Jorge Nava * El español avecindado en la colonia La Venta, Miguel Argeni Quesada, asesinó a balazos a su hija y a su yerno, luego de una discusión familiar.

En presencia de su nieto de un año y dos meses, Edwin de Jesús Correa Argeni, el presunto asesino dijo “ya me tenían harto, se metían en todo lo mío”.

En declaraciones a los reporteros, Argeni Quesada, de 67 años, dijo que tanto a su hija María Cristina Argeni Sánchez, de 22 años, como su yerno David Enrique Correa Rivera, ya se les había advertido.

Sobre la razón para matarlos, expuso, como “la gota que derramó el vaso de agua”, que su hija y su yerno acudieron el viernes pasado a la agencia Volkswagen, donde recogieron su vehículo modelo Sedan, el cual llevó a reparar desde días antes.

Señaló que al saber eso corrió a su cama para sacar de debajo de su almohada su pistola calibre .38 Súper, y disparó en varias ocasiones sobre ellos.

El domicilio donde ocurrió este hecho fue en el número 1 de la colonia Insurgentes, jurisdicción del poblado La Sabana, a las 4:30 de la tarde.

Argeni Quesada, originario de Barcelona, España, contó que lleva 23 años de radicar en el estado, donde en próximos días la Secretaría de Relaciones Exteriores le expediría su carta de naturalización.

Recordó que primero vivió en la ciudad de México, donde conoció a la mamá de su hija, Margarita Sánchez Quiterio, oriunda de Campo Nuevo, municipio de Tlapehuala Guerrero, a quien contrató de cocinera.

Señaló que la mujer contaba con cuatro hijos, y al verla en esa situación la hizo su esposa.

Dijo que después se fueron a vivir a Campo Nuevo, donde procreó a su hija María Cristina.

Lamentó que Sánchez Quiterio se fue con otro hombre a Estados Unidos, y solamente mantenía comunicación con su hija.

Explicó que actualmente está pensionado por su país, donde trabajó como agente de bienes y raíces.

De su yerno, agregó que tenía un mes de haber renunciado como soldado raso.