldo Salgado Mojica, y con la participación de las comunidades.

“Algunas de las obras que hicimos fueron aulas para la escuela en la comunidad, la construcción del zócalo de Tehuixtla; baños para la escuela primaria de Ahuehuetla; apoyos para la introducción de energía eléctrica para la telesecundaria de Tehuixta y de Zacatlán. Y algunas otras obras menores”.

Además Minera Rey de Plata colaboró con el municipio en la pavimentación del acceso principal a la ciudad de Teloloapan.

“La empresa apoya principalmente lo que tiene que ver con la educación, con apoyos para las escuelas primarias o secundarias. Como equipos de cómputo, mobiliario, material para mantenimiento”.

“La ampliación del camino de Zacatlán a Tehuixtla lo hizo la empresa, con sus recursos, material, equipo técnico y humano. El ayuntamiento apoyó con las gestiones necesarias para contar con el derecho de vía que se requiere en estos casos, y se contó con el apoyo de la gente para servidumbre de paso. La empresa es la que realiza los trabajos de mantenimiento de dicha carretera”.

Buscar un nuevo trabajo, la preocupación

Explicó que el personal que se quedará laborando en la mina se encargará de la vigilancia de instalaciones, mantenimiento de los equipos “para que estén en condiciones, para que en un momento dado puedan trabajar nuevamente”.

Agregó que también se quedará personal para hacerse cargo de trabajos de mitigación de impacto, como la reforestación, control de polvos, estabilidad de taludes, limpieza de deshechos de materiales de residuos domésticos, de residuos industriales; de la planta de tratamiento de aguas, del mantenimiento del relleno sanitario, de manera de que no exista ninguna actividad que pueda representar un riesgo al entorno, o fuente de contaminación.

Ahora, la preocupación de los habitantes de las comunidades cercanas a la mina será conseguir empleo o dedicarse nuevamente a la actividad agrícola. Además de que los caminos construidos con el tiempo se deterioran si no se cuenta con el mantenimiento adecuado.

Juana Beltrán Morales, una de las 35 mujeres que trabajaban en la mina y que tenía la tarea de operar un cargador frontal, ahora está desempleada.

Ella, acompañada de su hija y un sobrino, así como de Raymundo Cortés Jiménez, también empleado de la mina que se dedicaba a los trabajos de mantenimiento, sentados veían como tres máquinas hacían labores, mientras ellos tan sólo confían en que pronto, lo más pronto posible, la mina reinicie sus trabajos.

“Nos sentimos preocupados porque no es fácil conseguir trabajo por acá. No sabemos que vamos a hacer”, dijo.

Héctor Negrete, responsable de los trabajos de obra civil, es decir los apoyos a las comunidades con la apertura de caminos, construcción de aulas o pavimentación de calles, mientras mostraba las instalaciones ahora en silencio, comenta: “Atrás de aquellos cerros hay dos comunidades que ya nos pidieron que les hagamos un camino. Tenemos la maquinaria para hacerlo, pero ya no tenemos el personal suficiente. Nos vamos y no creo que los ayudemos como lo hicimos en otras partes”.

El mismo dice: “Cuando vamos a las comunidades en las que les hemos hecho alguna obra, sobre todo caminos, nos reciben con mucho gusto. Eso nos hace sentir bien, sobre todo seguros y satisfechos de que nuestra empresa sirva a todos”.