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Miércoles 24 de Abril de 2024

Guerrero, México

Educación  

Niños indígenas de Ayutla no estudian desde hace tres años cuando sus familias fueron desterradas

Vivían en Santiago Yolotepec, pero fueron expulsadas porque no quisieron pagar 6 mil pesos al supervisor de la zona escolar, Isidro Remigio Cantú, quien ahora es parte del Concejo Municipal de Ayutla, explican

Lenin Ocampo Torres El Filo de Yolotepec

Septiembre 07, 2020

Niños me’phaa de Ayutla, de la localidad de El Filo de Yolotepec, donde llegaron después de ser desplazados por un conflicto educativo, ahora no tienen maestros ni escuela ni luz ni internet, un joven de 17 años vecino de la misma comunidad que les enseña a leer y escribir Foto: Lenin Ocampo Torres

Lenin Ocampo Torres

El Filo de Yolotepec

Niños indígenas me’phaa de Ayutla de los Libres se encuentran sin estudiar desde hace tres años luego de que fueron desplazados de su comunidad.
Originarios de El Filo de Yolotepec, al menos 30 niños no estudian por un conflicto interno donde pobladores de Santiago Yolotepec los desterraron “por pedir la boleta de calificaciones de un niño”.
Durante una conferencia el fin de semana en la comunidad, denunciaron que el desplazamiento fue porque no quisieron pagar 6 mil pesos al supervisor de la zona escolar, Isidro Remigio Cantú quien ahora es parte del Concejo Municipal de Ayutla.
Desde hace tres años las 20 familias desplazadas fundaron El Filo de Yolotelec que aún no ha sido reconocido por las autoridades estatales.
“Los niños no pueden estudiar en las comunidades de Santiago (Yolotepec) y la Ciénega, la gente los corrió de las escuelas y ahora se quedaron sin papeles y muchos perdieron hasta su secundaria”, dijo Pedro Gatica Estrada.
Ahora después de 3 años sin estudios se les presenta la nueva dificultaded de estudiar con el nuevo sistema Aprende en Casa 2 que tampoco llega al pueblo porque no tienen luz e internet.
En la comunidad al menos 30 niños se encuentran en edad escolar y sólo aprenden a leer y escribir porque les enseñan los jóvenes del lugar.
“Sólo enseñamos algunas cosas a los niños, dibujos, letras del abecedario, por este problema que tenemos le pedimos a las autoridades que nos reconozcan como delegación y puedan estudiar los niños, y vengan los profesores”, expresó Gregorio Basilio Flores de 17 años, quien por culpa del desplazamiento dejó de estudiar la secundaria.
En El Filo de Yolotepec los niños hablan poco español y diariamente son sentados en mesas en el centro de la pequeña comunidad, donde les reparten hojas blancas para que realicen sus actividades de aprendizaje que no son reconocidas.
“Por un problema de la boleta de calificaciones se generó este problema grande, como no queremos conflictos nos venimos a este lugar, ahora pedimos a la Casa de los Pueblos (de Ayutla) que nos reconozca como delegación”, pidió Anastacio Basilio Castro otro de los desplazados.
La comunidad necesita el reconocimiento como delegación para tener una clave escolar y que los niños tengan maestros.
El conflicto se derivó luego de que el supervisor Remigio Cantú negó una boleta al niño Delfino que estudiaba la primaria de Santiago Yolotepec. Los pobladores denunciaron que les pedían 6 mil pesos y por no pagarlos en una asamblea fueron expulsados del pueblo.
“Nos entregaron la boleta con la observación que el ‘Niño no había pasado de grado’, eso causó el enojo de los pobladores y el problema terminó cuando nos sacaron de Santiago (Yolotepec)” mencionó uno de los pobladores de El Filo.
Al mismo tiempo la comunidad vecina de La Ciénega no permitió que los niños estudiaran y desde hace tres años se encuentran sin recibir clases.
Ahora con el nuevo sistema de enseñanza también se sienten desplazados, pues la falta de luz e internet no les deja alternativas para poder salir adelantame en materia educativa.
La nueva comunidad se fundó gracias a que señor Luis Flores Santiago les ha dado el espacio para asentarse y vivir aquí, dejaron sus casas y ahora poco a poco están construyendo sus viviendas, ya hay una pequeña clínica (sin doctores) que tiene lo elemental por si se enferman” indicó Hoguer Morales Miranda del Comité de Apoyo para los desplazados.
A la comunidad no llegan los apoyos federales como el fertilizante, sembrando vida y las becas Benito Juárez para los niños.
Para llegar al El Filo de Yolotepec se debe caminar 30 minutos por una barranca en malas condiciones, en el pueblo hay al menos 10 casas de adobe y techos de lámina, una clínica y una capilla que los domingos ocupan para oficiar misas.
Los pobladores exigieron al Concejo Municipal de Ayutla y al gobierno estatal que sean reconocidos para que también puedan tener acceso a la salud y educación.
También denunciaron que por las noches son acosados por grupos de hombres armados que “pretenden sacarlos y temen que haya muertes de inocentes” por el conflicto con los pueblos vecinos.