EL-SUR

Viernes 19 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

El camino de la ley 

Jorge Camacho Peñaloza

Junio 03, 2016

Si la justicia existe, tiene que ser para todos; nadie puede quedar excluido, de lo contrario ya no sería justicia. Paul Auster.

De todos los inventos de la humanidad, sin duda la ley es uno de los más grandes, el recurso por medio del cual ha logrado su preservación, como emulando el orden natural, las leyes creadas por el ser humano, le han permitido vivir en relativo orden social, independientemente de los momentos históricos de violencia, revoluciones y guerras, éstas siempre han decantado en nuevos órdenes jurídicos que le dan una nueva cohesión y vinculación a las sociedades.
Las leyes a pesar de su naturaleza coercitiva, obligatoria, tienen como esencia y finalidad que el hombre y la mujer vivan en libertad, que estén protegidos por las disposiciones en beneficio de todos, de sus derechos, bienes y vidas, que tengan acceso a la justicia, las oportunidades y a pertenecer a la misma comunidad.
Además la ley es el instrumento inventado ex profeso para resolver uno de los más grandes problemas de la humanidad: el conflicto entre los mismos miembros de la sociedad y entre éstos y sus gobernantes, milenariamente la ley ha demostrado que es el recurso más eficiente para dirimir conflictos en la sociedad, que es impensable sin la ley, pues la violencia ha sido históricamente un momento de debacle social.
A estas alturas de la historia la ley se ha encarnado en instituciones internacionales, no se agota en las fronteras de un país o nación, hay tribunales metanacionales que pueden hacer justicia si las leyes nacionales no lo están haciendo.
Los maestros que están en contra de la reforma educativa tienen el camino de la ley y las instituciones y los tribunales para hacer valer sus argumentos con los que se sienten perjudicados en sus derechos por la reforma, por ello bien hecho han interpuesto solicitudes de amparo en Acapulco, Iguala y Chilpancingo, ese es el camino.
El diálogo con las autoridades y los poderes públicos para ventilar la posibilidad o no de abrogar la reforma educativa, es otro camino por el sendero de la legalidad, no es incendiado al estado, no se puede exigir justicia cometiendo injusticias contra terceros; a la misma sociedad, pareciera absurdo exigir justicia violentándola al mismo tiempo.
No es con violencia ni generando malestar a la ciudadanía, como los maestros o cualquier otro gremio o individuo, debe hacer valer sus derechos o exigir justicia.
Estamos viviendo en la época de la ley, vientos de cambio que empiezan a permear en la conciencia ciudadana y comienzan a utilizarse los canales debidos y dispuestos para hacer valer los derechos que apreciemos como violados.
Los ciudadanos de Guerrero deben tomar plena conciencia de que se gana más haciendo uso de la ley y las instituciones, ejerciendo con ello su total y pleno derecho a exigir impartición de justicia.
De acuerdo con los resultados que presentó el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública, Cespo de la Cámara de Diputados en marzo de 2015 y que se derivan de una investigación coordinada por la institución con sede en Estados Unidos, World Justice Project, con el fin de diagnosticar el Estado de derecho y los sistemas de justicia, en el caso de México, la clasificación del Índice del Estado Mundial de Derecho, efectuada por la institución anotada, ubica a nuestro país en el lugar 79 de un total de 99 naciones examinadas.
Queda claro que hay mucho por hacer, empezando por la educación cívica y de la legalidad que el Estado está obligado a impartir a sus gobernados, a su vez, éstos deben además de capacitarse y ejercitarse participando de manera activa en sucesos de civismo permanente, deben hacer valer sus derechos a través de los diferentes mecanismos y vías que están dispuestos en la ley para guardar el Estado de derecho de todos los y las mexicanas.
El camino de la ley entonces, resulta ser el único camino viable para garantizar el Estado de derecho, garantizar la paz, la armonía, la concordia y el respeto pleno de los derechos de todos los ciudadanos de nuestro país; hágase entonces uso correcto de las instancias respectivas para tal efecto.
Bien por aquellos maestros que una vez más nos dan ejemplo de civilidad, respeto, legalidad y congruencia, presentando sus solicitudes de amparo para defender sus derechos y no con actitudes vandálicas.
Vuela vuela palomita y ve y dile: A los maestros que están buscando el camino de la ley, que de esos nos enorgullecemos como guerrerenses, que a todos los demás que gozan del mitote y el bloqueo, que se atengan a las consecuencias porque en una de esas, van a dar hasta el bote.