Redacción y Agencia Reforma

El Sur / Ciudad de México

El presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió ayer que su gobierno no se va a endeudar para rescatar a potentados pues eso es una “inmoralidad”, y planteó que si las empresas quiebran que respondan sus dueños o sus accionistas.
“Es una inmoralidad utilizar al Estado para rescatar a empresas o instituciones financieras en quiebra, ni lo sueñen”, dijo en su conferencia matutina de este jueves.
Ante la nueva propuesta del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) de contraer deuda para apuntalar la economía nacional, ratificó, “sin ofender a nadie”, que esas estrategias ya se acabaron.
Si hay que rescatar a alguien será a los más necesitados, dijo.
“Si hay una quiebra de una empresa, pues que sea el empresario el que asuma la responsabilidad o los socios, o los accionistas, porque el Estado tiene que proteger a todos y no actuar otorgando privilegios. Se tiene que poner por delante el interés general”, aseveró.
López Obrador desdeñó las 68 ideas que planteó el CCE para reactivar la economía.
Entre ellas propuso el miércoles instalar un Consejo de Emergencia Económica, reorientar el gasto público, aumentar la deuda pública y establecer incentivos fiscales y económicos específicos para las empresas, entre otras acciones.
El Ejecutivo planteó que el CCE está en su derecho de hacer los planteamientos que considere frente a la crisis, pero citó lo que establece el artículo 25 de la Constitución, en el sentido de que hay una rectoría del Estado en la política económica.
“No puede ningún grupo imponer su política. Corresponde al Estado, al gobierno federal. Con todo respeto, no vamos a continuar con más de lo mismo”, afirmó.
“Cuando hablo del artículo 25 de la Constitución, ahí se establece que el gobierno tiene que presentar un plan de desarrollo. Lo aprueba el Congreso y se tiene que aplicar. Entonces, lo que estamos haciendo se inscribe en ese plan de desarrollo, que ya no tiene que ver con la política neoliberal. No se parece en nada a los planes de desarrollo que se presentaban año con año o al inicio de sexenio durante los últimos 36 años. Es otra cosa.
“Si se trata de rescate hay que hacerlo pensando en los que más lo necesitan. No regresar al Fobaproa, de bancos quebrados, banqueros ricos. No socializar pérdidas y privatizar ganancias. ¿Como se va a convertir en deuda pública las deudas privadas?, no coincidimos”, insistió.
Dijo que no se puede regresar al pasado de rescates onerosos que también dieron pauta para una gran corrupción, en los que se inflaron los avalúos en la compra de cartera vencida que adquirió el gobierno federal en el contexto del Fobaroa, que costaría 180 mil millones de pesos y ha costado billones.
A pregunta sobre la petición del CCE de un encuentro con su dirigente Carlos Salazar para buscar opciones, López Obrador prácticamente lo desestimó.
“¿Tú tienes contacto con el Consejo Coordinador Empre-sarial, verdad?”, preguntó a la secretaria de Economía, Graciela Marquez, quien asintió.
“Siempre hay comunicación, la va a seguir habiendo. Nada más que quede claro, porque esto no se puede resolver en privado, en lo oscurito: los asuntos públicos tienen que ser cada vez más públicos.
“Nosotros no vamos a continuar con el modelo fallido de rescate de corte neoliberal, no llegamos aquí para hacer lo mismo, no engañamos a nadie”, reiteró.
López Obrador abundó en las diferencias en la propuesta “de hacer más de lo mismo” porque se pretendía posponer el pago de impuestos.
“Si lo hacemos y nos quedamos sin presupuesto y no estaríamos otorgando los créditos a los pequeños empresarios y empresas familiares ni ayudando a los pobres. Entonces sí, se nos viene un estallido social” .
Además ello sería volver a la cultura para no pagar impuestos, cuando ahora lo que se ha promovido es prohibir la condonación de impuestos.
“Se les hace raro que ahora tengan que pagar, porque no pagaban, no consideraban como parte de sus gastos el pago de impuestos, ahí veían qué machincuepa hacían, con los funcionarios de Hacienda, del SAT”, señaló. “Yo sé que se sienten incómodos, pero se tiene que ir acostumbrando”.
La otra propuesta era acudir a la deuda, “ pues estamos enfrentando esta adversidad sin contraer deudas” porque hacerlo es comprometer el futuro de otras generaciones”.
El presidente dijo que continuará con su plan de destinar miles de millones de pesos en la entrega de créditos y programas de bienestar.