Mariana Labastida

Turistas y residentes recibieron el año en el Asta Bandera frente a la bahía de Acapulco con la esperanza de que hubiera pirotecnia, algunos no se enteraron que fue cancelado el espectáculo, otros esperaban que algún hotel o condominio tirara fuegos artificiales al cielo para anunciar el inicio del 2021.
Las playas de la bahía de Acapulco estaban casi desiertas debido a la cancelación del espectáculo de pirotecnia y el cierre de la zona federal a las 7 de la noche, aunque eso no impidió que algunas familias y parejas llegaran a recibir el nuevo año, soltarán globos de cantolla y algunos cuetes.
Faltando cuatro minutos para las 12 del lado de El Veladero se empezaron a ver fuegos artificiales, el truene de los mismos hizo que el animador de la fiesta de Año Nuevo del hotel Krystal Beach diera el aviso que todavía no era la media noche y comenzó una cuenta regresiva por minutos. “¿Son las 12:57, vamos bien o vamos mal?” preguntó para tener la certeza de lo que faltaba para recibir el año nuevo e iniciar la cuenta regresiva.
El escenario de dicho hotel era el único que se veía en playa, fue el único establecimiento que extendió a la zona de arena la colocación de mesas que estaban también en el área de alberca y algunos balcones, debido a las disposiciones sanitarias de separación y cantidad de personas en cada una.
En el Asta Bandera algunas familias estaban sentadas en las escaleras y rampas de acceso a la playa, algunos en la orilla del mar y unos niños juegaban con cohetes, poco a poco incrementó la cantidad de personas en el lugar al acercarse la media noche. A pesar de que no habría pirotecnia, algunos acapulqueños decidieron ir la avenida Costera con la esperanza de que hubiera fuegos artificiales.
“Vinimos esperando que aunque el gobierno no lo iba a hacer porque lo dijo, pero esperaba que los particulares hicieran la pirotecnia de dos o tres cohetes, pero creo que me fallaron”, dijo Braulio Valdez. Después de recibir el año nuevo en el Asta Bandera sin algarabía, se retiró en busca de un bar o discoteca donde celebrar y pasar el resto de la noche.
Algunas familias llegaron con sombreros de papel, gorritos de fiesta, globos y la música la puso un automóvil del cual antes de la media noche se empezó a escuchar la cumbia del grupo Ensamble Tus jefes no me quieren, y un par de parejas empezaron a bailar en la banqueta.
En el Asta Bandera se escuchaba al animador del hotel Krystal que continuaba con la rifa de regalos entre los asistentes a la cena de año nuevo, noches de hotel, desayunos, son algunos de los premios. Empezó la cuenta regresiva, “feliz año nuevo” se escuchó y quienes estaban esperando fuegos artificiales se quedaron en silencio, unos segundos después alguien a lo lejos aplaudió celebrando la llegada del nuevo año, lo cual fue secundado por las otras personas, los niños siguieron quemando cuetes y los adultos se dieron abrazos.
En playa Papagayo no había automóviles estacionados sobre el camellón, tiendas de acampar en la arena, personas dormidas en la banqueta junto a sus vehículos donde hicieron alguna instalación de colchas y sábanas para dormir. En su lugar hubo fotos con la playa vacía al fondo.
Rosa María llegó al puerto con otros siete integrantes de su familia el pasado lunes, dijo que ni pensaban recibir el año nuevo en Acapulco, no se enteraron de la cancelación de la pirotecnia, “con eso veníamos por lo menos las luces aunque estemos en contingencia, porque es en medio del mar y queríamos que los niños vieran”, se regresan hoy a su casa en la Alcaldía Cuauhtémoc en la Ciudad de México.
En un recorrido por la avenida Costera se vio a familias caminando, otras rentando calandrias para un recorrido por la avenida aprovechando que el tránsito era fluído. Restaurantes como el Copacabana tenían sus mesas llenas, sin embargo había otros establecimientos que escasamente tenían dos o tres mesas ocupadas.
En la Condesa la fiesta estaba en su apogeo, lugares como Baby Lobster se veía lleno, aunque pasaba de las 12:30 de la noche, el animador pidió que levantaran los celulares con la lámpara encendida para hacer un conteo regresivo y darle la bienvenida al año nuevo, otra vez para que grabar el momento.
Por momentos se aglomeraba la gente frente a los establecimientos que estaban funcionando al detenerse a escuchar la música o ver a quienes estaban bailando, algunos con cubrebocas otros no y de los lugares que se activaron para la bienvenida del 2021 fue la icónica Disco Beach.