Al menos 153 personas murieron en varios atentados en la zona costera de Siria que está bajo control del gobierno, en los peores ataques contra estas áreas desde el inicio de la guerra civil, informó ayer el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos.
Al menos 103 personas murieron en la ciudad de Yabla y al menos 50 en la de Tartus. “La cifra de víctimas podría aumentar ya que hay decenas de heridos”, dijo un activista desde la provincia de Latakia. Según el director del Observatorio, Rami Abdel Rahman, hay unos 200 heridos, algunos de ellos de gravedad.
Por su parte, la agencia de noticias estatal Sana habló de 45 muertos en Yabla y 33 en Tartus.
En Internet circula un comunicado en el que la milicia terrorista sunita Estado Islámico (EI) asume la autoría de los atentados, aunque su autenticidad no pudo ser verificada de forma independiente.
“Ataques de combatientes del Estado Islámico golpearon zonas alauitas en las ciudades de Tartus y Yabla en la costa siria”, afirma el comunicado, en referencia a la minoría religiosa a la que pertenece Bashar al Assad.
Las provincias costeras de Latakia y Tartus están desde 2011 en manos de las tropas del ejército del presidente Bashar al Assad.
Por su parte, Estados Unidos urgió ayer a Rusia a presionar al presidente sirio, Bachar al Assad, para que detenga sus “bárbaros” ataques aéreos a civiles en las localidades de Alepo y Daraya, y advirtió de que está en juego una “ruptura completa” del alto el fuego acordado entre las partes en conflicto.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, habló por teléfono con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, sobre los “ataques deliberados” contra fuerzas de la oposición y civiles que el régimen de Assad ha cometido “a lo largo del fin de semana”, según el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Mark Toner.
Kerry “urgió (a Lavrov) a presionar al régimen para que detenga de inmediato los ataques aéreos contra fuerzas de la oposición y civiles inocentes en Alepo y los suburbios de Damasco”, entre los que está Daraya, afirmó Toner en un comunicado.
En tanto, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó ayer los atentados en las ciudades sirias de Yabla y Tartús, reivindicados por el grupo terrorista Estado Islámico (EI), y alertó sobre el aumento de los combates en otros puntos del país.