Argenis Salmerón / Karina Contreras / Redacción

Con poco espíritu participativo y desorganizado fue el ejercicio del Simulacro Nacional de Sismo de 7.5 grados de intensidad, que propuso el gobierno municipal, y que se llevó a cabo en el hotel Amares, ubicado en la avenida Costera.
Mientras que un ataque a balazos a policías municipales que iban en una patrulla en la colonia Centro poco después de las 10 de la mañana ocasionó la suspensión del simulacro en oficinas municipales, federales y tiendas en esa zona de la ciudad.
Los huéspedes y empleados salieron tarde del hotel Amares, antes Calinda. Las personas no sabían dónde colocarse en el punto de reunión, y el que hablaba en la bocina pedía a los huéspedes no tapar los accesos del hotel para que entraran los trabajadores de rescate.
También se cambió el ingreso de los trabajadores del rescate, primero sería por el acceso de playa, y después por arriba del hotel para llegar el área de cocina.
La hipótesis del sismo de 7.5 de intensidad frente a las costas de Acapulco, era que causó una explosión en el área de cocina del hotel, y se rescató a cuatro trabajadores de esa área y cuatro de la planta de emergencia.
Los turistas grabaron con su teléfono celular el Simulacro Nacional 2024, y a los supuestos lesionados que trabajadores de rescate sacaron del hotel.
Asimismo sobrevoló un helicóptero de la Marina, y participaron Ejército, Marina, Bomberos, paramédicos del CUMA, CAPTA, y trabajadores del hotel.
El sentido de la avenida Costera que va de La Diana al Centro de Convenciones, fue cerrado por la Policía Vial durante el ejercicio.
El coordinador de Protección Civil y Bomberos del municipio, Efrén Valdez Ramírez, explicó que el ejercicio fue hecho en el contexto del Macro Simulacro Nacional 2024, efectuado en diferentes edificios públicos, escuelas, establecimientos y hoteles.
Indicó que en el hotel Amares fueron evacuados 89 colaboradores, 72 huéspedes y 109 trabajadores de obras, además se hizo el simulacro de rescate de cuatro trabajadores del área de cocina y cuatro de la planta de emergencia.
En un boletín de prensa, el coordinador de Protección Civil y Bomberos, Efrén Valdez Ramírez, dijo que se emitió una alerta por sismo con hipótesis de 7.5 grados Richter frente a las costas de Acapulco.
Al lugar acudieron trabajadores de Protección Civil y Bomberos, Centro de Atención y Protección al Turista (CAPTA), Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y agentes de las Fuerzas Armadas, quienes de igual manera hicieron una demostración de cómo se debe actuar en caso de un sismo de gran magnitud.
El jefe de la Oficina de Presidencia, Daniel Castillo de la Rosa, agradeció la participación del sector hotelero y dijo que en casos de emergencia, debe hacerse un trabajo coordinado entre los distintos órdenes de gobierno.
“Las autoridades municipales, estatales y federales seguirán haciendo su mayor esfuerzo para que en la medida de lo posible busquemos siempre preservar la vida humana, poder salvaguardar la integridad física de las y los ciudadanos”, dijo.
A pesar de que en restaurantes, tiendas departamentales, locales comerciales y oficinas del gobierno municipal, así como del federal tenían planeado participar a las 11 de la mañana en el Simulacro Nacional, debido a la situación de inseguridad por el ataque a policías municipales en la calle 5 de Mayo y persecusión en las calles Progreso y Vicente Guerrero, cerca del Palacio Municipal del Centro, se suspendió el simulacro y la gente se mantuvo resguardada en los inmuebles.
Luego de escucharse detonaciones de arma de fuego en la calle 5 de Mayo y de que comenzaran a movilizarse agentes de las diferentes corporaciones policiacas, así como de la Guardia Nacional y del Ejército en sus patrullas con las sirenas prendidas, el primer cuadro de la ciudad se paralizó y algunos locales comerciales cerraron sus cortinas y puertas, impidiendo la salida de quienes se encontraban en los inmuebles.
A las 11 en punto comenzó a sonar la alarma de las aplicaciones de alerta sísmica, pero del Palacio Federal, que se ubica en La Costera, a una cuadra del Zócalo de Acapulco, nadie salió, sólo se pararon en la puerta dos policías municipales y el equipo de guardias de seguridad privada del edificio, para proteger el inmueble, debido a los rumores que había sobre supuestas persecuciones en la zona.
A los brigadistas de Protección Civil de cada una de las oficinas del Palacio Federal, por medio del grupo de mensajes de WhatsApp, les avisaron con minutos de anticipación que por esta ocasión se suspendía la actividad programada.
“Por causa de fuerza mayor se cancela el simulacro. Por los acontecimientos cercanos al inmueble”, informaron al grupo de brigada interna de Protección Civil del recinto gubernamental.
La tienda departamental y el restaurante Sanborns Centro, así como en el edificio Oviedo y los locatarios del Centro Joyero, la tienda Chedrahui y otros comercios, tampoco participaron en el simulacro.
En Ciudad Renacimiento se suspendió la sesión de Cabildo abierto, que se desarrolló en la Escuela Primaria Gabriela Mistral, para que estudiantes y personas presentes participaran en el simulacro nacional de sismo.
Una vez que se escuchó la alarma la gente se paró de las sillas y empezó a caminar a los puntos señalados de reunión ante un sismo, mientras los niños también hicieron lo mismo.
Los trabajadores de Protección Civil municipal los iban guiando y recordándoles que no deberían correr, gritar ni empujarse.
En cuestión de minutos todos estuvieron en los dos puntos designados como punto de reunión en caso de sismo en dicha escuela. La alcaldesa Abelina López Rodríguez manifestó que es importante la participación de la ciudadanía en esas actividades y que no se debe olvidar que Acapulco es una zona altamente sísmica.
Además, están los huracanes por lo que consideró que esos simulacros ayudan y tendrán que ser la constante en Acapulco y “significa organizarnos en comunidad porque el gobierno, solo una cabeza imposible de llegar en tiempo real cuando hay esos tipos de fenómenos nataurales, entonces de aquí para adelante el paso que sigue es organizarnos en comunidad para tener toda una red que nos permita en tiempo real salvar vidas”.
López Rodríguez manifestó que el huracán Otis dejó una gran lectura y, por ello, Protección Civil requiere en todas sus áreas seguir reforzándola con tecnología, que incluye a los bomberos y sus estaciones. Señaló que ese apoyo tiene que quedar reflejado en el presupuesto del 2025.