Al menos 45 personas murieron y 30 resultaron heridas en dos ataques explosivos en la ciudad de Adén, en el sur de Yemen, informaron ayer fuentes de los hospitales.
La mayoría de las víctimas eran candidatos a reclutas del ejército. La milicia Estado Islámico (EI) se atribuyó la autoría del ataque en un comunicado en Twitter que no pudo ser verificado de forma independiente.
El objetivo de los ataques fue la casa de un alto mando militar y un cuartel de postulantes que querían enrolarse en el ejército. Por el momento no están claras las circunstancias exactas del hecho.
La semana pasada hubo ya dos atentados contra los militares -que también reivindicó el EI- en la ciudad de Mukalla, en el sudeste, en los que murieron al menos 38 personas.
El EI y la poderosa filial local de la red Al Qaeda ampliaron su presencia en Yemen debido al vacío de poder surgido por la guerra civil. Los rebeldes chiitas hutíes combaten junto con sus aliados contra los seguidores del presidente Abed Rabbo Mansur Hadi.
En marzo de 2015, una alianza de países árabes liderada por Arabia Saudí -que es sunita- comenzó a bombardear las posiciones rebeldes. Adén es la capital de facto de Hadi.