EL-SUR

Viernes 19 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión  

Aguas con el golpe

ESTRICTAMENTE PERSONAL El procurador Daniel Cabeza de Vaca parece haber recuperado la vertical. Una sucesión de golpes espectaculares contra secuestradores                                                   –manufactura de la Agencia Federal de Investigaciones– y contra narcos … Continúa leyendo Aguas con el golpe

Diciembre 16, 2005

ESTRICTAMENTE PERSONAL

El procurador Daniel Cabeza de Vaca parece haber recuperado la vertical. Una sucesión de golpes espectaculares contra secuestradores                                                   –manufactura de la Agencia Federal de Investigaciones– y contra narcos colombianos –obra de la Subprocuraduría contra la Delincuencia Organizada– más besos públicos entre las dependencias a su cargo que estaban enfrentadas por el narcovideo de Los Zetas, es oxígeno para salir de su pesadilla. Tan fortalecido se debe sentir Cabeza de Vaca que en una gira esta semana por Zacatecas se dio el lujo de decirle a los estadunidenses que se relajen, que Los Zetas son cosas del pasado, pues no sólo no hay 40 desertores, sino que sus líderes, están presos o están muertos.

O sea, se puede concluir, Cabeza de Vaca volvió a enviar una señal a Washington de que no ha entendido nada de lo que está pasando. Su proceso de saneamiento ante la opinión pública mexicana no resuelve el problema por el cual se inició la dislocación de la PGR: los 40 militares que se fueron a trabajar con Los Zetas, que de sicarios del Cártel del Golfo han evolucionado a operar autónomamente ya no sólo en Texas, sino en la vecina Oklahoma, y los lejanos California, Florida y Georgia –el estado de mayor recepción de mexicanos indocumentados en los cinco últimos años– siguen libres y sin ser molestados por las autoridades mexicanas.

Cabeza de Vaca afirmó que es falso que Estados Unidos esté molesto con la PGR por todo el episodio que desató el narcovideo, lo cual puede gustar a sus jefes porque les quita algunas preocupaciones. Sin embargo, el diferendo con el gobierno estadunidense está lejos de ser zanjado, particularmente por lo que concierne al procurador. De acuerdo con fuentes con acceso a información privilegiada en Washington, el FBI tiene un expediente sobre Cabeza de Vaca que está cada vez más próximo a comenzar a ser difundido.

La parte que están dispuestos en Washington a dejar salir habla de la salud del procurador. Cabeza de Vaca, según el informe referido, tiene una afección cardiaca que, teóricamente, lo inhabilitaría para ocupar el cargo de procurador general. En efecto, desde pocos años antes de iniciar el gobierno de Vicente Fox, Cabeza de Vaca pasó por una operación a corazón abierto. El problema puede parecer menor en una sociedad política como la mexicana, donde no importan las enfermedades de los gobernantes para gobernar, y donde los expedientes médicos de las personas públicas ni son públicos, ni interesan al público. Esta realidad puede tranquilizar temporalmente a Cabeza de Vaca, pero no va a ser lo mismo cuando se le empiece a cuestionar internamente en Estados Unidos sobre sus capacidades para cumplir con el cargo. La percepción que se tiene de él tras el más reciente episodio, es que es una persona débil de carácter que no ha sabido imponerse. A la deficiencia de personalidad fácilmente se le puede sobreponer la ausencia de energía que requiere un procurador.

La operación a corazón abierto que se le practicó sugiere un problema en las coronarias, cuyas intervenciones extienden la vida de una persona por una década antes de ser requerida nuevamente para realizar otra visita a la mesa del cirujano. Pero en todo caso, cualquier persona que haya pasado por una afección como la de Cabeza de Vaca, sabe que queda limitada y que para evitar sufrir un paro cardiaco, necesita modificar radicalmente su estilo de vida. Esto no significa, empero, que el cambio se realice de una vida de notario y abogado de la familia de Vicente Fox y Marta Sahagún a procurador general. Cuando alguien es intervenido del corazón de esa manera, necesita mejorar su estado de bienestar físico y emocional, controlar la presión alta, el estrés y manejar adecuadamente el coraje. Es decir, requiere de estar alejado de todos aquellas exigencias que se le piden a un procurador.

Cabeza de Vaca no está físicamente habilitado para desempeñar su trabajo, y haberlo aceptado, cuando relevó en la primavera a Rafael Macedo, habla de una irresponsabilidad política. Más todavía se le puede criticar al presidente Fox, quien sabiendo de la intervención cardiovascular a la que fue sujeto su amigo, lo nombró en un cargo que por sus presiones e intensidades precisa de una persona físicamente plena para cumplir adecuadamente su función.¿Explicaría la enfermedad de Cabeza de Vaca la manera tan frágil y errática como ha manejado la PGR? No se sabe. La falta de mecanismos de rendición de cuentas, como el que ese cargo deje de ser designado por el presidente sin que ningún otro órgano del Estado, como es el Senado en otras naciones, ratifique la designación, impide saber la respuesta porque el procurador no tiene que dar explicaciones a nadie salvo a su jefe.

Esta discrecionalidad, que es un resabio del viejo autoritarismo presidencialista mexicano, hacen más opacos los procesos de gestión y eficiencia de funcionarios claves como el procurador, y deja abierta la posibilidad, como este caso, a la ligereza del presidente Fox de haber nombrado a un amigo en ese cargo clave, que ni sabe del tema ni está físicamente capacitado para cumplirlo. Las consecuencias para el gobierno por la frivolidad del nombramiento de Cabeza de Vaca han sido negativas, y el impacto se ha trasladado rápidamente a los mexicanos. Si el gobierno de Estados Unidos, como están hablando en Washington, decide hacer público el expediente médico del procurador general, uno de los pocos interlocutores que tiene el gobierno foxista con el del presidente George Bush quedará desguarnecido y vulnerable, sujeto a presiones o a esos chantajes elegantes que acostumbran en Washington con sus aliados. En cualquier caso, será México el que quede expuesto por los malos manejos de Cabeza de Vaca en el caso de Los Zetas, quien no deja de lanzarse triples saltos mortales desde un trapecio, sin red de protección.

[email protected]

[email protected]