Karina Contreras

Paristas de los Laboratorios de Análisis Clínicos agremiados en el Sindicato de Trabajadores Académicos de la Universidad Autónoma de Guerrero (STAUAG), tomaron las oficinas de la Coordinación General de la Zona Sur, para exigir un diálogo con la administración central, que encabeza el rector Javier Saldaña Almazán, y exponer sus peticiones.
Los trabajadores ya llevan 36 días en paro para demandar insumos, equipo y la salida de un trabajador “de confianza”. Alrededor de las 9 de la mañana, los trabajadores de laboratorios, apoyados por las delegaciones de la Zona Sur y de la Preparatoria 17, cerraron las oficinas de la coordinación y advirtieron que lo harán en otros espacios de trabajo.
El delegado sindical de los laboratorios, Flaviano Herrera Mejía, dijo que las demandas que hacen son justas, son legales y no son políticas, como se dijo en el Consejo Universitario. Indicó que como han sido ignorados tuvieron que hacer el paro de labores y, según él, la administración central ha usado al Consejo Universitario para “amedentrar a través del departamento jurídico”, que le han manifestado que su movimiento no tiene fundamento porque “no se ha dado aviso a la Rectoría”.
Añadió que el laboratorio está deteriorado por la falta de atención de las autoridades universitarias y, por eso, quieren hablar con el rector, porque desde que tomó el cargo no han podido platicar con él. Ante lo señalado en el Consejo Universitariom de que el laboratorio de Acapulco y el de Iguala ya no tienen razón de ser, el dirigente sindical dijo que ese órgano tiene la obligación de conocer al fondo lo que plantean las autoridades y no nada más levantar la mano.
Sobre que este centro de trabajo puede desaparecer, el dirigente sindical dijo que hay mucho desconocimiento, porque el laboratorio tiene un fundamento legal y desde hace 50 años se ha apoyado a la comunidad universitaria, ha apoyado al pueblo de Guerrero, ha apoyado a los más desprotegidos y se había cumplido con todas las necesidades de análisis clínicos.
Reconoció que desde hace dos años no tienen un funcionamiento completo, más que del 10 por ciento, porque se ha mermado el trabajo por falta de equipo, de apoyo económico y no tener lo necesario, como la compra de reactivos, y “no podemos dar el servicio”.
Señaló que hay cerrazón de la administración de dialogar con los paristas y acordar lo que más le conviene a la UAG y a los laboratorios.
Indicó que por la falta de equipo no se hacen ultrasonidos ni rayos X, además a lo poco que tienen no se les da mantenimiento, “a través de los años se han deteriorado todos esos equipos y es la razón nuestras actividades han sido mermadas. No tenemos función laboral y el personal académico exige al rector el equipamiento total y seguir laborando como años anteriores”.

Indicó que lo que ha visto es que se busca cerrar el área, pero que ellos van a seguir luchando, van a seguir protestando y pidiendo el diálogo, ver las alternativas para buscar la sensibilidad del rector, “ser escuchados porque nuestro centro de trabajo no puede ser cerrado, no puede seguir en esas condiciones el laboratorio”.
El dirigente llamó a las delegaciones sindicales de la UAG para luchar y que el laboratorio dé un servicio de calidad.