Estudiantes y maestros de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) marcharon en la capital y protestaron en la Fiscalía General del Estado (FGE), para exigir justicia para el alumno de la Escuela Superior de Artes, Darwin Raymundo Barrientos Miranda, quien fue asesinado el miércoles junto a otro joven.
Los universitarios reprobaron las acciones de los policías y agentes ministeriales que llegaron a la lateral del bulevar Vicente Guerrero, frente a la colonia Vista Hermosa, donde cayeron Barrientos Miranda y su acompañante, ya que como consta en videos difundidos en redes sociales, el estudiante de la escuela de Artes aún estaba vivo pero no recibió la atención médica correspondiente, por lo que exigieron que se sancione a los responsables.
A las 10:30 de la mañana, los universitarios partieron en marcha desde Radio Universidad hasta la FGE, antes se detuvieron en la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum) y en la Ciudad Universitaria Sur, donde llamaron a la comunidad a alzar la voz para exigir el esclarecimiento de la muerte de Barrientos Miranda, así como de los dos estudiantes asesinados en hechos distintos el 8 y el 13 de mayo, Jahaziel Gálvez Ayatle, de Filosofía y Letras, y Cristian Santiago Navarrete, de Ciencias de la Comunicación y Mercadotecnia.
Los universitarios ocuparon sólo un carril de las avenidas y calles que recorrieron para evitar obstruir el paso vehicular durante la marcha, además corearon consignas como “¿qué pide la UAG? ¡justicia!” y portaban pancartas en las que se leyó: “Basta de violencia”, “ni uno más” y “#MeQuieroVivo, no es homicidio, es inseguridad”.
En las acciones de protesta participaron principalmente estudiantes de la escuela de Artes, la directora del plantel, Olivia Álvarez Montalbán, y el subdirector, Rafael Damián Reyes, así como universitarios de Filosofía y Letras y Comunicación y Mercadotecnia.
Previo a la marcha, los estudiantes de la escuela de Artes, Álvarez Montalbán y el alumno de Filosofía y Letras, Carlos Javier Sánchez Dionicio, acudieron a la Radio Universidad para exigir a las autoridades municipales, estatales y federales, que garanticen la seguridad en el estado y esclarezcan los asesinatos de los universitarios, ya que no se trata de casos aislados.
En la Codehum, un representante del presidente Ramón Navarrete Magdaleno, atendió a los universitarios ya que el ombudsman no se encontraba en las instalaciones, por lo que se programó una reunión que se llevará a cabo el próximo lunes, 29 de mayo.

Protestan en la FGE

En la FGE una comisión de universitarios, encabezada por maestros de la escuela de Artes, se reunió con el fiscal Javier Olea Peláez, mientras que el resto de los manifestantes realizó un mitin frente a las instalaciones.
Un estudiante de la Escuela Superior de Gobierno y Gestión Pública de la UAG expresó que “nos están matando (a los jóvenes), están matando el presente México, el presente de Chilpancingo, no es posible que la gente siga de apática, mírennos cómo estamos ahorita, somos muy poquitos, lamentablemente nos encontramos con gente que nos desacredita, que nos dice que somos unos revoltosos, pero no, nosotros no tenemos armas, nuestra mejor arma es nuestra voz”.
El estudiante de la escuela de Artes, Emilio Nava Dionicio, dijo que la molestia principal de los universitarios es que Barrientos Miranda no murió al instante, luego de recibir impactos de bala, sino que agonizó varios minutos, “se aferró a la vida”, pero no recibió ningún tipo de auxilio de los policías que llegaron al lugar.
En declaraciones luego de la reunión con Olea Peláez, la comisión informó que el fiscal dijo que ya estaba abierta una carpeta de investigación por el asesinato de Barrientos Miranda y su acompañante, pero se comenzará una nueva investigación para analizar los videos que se difundieron en las redes sociales, donde se muestra que el universitario no recibió el auxilio necesario de parte de los policías, los cuales serán sometidos a un peritaje para determinar si hubo negligencia y así, aplicar las sanciones correspondientes.

Se reúnen con el rector

Tras la protesta en la FGE, los universitarios marcharon hasta la Rectoría de la UAG, ahí se reunieron en el auditorio con el rector Javier Saldaña Almazán y el secretario general, José Alfredo Romero Olea.
Los universitarios le entregaron a Saldaña Almazán el pronunciamiento y las demandas de la escuela de Artes. Al respecto del caso de Barrientos Miranda, a su vez el rector informó que ya dialogó con Olea Peláez, quien le aseguró que se hará una investigación profunda de los hechos, porque Barrientos Miranda no recibió la atención adecuada. Recordó que el estudiante de la escuela de Artes era padre y se dedicaba a apoyar a su familia.
Saldaña Almazán contó que el 24 de mayo, antes de que Barrientos Miranda fuera asesinado, afuera de la Rectoría “había un carro con gentes armadas, que no eran policías, por eso hablé con el director de la Policía Ministerial y vino el grupo de reacción, y salieron corriendo (los desconocidos) hacia allá arriba, pero más tarde se robaron un vehículo de allá afuera, inmediatamente después pasa este lamentable hecho de nuestro compañero”.
Aseguró que le pidió a Olea Peláez que no se retrasen las investigaciones, “se debe dar respuesta real, se pudo haber evitado incluso esa muerte, si se le hubieran dado los primeros auxilios a nuestro compañero (Barrientos Miranda)”.
Contó que una estudiante de la escuela de Psicología fue secuestrada, por lo que pidió la intervención del Grupo de Reacción de la Fuerza Aérea, “afortunadamente fue rescatada”, aunque no detalló los hechos. Lamentó que “si no es una cosa es otra”.
Los estudiantes de Ciencias de la Comunicación y Mercadotecnia le dijeron al rector que tampoco se ha resuelto el caso de Santiago Navarrete, quien fue asesinado el 13 de mayo, durante los enfrentamientos entre el Frente Unido para la Seguridad y Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) y la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), en El Ocotito, al respecto Saldaña Almazán señaló que apoyó a la familia del joven, quien también se dedicaba a trabajar para poder mantener sus estudios, “es un caso que tengo muy cerquita”.
Saldaña Almazán dijo que los asesinatos son un golpe fuerte, pero “tenemos que seguir trabajando, para no fallarle a nuestros papás, para no fallarle a Guerrero, esa es nuestra meta y nos duele mucho que no haya condiciones”.
Añadió que dentro de unos meses se abrirá el campus en Zumpango, municipio de Eduardo Neri, donde se ubicará la escuela de Artes, lo cual es un logro de la Universidad, por su parte los estudiantes pidieron que se resuelva cómo se trasladarán a las instalaciones, ya que lo principal es garantizar la seguridad.

Barrientos Miranda trató de levantarse, pero no recibió auxilio

Este viernes se difundió en redes sociales un video de 2 minutos y 50 segundos, que fue grabado por un transeúnte que se detuvo a observar los hechos, luego de que Barrientos Miranda y su acompañante recibieron impactos de bala.
En el video se observa a Barrientos Miranda, de pantalón de mezclilla azul y camisa blanca, tratando de incorporarse reiteradas veces, sin éxito, mientras policías estatales y agentes ministeriales acordonan la zona de los hechos.
Un agente se acerca a Barrientos Miranda, quien se aferra a su pierna e intenta incorporarse, en un claro gesto de auxilio que es ignorado por el policía, quien en lugar de brindar la atención médica correspondiente al universitario se inclina para tomarle fotografías.
La persona que grabó las imágenes, un hombre como se distingue por la voz en el video, dice que Barrientos Miranda “se está ahogando”, pero los policías no realizan ninguna acción de primeros auxilios, sólo fotografían la zona.
En el minuto 1:25 del video, se observa que el agente ministerial se inclina para abrir la camisa de Barrientos Miranda y analiza los impactos de bala en su cuerpo, mientras un policía estatal fotografía los hechos de cerca. Para entonces el universitario ya no se mueve.
Una ambulancia llegó al lugar, 40 minutos después de los hechos, Barrientos Miranda fue declarado muerto, ante la vista de los transeúntes que observaron al universitario cuando aún vivo, pidió auxilio y trató de levantarse.