Dos hombres fueron asesinados, uno de ellos a balazos, y otro más fue herido, en la jornada violenta del sábado y domingo en Acapulco.
Ayer un hombre fue ejecutado a balazos, en la colonia Miguel Hidalgo, ubicada en la parte alta de Las Cruces.
El crimen fue reportado minutos antes de las 4 de la tarde en la calle Silvestre Castro, cerca del centro de salud, informaron policías estatales.
Mediante una llamada de emergencia, agentes fueron alertados de detonaciones de arma de fuego.
La versión policiaca indica que hombres armados privaron de la libertad a su víctima y después lo bajaron de un automóvil.
Un pistolero le disparó en la cabeza y el cuerpo quedó tendido en la vialidad.
El hombre, de unos 40 años, vestía pantalón azul, playera blanca a cuadros y zapatos cafés.
Después de las diligencias, el cuerpo en calidad de desconocido fue trasladado a las instalaciones del Semefo.
Más tarde, un hombre fue herido a balazos y golpeado a cachazos en la cabeza, en la avenida Costera.
La agresión fue reportada a las 5:30 de la tarde, afuera del parque Papagayo, de acuerdo con el expediente de la Policía Turística.
Un hombre armado persiguió a su víctima en la banqueta y al darle alcance le pegó con la cacha de un arma, le disparó en el brazo y lo dejó herido, de acuerdo con la información recabada.
El hombre herido fue atendido por paramédicos de la Cruz Roja y después trasladado a un hospital cercano.
El sábado, un joven fue asesinado a golpes en el Mercado Central, en la colonia Progreso.
El hecho violento fue reportando a las 7 de la mañana en la calle Diego Hurtado de Mendoza, informaron policías municipales.
Según testigos, dos hombres interceptaron a su víctima y lo golpearon por varios minutos.
Policías encontraron el cuerpo en la entrada número 13 del centro de abasto. El hombre de unos 35 años, vestía pantalón de mezclilla azul, con playera negra y sin zapatos.
Por otro lado, era de nacionalidad colombiana el hombre asesinado a golpes envuelto un bolsas de plástico en la colonia Nuevo Puerto Marqués.
La víctima se llamó Rodrigo Antonio, de 48 años, era empresario y vivía temporalmente en la unidad habitacional Luis Donaldo Colosio, según el expediente del Ministerio Público.