EL-SUR

Lunes 22 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

Organización de empresas indígenas cumple cuatro años

Margarita Warnholtz

Octubre 19, 2018

Esta semana estuvo en México la Relatora Especial de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas, Victoria Tauli-Corpuz. Vino para presentar el informe sobre su visita del año pasado a nuestro país, informe sobre el que escribí en este espacio el 24 de agosto pasado. Sin duda alguna, su presencia fue muy importante para la difusión del contenido de su informe, pues se había hablado muy poco sobre el mismo en los medios de comunicación.
En la presentación del informe me encontré a Cecilio Solís Librado, quien me presentó a Vicky Tauli en mayo de 2009 en la sede de la ONU en Nueva York, cuando ella era presidenta del Foro Permanente de las Naciones Unidas para las Cuestiones Indígenas. En esa ocasión él asistió al foro para exponer su propuesta de crear una cámara empresarial indígena mexicana y la hoy relatora lo acompañó.
Aproveché el encuentro con Cecilio Solís para conversar con él sobre el proyecto de la cámara indígena empresarial, cámara que todavía no se logra formar como tal, lo que no ha impedido que el proyecto siga adelante y que muchas empresas estén ya organizadas alrededor de éste.
El 11 de octubre de 2014 Cecilio Solís, representantes de 83 empresas indígenas y de comunidades locales y un equipo de trabajo, formaron la Federación Indígena Empresarial y de Comunidades Locales de México. Como siguen recorriendo camino y fortaleciendo capacidades para convertirse en cámara, la abrevian (o nombran) CIELO, es decir, con la C de cámara.
A cuatro años de su fundación, CIELO cuenta ya con 182 empresas miembro, localizadas en 22 estados del país y pertenecientes a 33 pueblos indígenas diferentes. Son empresas de todo tipo de productos y servicios: transporte, artesanías diversas, servicios turísticos, mezcal, vinos, productos agropecuarios y del bosque, joyería, textiles, velas, sal, materiales pétreos, agua purificada, alimentos envasados y un largo etcétera.
El equipo de CIELO apoya a las empresas en el fortalecimiento de capacidades materiales e inmateriales. Proporciona asesoría legal y contable, imparte cursos y talleres de capacitación, gestiona recursos, elabora la imagen corporativa de las empresas y las ayuda en la comercialización, entre otras cosas. Para todo ello cuentan con un equipo multidisciplinario y tienen convenios con varias universidades. Las empresas integrantes de la organización aportan una pequeña parte de sus ganancias para mantener la oficina central funcionando y para todo lo demás consiguen recursos de diversas fundaciones o instituciones.
CIELO y sus empresas tienen una visión sustentable de aprovechamiento no consuntivo de los recursos naturales, y trabajan por la inversión de impacto en los territorios de los pueblos indígenas bajo tres ejes: económico, sociocultural y ambiental. El económico consiste en impulsar a las empresas para generar empleos y dinamizar la economía local. El eje sociocultural se refiere principalmente al arraigo, a que las personas no tengan que migrar por falta de desarrollo económico en sus lugares de origen. Solís explica que “si disminuye la migración se fortalecen la familia, el tejido social, el idioma y la cultura de la comunidad”. El eje ambiental se refiere a la conservación del medio ambiente a través del aprovechamiento sustentable de los recursos naturales.
En los cuatro años que lleva funcionando CIELO han logrado capacitar a más de mil personas y colocar en diversas tiendas los productos de las empresas, además de aumentar el número de integrantes de 83 a 182.
Hoy viernes 19 de octubre inauguran su primer local comercial propio en Xochimilco, Ciudad de México. Tendrán servicio de restaurante, venta de productos de las empresas y una pequeña sala de proyección.
Si continúan por ese camino, sin duda lograrán ser cámara empresarial en poco tiempo.