Acapulco, Guerrero, 8 de julio de 2020. El gobernador Héctor Astudillo Flores insistió en pedir a la gente que acate las medidas sanitarias y lamentó la muerte de más de mil personas por el Covid-19 en el estado. Subrayó que “todas estas vidas que se han perdido no deben pasar en vano, tenemos que aprender la lección”.
Dijo que tocó un momento muy difícil de la pandemia y “no hay en este momento la manera que yo les diga que la pandemia está controlada, sigue el contagio, el contagio sigue caminando y lo que tenemos que haces es evitar contagiarnos y si nos contagiamos, si tenemos síntomas, inmediatamente atendernos porque en la medida que se atiende rápido es en esa medida que uno salva la vida”.
Agregó que se tiene que tener claro que es una realidad, que el Covid-19 “no es juego, no es una mentira y cada quién tiene que poner su parte para que entre todos podamos cuidarnos más y que Guerrero pueda salir adelante”.
Astudillo Flores afirmó que fue muy difícil salir del semáforo rojo al naranja, que “se tiene que procurar seguir en naranja y la mejor manera es cuidarnos”.
Durante el mensaje de mediodía desde el hospital Raymundo Abarca Alarcón de Chilpancingo, dijo que se trabaja en cómo mejorar la atención en el grave problema que se tiene por la pandemia y recordó que se estuvo en una grave crisis hospitalaria hace mes y medio cuando se saturaron los nosocomios de la capital y Acapulco.
Astudillo Flores informó que en dicho nosocomio fue colocado el hospital móvil de 25 camas que donó el gobierno de Estados Unidos a México y que la Secretaría de Salud envió a Guerrero para ampliar las camas Covid-19.
Texto: Karina Contreras / Fotograma tomado de Facebook
