Abel Barajas / Agencia Reforma

Ciudad de México

Al arrancar el primer juicio por espionaje con el software Pegasus, la periodista Carmen Aristegui confió en que la Fiscalía General de la República presente los elementos para convencer a la justicia federal de la responsabilidad del acusado.
Este lunes inició el juicio contra Juan Carlos García Rivera, empleado del grupo empresarial KBH, proveedor de Pegasus a distintas dependencias federales en el sexenio pasado, contra quien la FGR ha pedido una condena de 16 años de prisión por el delito de intervención de comunicaciones privadas.
El Juez de control Felipe de Jesús Delgadillo Padierna, en su calidad de tribunal de enjuiciamiento, será el responsable de instruir el juicio.
Al arribar esta mañana al Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Sur, Aristegui comentó que comparecerá en el juicio como víctima del espionaje de Pegasus por su labor periodística.
“Tengo confianza en que la Fiscalía podrá convencer a la instancias judiciales que tiene los elementos suficientes para que se identifiquen responsabilidades y se llame a cuentas a quienes hayan usado el sistema Pegasus con dinero público o dinero privado”, dijo la periodista.
“Espero que la Fiscalía General de la República pueda tener los elementos suficientes para esclarecer el caso de Pegasus en México y, bueno, participaré como lo he hecho a lo largo de estos años con la Procuraduría primero y después con la Fiscalía, en calidad de víctima de este sistema de espionaje”.
En este juicio, a lo largo del mes de diciembre, serán desahogados 124 documentales y 24 dictámenes periciales, así como las comparecencias de 71 testigos, incluidos ex mandos policiacos, de la FGR, académicos y activistas canadienses, un General y hasta un funcionario de la Secretaría de Economía.
La periodista señaló que si bien en esta causa penal ella es la única que tiene la calidad de víctima del espionaje de Pegasus, eso no quiere decir que haya sido la única persona que fue intervenida en sus comunicaciones con ese sistema tecnológico.
“En este caso, el proceso que se ha llevado a cabo, por parte de la Fiscalía, logró que se identificara mi caso específicamente como un caso en donde los jueces y las instancias judiciales reconocieron mi calidad de víctima y lo que es muy importante, les diría, no solamente se reconoce mi calidad de víctima de espionaje, sino de víctima con mi condición de periodista, porque se ha hecho una revisión de mis trabajos periodísticos en aquellos tiempos específicos de esos impactos a mi teléfono celular y entonces se consideró que si había esta condición que el espionaje se habría cometido por mi condición de periodista, eso es muy importante”, dijo.
“Hasta donde tengo entendido soy la única víctima judicialmente reconocida, no significa que sea la única víctima en el caso Pegasus, sabemos por otras circunstancias periodísticas y de otras revelaciones que hay una cantidad importante de personas de las cuales se sabe fueron espiadas”.
En la audiencia de este lunes tambien fue programada la comparecencia del testigo protegido con nombre clave “Zeus”, quien en 2019 reveló a la periodista esta trama de espionaje y dio lugar a que la Fiscalía iniciara la investigación que hoy tiene en la cárcel a García Rivera.
Una figura pública y testigo que está citado para ser interrogado es Omar García Harfuch, quien fuera aspirante a la Jefatura de Gobierno de la CDMX y hoy busca un lugar en el Senado, y su cita está prevista para el 18 de diciembre.

Testigo protegido Zeus confirma que fueron espiados empresarios como Slim, Larrea y “gente de Televisa”

Un testigo protegido de la Fiscalía General de la República reveló que la Administración de Enrique Peña Nieto empleó el software Pegasus para espiar a los empresarios Carlos Slim, Germán Larrea y directivos de Televisa.
Al iniciar el juicio contra Juan Carlos García Rivera, empleado del grupo empresarial KBH, proveedor de esta tecnología, el testigo con nombre clave “Zeus” declaró que su jefe Uri Emmanuel Ansbacher, de nacionalidad israelí, recibía vía telefónica instrucciones de Peña Nieto para espiar a objetivos específicos.
También aseguró que el ex secretario de Gobernación, Miguel Osorio Chong, y el ex titular del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), Eugenio Imaz Gispert, también daban indicaciones al dueño de KBH para definir a los objetivos de la intervención de comunicaciones.
“Zeus” dijo que el 11 de septiembre de 2015 Raul González, chofer de Ansbacher, le entregó una USB con la instrucción de enviar unos archivos a una lista de direcciones de correo electrónico. Por accidente, dice que le dio click a uno de los archivos.
“Se abrió un archivo Excel y le dije al chofer ‘tu jefe se codea con puro gordo’; el archivo tenía más de mil 500 registros, vi de periodistas, empresarios y políticos, vi los nombres de Carlos Loret de Mola, Jenaro Villamil, Héctor de Mauleón, Pedro Ferriz de Con, Carmen Aristegui,”, declaró ante el juez Luis Benítez Alcántara.
“Vi una serie de nombres de grandes empresarios como Germán Larrea, Carlos Slim y gente de Televisa”.
El testigo protegido explicó que cada registro de las personas que eran objetivo del espionaje incluía fotografías, contactos, correos electrónicos, registros de llamadas de entrada y salida, videos y mensajes.
En el caso de Aristegui, quien tiene calidad de víctima en este proceso, había fotos de ella en un parque y de sus padres, así como de otra mujer parecida a la periodista.
Agregó que este tipo de archivos los envió a un correo electrónico a nombre de “Eugenio”, pero no era oficial, sino una dirección de Gmail.
De acuerdo con “Zeus”, Ansbacher, dueño de Grupo KBH, no se mandaba solo para definir a los blancos del espionaje.
“Él también recibía órdenes, a mi me tocó ser testigo varías veces de llamadas que recibía, esas llamadas eran directamente del Presidente, a quien Uri Ansbacher le decía ‘patrón’; también había llamadas de Miguel Osorio Chong, a quien le decía ‘jefe’“, relató en la sala de audiencias.
“Y había otra serie de llamadas con Eugenio Ímaz Gispert, a él le hablaba en hebreo o en yidish, le preguntaba cosas y solamente le decía sí o no”.
El testigo se refirió al acusado como alguien a quien apreciaba y le había confiado muchos de los secretos relacionados con la intervención de comunicaciones ilegales.
“Pensaba que era mi amigo”, dijo más de una vez.
Tras el testimonio de “Zeus”, iniciará el testimonio e interrogatorio de Aristegui, la única que en este juicio está reconocida legalmente como víctima del espionaje con esta aplicación tecnológica.