Karina Contreras

El huracán John removió los recuerdos del pasó del huracán Otis, en octubre pasado, donde sus rachas de vientos que hacía un ruido estremecedor, el sarandeo de los árboles, así como el ruido que hacían las láminas inmediatamente llevaron aquella noche y no le permitió a la gente dormir.
Han pasado casi 11 meses del huracán Otis y mucha gente sigue con el temor y muchas reconocen que no durmieron y estuvieron rezando, pidiendo a Dios, que todo pasara pronto. Una de ellas es la señora Martha, que vive en Arroyo Seco cerca del río de La Sabana, quien dijo que nada más empezó a escuchar las “láminas sonando y me puse de nervios”.
Comentó que vive nada más con sus perros, quienes le hicieron compañía durante toda la noche, pero “no creas me dio miedo” y dijo que recordó la noche de Otis cuando volaron unas láminas de un tragaluz que tiene su vivienda. Indicó que no pudo dormir por los nervios y como sufre de la presión más se preocupó porque “ahogada no me lleva la calaca, pero de un infarto sí”.
Indicó que la lluvia no fue lo que la puso tensa sino el aire que se escuchaba muy feo y “como que de repente agarraba fuerza”. En la colonia Emiliano Zapata la señora Norma dijo que a la 1 y media el aire empezó a bajar y nada más continuaba la lluvia, pero sí se escuchaba el ruido que hacía el aire y como movía las láminas de las casas vecinas.
Ella dijo que con el huracán Otis se fueron todas sus láminas, pero con el dinero que le dieron de apoyo para la reconstrucción el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y su esfuerzo logró colar su loza y se sintió más segura con su esposo e hijas ante el paso del huracán John.
Mientras la señora Yoyis de Llano Largo, atrás de plaza Patio, comentó que a las 12 de la noche el viento estaba “horrible” y que tuvo que atrancar la puerta con un sillón. Pero se le metió agua por una de las ventanas y encontró muchas goteras en su vivienda.
Comentó que era imposible no recordar la noche de Otis, aunque los vientos fueron menos intensos, el “escucharlo rugir daba terror”.