EL-SUR

Miércoles 19 de Junio de 2024

Guerrero, México

Economía  

No hay sustento legal para prohibir que los turistas acampen en las playas, dice la Profepa

La delegada de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, Marisela Ruiz Massieu dice además que la Promotora de Playas carece de “peso jurídico” para solicitar a la federación administrar los tramos de la Zona Federal Marítimo Terrestre y tiene que seguir pagando los servicios

Karla Galarce Sosa

Marzo 18, 2016

La delegada de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Marisela Ruiz Massieu dijo que la Promotora y Administradora de Playas carece de “peso jurídico” para solicitar en destino a la federación los tramos de Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat) y que ocupa para su mobiliario en playas de Acapulco y Zihuatanejo.
Puntualizó que el gobierno estatal debe realizar la solicitud, por lo que el Organismo Público Descentralizado (OPD) que depende de la Secretaría de Turismo (Sectur) tendrá que seguir pagando los permisos transitorios por uso y goce de zona federal.
Además, ante el anuncio que hizo el Ayuntamiento de que no permitirá que los turistas acampen en las playas dijo que no hay sustento legal para esa prohibición.
En declaraciones al concluir el arranque del “Operativo de Seguridad Semana Santa 2016”, la funcionaria federal comentó que mantiene abiertos “algunos procedimientos administrativos” contra la Promotora de Playas por la ocupación en playa, aunque no proporcionó detalles.
“Hay algunos procedimientos, denuncias importantes que se han estado platicando pero que de inmediato no hay solución, pues debieron equiparla (a la Promotora) con mobiliario digno en lo que se deciden las soluciones”, expresó la funcionaria federal.
Comentó que el OPD interpuesto recursos de revisión y de ahí que todavía se tengan abiertos procedimientos; no obstante advirtió que la conclusión de las solicitudes “no tienen un buen futuro”, por lo que tendrá que pagar el uso de la zona federal si quieren seguir ocupándola con el mobiliario.
“La Promotora no tiene la capacidad legal para pedir (la playa) en destino porque casi todos tienen concesionarios. El gobierno del estado tendría la capacidad, pero no el OPD que es la Promotora de Playas”, expuso.
Ante el anuncio que hizo el Ayuntamiento de que mantendrá el impedimento de acampar en la playa, Ruiz Massieu advirtió que no existe tal prohibición.
“El municipio no puede implementar nada porque no le compete, no está prohibido acampar, no se tiene un sustento legal. He sugerido que en todo caso se destinen playas con los servicios, aunque para esta temporada no ha sido posible”, argumentó.
Anotó que al ser un deporte, el campismo representa una posibilidad de disfrute de la playa de la gente económicamente más débil. Consideró injusto que no se permita acampar a los turistas que cada año llegan a playas como Hornos, Tamarindos y Dominguillo, por lo que sugirió “cuidarlos y dejar que acampen”.
Informó que como en cada periodo vacacional, la Profepa implementa el Operativo Anual Playa en Regla y que este año comenzará hoy y concluirá el próximo 3 de mayo con la participación de 108 personas en la entidad.
Detalló que las playas Caleta y La Roqueta son las que representan la mayor problemática por la alta afluencia de visitantes que con los prestadores de servicios turísticos invaden accesos y no permiten el libre tránsito.
Añadió que en la playa de la zona Diamante el problema son los caballos y las cuatrimotos, “no sólo las que poseen los cooperativistas, sino la de los turistas adinerados que circulan en la playa con cuatro alrededor que los cuidan”.
Maricela Ruiz confirmó que restos de una ballena lo que condóminos de playa Revolcadero reportaron la semana pasada, los cuales fueron enterrados con la ayuda de un trascabo en un terreno baldío de la zona por inspectores de esa dependencia y marinos.
Como lo informó El Sur en su edición del 10 de marzo, el mar arrastró a la playa Revolcadero un trozo de piel de una ballena frente al condominio Las Olas, en la zona Diamante del puerto, donde inspectores de la Profepa confirmaron que se trataba de la piel de un cetáceo que murió en altamar hace tiempo y que con los procesos naturales de descomposición, el oleaje lo depositó frente a la zona de condominios del puerto.