El ministro de Relaciones Exteriores del gobierno cubano, Bruno Rodríguez, celebró que las movilizaciones opositoras de ayer hayan culminado como una “operación fallida” la cual fue alimentada desde el extranjero, pues se crearon “otras expectativas” que finalmente no se produjeron.
“Los que crearon, fuera de Cuba, otras expectativas que se no cumplieron, se quedaron vestidos para aquella fiesta (…) Algunos de mis colegas en Washington se quedaron vestidos para la fiesta suya, que no ocurrió”, señaló Rodríguez en declaraciones para Cubadebate.
Asimismo, el ministro cubano lamentó las informaciones que se lanzaron desde el gobierno de Estados Unidos o por la oposición cubana, por lo que considera que “el guión no fue bueno” y que “la puesta en escena fue peor”.
En esta misma línea, criticó el papel de la prensa internacional, quien “no estuvo atenta” a estos mensajes lanzados por la oposición al gobierno del presidente Miguel Díaz-Canel.
Además, destacó que las grandes plataformas tecnológicas “alteraron sus algoritmos”, aunque remarcó el éxito del hashtag ‘CubaVive’, el cual recibió un apoyo “fortísimo” sumado a “actividades de apoyo” a la isla en “decenas de capitales del mundo”.
Ayer habían sido convocadas nuevas protestas contra el gobierno de Cuba, a pesar de que los organizadores ya habían sido avisados de las consecuencias legales a las que se enfrentan si continúan alentando unas movilizaciones que no fueron autorizadas por las autoridades.
La oposición, activistas y organizaciones internacionales denunciaron un despliegue policial “masivo”, “detenciones” y casas “sitiadas” que impideron que se desarrollen las movilizaciones previstas.
La plataforma opositora Archipiélago informó, en su perfil de Facebook, de arrestos y presiones contra quienes tenían previsto participar en la Marcha Cívica por el Cambio y aseveró que este “hostigamiento” es parte de las acciones de “acoso policial e intimidación” que “las fuerzas represivas están ejerciendo sobre quienes declararon su decisión de participar en la marcha del 15 de noviembre”.
El grupo también dio por desaparecidos a su moderador, Adrián Nápoles Capote, después de que su familia no haya logrado ponerse en contacto con él, y a su moderadora Daniela Roja, quien no dio señales “de vida” desde hace “72 horas”.
Un día antes (el domingo) fue el dramaturgo Yunior García, líder de Archipiélago, quien ya tuvo que suspender una caminata en solitario por las calles de La Habana tras denunciar haber sufrido un “bloqueo cruel, ilegal e inhumano” por parte de agentes del Estado y partidarios del gobierno.
Otros tantos opositores, periodistas independientes o activistas cubanos fueron también arrestados ayer cuando intentaron salir de sus domicilios en distintos municipios del país, si bien en La Habana es donde se desplegaron más agentes, recoge el medio Radio Televisión Martí.
El director de la ONG Human Rights Watch (HRW) para las Américas, José Miguel Vivanco, señaló también la detención de la restauradora de arte Carolina Barrero cuando salía de su vivienda y recordó que este año su casa “está sitiada por las fuerzas de seguridad de forma prácticamente constante”.
El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) tiene registrados más de 200 “actos represivos” desde el sábado hasta ayer a primera hora, atribuidos a una escalada de la presión por parte del gobierno para disuadir a la ciudadanía de participar en las movilizaciones opositoras de ayer.
El OCDH, vinculado a la oposición, denunció al menos 49 retenciones en domicilios y 25 casos de amenazas durante este periodo, si bien considera que se trata de un balance parcial porque es “una situación en desarrollo”.
Fuera de Cuba, sin embargo, se registraron alrededor de un centenar de actos vinculados con el 15N, entre los que destacaron los de Miami y Madrid.
Fuera de Cuba, sin embargo, se registraron alrededor de un centenar de actos vinculados con el 15N, entre los que destacaron los de Miami y Madrid.
Por otro lado, un grupo de ciudadanos cubanos se manifestaron frente a la Embajada de Cuba en la Ciudad de México, para apoyar las protestas por la libertad de presos políticos que se realizan ayer en la Isla.
Por otro lado, una multitud se reunió ayer frente a la sede de la misión de Cuba ante Naciones Unidas, en Nueva York, para expresar apoyo solidario a la isla, en un contexto de creciente hostilidad del gobierno estadunidense.
Representantes de la Coalición Cuba Sí Nueva York-Nueva Jersey y otras organizaciones participaron en esta manifestación portando carteles que pedían el fin del bloqueo norteamericano a la mayor de las Antillas.
En tanto, el asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, acusó ayer al gobierno de Cuba de emplear “tácticas de intimidación” contra la ciudadanía con el fin de “silenciar” su voz en el marco de las protestas llevadas a cabo durante estos días en la isla.
“Antes de las manifestaciones pacíficas (…) el régimen cubano, como era de esperar, desplegó una serie de duras penas de prisión, detenciones esporádicas, tácticas de intimidación y actos de repudio, todo en un intento de silencia la voz del pueblo cubano mientras clama por un cambio”, señaló Sullivan, según un comunicado difundido por la Casa Blanca.
Rusia denunció la injerencia de Estados Unidos en los asuntos internos de Cuba como muestran las “incendiarias” declaraciones que algunos de sus altos funcionarios estuvieron lanzado en vísperas de las movilizaciones contra el gobierno de la isla previstas para ayer.