Jacob Morales Antonio

La Fiscalía General de Guerrero informó que la causa del incendio del inmueble de palapa ubicada en playa Papagayo, fue por una fuga de un tanque de gas LP ubicado en su interior, luego de las investigaciones y diligencias que hicieron los peritos de la institución.
En un comunicado emitido a las 5:30 de la tarde, la Fiscalía subrayó que “como resultado de las investigaciones y la intervención del personal pericial, se determinó lo siguiente: la causa del incendio se debió a una fuga proveniente de un tanque de gas L.P. ubicado en el interior del comercio”, dejando sólo daños materiales y sin personas heridas o fallecidas.
Antes, a las 10 de la mañana, la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil del estado, informó que empleados de la dependencia atendieron un incendio reportado a las 12:10 horas del miércoles, que fue controlado y sofocado en coordinación con bomberos del municipio de Acapulco.
“De acuerdo con las primeras diligencias, el siniestro se originó por un desperfecto que presentaba uno de los tanques de gas del establecimiento denominado Mi Vereda Tropical, construido a base de material de mampostería, madera y palma”, se indicó.
En tanto la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), respaldó lo informado por las autoridades durante la mañana que el incendio se originó por una fuga de gas.
La Canirac y el Consejo Coordinador Empresarial se solidarizaron con los propietarios del establecimiento y ofrecieron intervenir para poder conseguir algún crédito blando para su reconstrucción, pero también pidieron a las autoridades apoyar al establecimiento.
En un recorrido por la mañana aún salía humo de los restos carbonizados de los barrotes de madera que cargaban la estructura de palapa, y por la tarde bomberos del municipio acudieron a retirar dos tanques estacionarios de gas que se encontraban en el techo del inmueble, dejando un cilindro que es el que aparentemente tuvo la fuga.
Este no es el primer incendio de inmuebles que hay en la zona de playa, el 9 de febrero, a dos meses del impacto del huracán Otis, fue incendiando el restaurante del club de playa Kalei en playa El Morro; el 8 de marzo fue incendiado un módulo con mobiliario y dos motos acuáticas en playa Icacos; la madrugada del 8 de mayo fue incendiado el restaurante Bambú y parte del restante Tío Alex, en playa Condesa.

En menos de una hora 28 años de trabajo se volvieron cenizas

La señora Guadalupe Zamora Bahena es la propietaria del inmueble que albergaba el restaurante de mariscos Mi Vereda Tropical, el restaurante de comida rápida Marea Salada y la crepería y cafetería Dubai.
Contó que ella supo del incendio a las 11:30 de la noche del martes, pero cuando llegó ya estaban los bomberos y no la dejaron acercarse porque aún quería recuperar cosas del inmueble.
La mujer indicó que según el dictamen preliminar que le habían dado, la causa del incendio fue por la fuga en un tanque de gas.
Los tres negocios emplean a 25 personas, la mayoría mujeres que desde las 8 de la mañana entran a trabajar en el restaurante, al mediodía entraba el turno de la comida rápida y por la tarde-noche los que estaban a cargo de la crepería y cafetería.
El local recién había sido reconstruido, luego del devastador impacto de Otis, que lo dejó sin su techo de palapa, además de la pérdida de productos perecederos, y equipo de cocina que fue robado.
La mujer sollozante contó que reconstruir el techo de palapa le costó 350 mil pesos, sin considerar el mobiliario, y el equipo de cocina que tuvo que volver a comprar.
“No sólo perdí yo, hay 25 familia que dependen de estos tres negocios, y que lamentablemente quedamos a la deriva y estamos pidiendo el apoyo de los tres niveles de gobierno”.
Lamentó que todo lo que ya había invertido para el inicio de la temporada vacacional de verano se perdió, “no nos queda más que reconstruir, porque tenemos la necesidad de trabajar”.
Guadalupe indicó que ella ha cumplido con todos los pagos del uso de la zona federal, además de los impuestos y las contribuciones con el Ayuntamiento. Pero con lo único que no contaba era con una póliza de seguro, porque dijo que las empresas no manejan pólizas para estos lugares con techos de palapa debido a que el riesgo es muy alto.
Informó que desde hoy los trabajadores ayudarán a hacer las tareas de limpieza, pero también se van a sumar los propios prestadores de servicios turísticos y vendedores de la playa que se han solidarizado con el negocio.